treinta y cinco.

707 96 7
                                    

Me senté en mi sitio asignado para la clase de Matemáticas y miré mi móvil. Sin querer pulsé en el botón de cámara, activándose ésta. Entonces pude apreciar en la cámara interior que tenía unas ojeras iguales o peores que las del día anterior. Quizás sería a causa de no haber dormido estos dos últimos días, todo por el nerviosismo de saber quién era aquella misteriosa persona, PJS.

Pero me alivió el hecho de que hoy le conocería, ya que posiblemente esta noche dormiría mucho mejor y al día siguiente dejaría de tener ojeras. Malditas ojeras.

La clase de Matemáticas comenzó y cogí mi móvil. Hablé con él durante un rato, pero nada interesante, simplemente decidimos el lugar y la hora para encontrarnos y algunas tonterías más, diciéndonos que estábamos impacientes por conocernos, aunque algo nerviosos.

No pude evitar quedarme dormida después de terminar la conversación. No es que me afectara el hecho, ya que esta clase me daba soberanamente igual, pero el sonido del timbre se hizo presente y me despertó, provocando que mi corazón latiera rápido a causa del susto; eso sí me asustó.

Las demás horas pasaron sorprendentemente rápidas y por fin pude irme a casa. Deseé tumbarme en mi cama y dormir hasta que mi alarma del móvil sonara y tuviera que prepararme para lo que esperaba, y eso fue exactamente lo que hice. Al despertar, escogí mi ropa y puse eyeliner en mis ojos, ya que me gustaba cómo quedaba en mí. Oh, y que no se me olvidara aquel tapa-ojeras, o como se llamara.

unknown || park jisungWhere stories live. Discover now