Un cachorro embarazado [En Edición]

Segundo Mes Parte 1: La Decisión de Katz

-Ya tan solo faltaban unos cuantos días para que Coraje cumpliera su primer mes de embarazo, durante esos días había comenzado a sentir su vientre hinchado y ganas de orinar con mucha frecuencia, según Kitty esto sería sería normal debido a las alteraciones que su cuerpo estaba sufriendo. La pelirroja también le pidió relajese lo más que pudiera y no se preocupará mucho por las cosas ya que eso posiblemente le afectaría emocionalmente, aún más tratándose de su primer embarazo-

-Pero para Coraje no era tan sencillo como pudiera sonar pues después de darle la noticia a Katz no había vuelto a pasar tiempo con este, imaginaba que este estaría tan abrumado como él por el tema del bebé y no estaba tan alejado de la la realidad pues el mayor se encontraba estresado, no podía pensar con claridad, su jefe se había puesto el doble de pesado última dejándole trabajo extra a todos gracias al error de uno sus compañeros, él lo único que quería era un día libre para poder pasar con su cachorro y ver cómo se encontraba-

-Era miércoles por la noche, Katz se encontraba camino a su hogar para descansar después de aquel martirio que había pasado ese día, estacionó el auto como siempre solía hacerlo y entro a la casa que compartía con su hermana-

Estoy en casa -Anunció con un tono de fastidio miéntras caminaba arrastrando los pies-

Buenas noches Katz -Contestó una voz que el pelirrojo conocía muy bien, no era la voz de Kitty, su voz era sueva pero con tono estricto y muchas veces elegante, no aquella voz era suave y dulce, era la voz de su pequeño cachorro pelirosa, su niño especial al que tanto quería con locura, era la voz de Coraje-

-Al escuchar aquella voz que extraño está casi semana y media su rostro demostró una expresión de sorpresa ya que no lo esperaba en su hogar- Coraje... -Susurro el nombre del menor miéntras se acercaba lentamente al sofá donde esté estaba sentado- ¿Que haces aquí? ¿Ocurrió algo malo, estás bien? -Preguntó con preocupación- ¿Donde está Kitty

Estoy bien, no te preocupes. Kitty fue al supermercado de aquí cerca para comprar cosas que le faltaban para la cena, dijo que en un momento volvería -Contestó para calmar al mayor-

¿Y a que se debe el honor de su visita señorito? -Preguntó actuando de forma refinada he incandose frente al menor como si fuera una persona del siglo pasado y el pelirosa fuera el hijo se algún rey-

Yo... Yo te extraño -Respondió desde su lugar, su tono de voz había cambiado a uno melancólico en un instante, el pecho de Katz comenzó a dolerle, era verdad él tambien se sentía mal pues de cierta forma había descuidado a su pareja-

Perdón​, las cosas no marcharon bien estos días en el trabajo peque -Contó con un tono de frustración, se pusó de pie para sentarse al lado de Coraje y abrazarlo con todo el cariño que tenía para este-

Esta bien, entiendo que tu trabajo es importante -Dijo correspondiendo el abrazo del más alto-

-En ese momento su cerebro le dio la respuesta a la pregunta que todos estos días había estado rondando por su mente, se haría responsable de sus acciones y tendrían al bebé. Lo cuidarían y amarían como lo hacen el uno al otro- El sábado iré a tu casa -Dijo en voz baja sin separarse de su amado él cual asintió con la cabeza pegada a su pecho-

-Los minutos pasaron y ellos no se separaban de aquel abrazo, momento tan especial que ambos habían esperado estos días, 20 minutos pasaron desde aquella escena. Kitty llegó con un par de bolsas a la casa- Coraje, cariño perdón por dejarte esperando aquí pero la fila en el supermercado era gigantesca, además se descompuso la maldita registradora -Decía la mujer entrando a la sala para encontrarse con una dulce escena, su hermano y el menor dormidos en el sofá y Coraje sentado en las piernas del pelirrojo, sacó su celular para tomarles una foto miéntras sonreía de oreja a oreja-