La tarde de ese fin de semana podría haber sido una muy normal y tranquila para el pequeño coraje, quien seguía lidiando con los distintos síntomas del embarazo.
Por el contrario a lo esperado por el pelirosa, aquella tarde no podría pasarse todo el tiempo recostado en su cama acariciando su vientre mientras susurraba cosas al pequeño bebé que crece dentro de él.
–Coraje, cariño debemos darnos prisa. Tu abuela lleva meses organizando tu baby shower desde que a Justo se le salió decirle por teléfono– Dijo Muriel llamando al menor desde el pasillo. Aún recordaba como una mañana aquella mujer que parecía no soportarla llegó de sorpresa a su casa hablando sobre lo que había planeado para el menor.
–Ahora voy– Respondió el muchacho saliendo lentamente cuidando cada uno de sus pasos.
–¿Te ocurre algo nene? No pareces muy cómodo– Comentó la mujer.
–Los pies, me están matando– Desde hacía unos días las piernas de Coraje parecían querer estallar en cualquier momento, sumándole a eso el peso extra que había adquirido en los últimos meses. Causaba un dolor insoportable para el ojiazul.
–Descuida, supongo que eso es algo normal en todo embarazo. Le diré a Justo que vaya preparando la camioneta por mientras– Mencionó para salir hacia la cocina en busca de su malhumorado marido. Coraje soltó un suspiro de pesadez sujetándose del barandal de la escalera bajando lentamente cada uno de los escalones, una vez en la planta baja fue mucho más fácil llegar a la entrada donde los adultos lo esperaban.
Sin pensarlo mucho se dirigió a la parte trasera del vehículo pero fue detenido rápidamente por Muriel quien le dijo que entrara a la cabina pues ella iría otras para evitar cualquier cosa. No muy convencido Coraje entró, tomando asiento junto a Justo que mantuvo el ceño fruncido durante todo el camino hasta la casa de su madre, quien al verlos llegar lo primero que fue correr a abrazar con mucho amor el pequeño festejado del día.
–¿Qué tal te va con los síntomas del embarazo? Te apuesto que son horribles– Bromeó la mujer sin soltar al pelirosa quien no pudo evitar reír. Por su parte Muriel, acostumbrada a la indiferencia de su suegra simplificar se quedó de pie junto a su esposo que parecía haber fruncido el entrecejo aún más que antes.
Dentro del hogar de la anciana se encontraban Bonny, Kitty y Christine, la madre de los gemelos, junto Germaine a la madre de Le'Cuack terminando de dar los toques finales al lugar antes de que llegaran el resto de invitados. Sobre decir que al verlo entrar las 4 se fueron contra él llenándolo de preguntas sobre cómo se encontraba, sobre todo Christine, que era la primera vez que lo veía en ese estado.
–¿Y quién es el padre?– Aquella pregunta salió de parte de la madre de Katz, Coraje quedó petrificado al instante. Era obvio que al verlo haría aquella pregunta pero no espero que sería tan rápido, Katz y el habían acordado hablar con los padres del pelirrojo cuando su trabajo se lo permitiera y hasta la fecha ese día no había llegado.
–¡Mamá, no deberías ser tan indiscreta!– Kitty fue quien intervinó al ver que el pelirosa no decía ni pío.
–Solo es curiosidad, pero no es necesario que nos lo diga sino quiere.– Apoyó Germaine levantando los hombros.
Luego de eso el resto de invitados comenzaron a llegar a la residencia, en su mayoría se encontraban amigas de la madre de Justo y algunas otras de Muriel. El baby dió inicio con los típicos juegos como intentar adivinar el tamaño de la panza de coraje o el concurso de comer papilla.
Un par de horas más tarde aparecieron Cajun junto a Le'Cuack en el auto del primero. La celebración avanzó sin mayor contratiempo, el ambiente era muy agradable y como no, si Justo no se veía por ningún lugar, cosa que la mayoría parecía ignorar por completo. Horas más tarde, cerca de las 06:00 PM apareció Katz con dos enormes obsequios para sus dos amores, dejó ambos en la mesa de regalos para luego acercarse lentamente hacia el pelirosado.
–Hola...– Susurró al oído de Coraje, sorprendiendolo. Una una gran sonrisa de alegría apareció en el rostro del menor quien no dudó en saltar a los brazos de su pareja. Salieron de la residencia tratando de no ser vistos por nadie. –¿Así que mamá preguntó por el padre del bebé?–
–Si...– dijo Coraje asintiendo con la cabeza gacha.
–No tienes nada de que preocuparte pequeño, pedí unas vacaciones en el trabajo. Asi que muy pronto le daremos la noticia a mis padres.– Respondió el pelirrojo acariciado con ternura los rosados cabellos de su niño, sin embargo ninguno de los dos percivió el par de miradas que los observaban a lo lejos, una con enojo y frustración y la otra con una mirada de cariño y hasta cierto punto satisfacción.
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Sé que el capítulo queda algo corto, pero les prometo que para el siguiente se viene algo muy interesante e importante dentro de la historia.
Los nombres de la madre de Katz y Le'Cuack me los inventé (obviamente :v)
Christine simplemente salió de la nada y Germaine es el nombre el nombre de un personaje que me gusta mucho, Germaine Avadonia. Quien sea fan de la saga de canciones vocaloid, Evillious Chronicles sabrá de quien hablo.
Por cierto, para quien le interese abrí una cuenta en Facebook (Que uso pa' acosar a mi Crush alv) y pensaba subir adelantos sobre las historias, aparece como Nathan Netsuma
Weno, eso es todo. Arrivederci mis amores :v/
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Un cachorro embarazado [En Edición]
RandomCoraje, un Doncel pelirosado de 17 años de edad a quedado embarazado de Katz, su novio de 26 años, ¿como tomara la noticia? ¿qué experiencias vivirán en los meses de gestación del menor?