Prejuicio

"Voy llegando"

Una sensación de levitación me recorría el cuerpo, en especial mis piernas.
Los párpados por el contrario me pesan un poco, los abrí poco a poco, dejando ver que me encontraba recostada en el asfalto frío y duró, de inmediato me pare sobresaltada *¿si me llegará a chocar un coche?* observé un poco más el entorno sin despegarme de la pared a la que salté... Es de noche, estoy a dos cuadras de la parada del colectivo, también noté que algo jodido debió suceder, y que a unos metros está la policía cortando la callé.
Me causa curiosidad como a cualquiera, pero no estoy segura de si quiero acercarme *Mejor voy a casa*
Dos pasos a la izquierda me acordé... ¡Mi cartera! no la llevó conmigo, al ver inconscientemente hacia lo que parece una zona restringida como marca la cinta de la policía, veo mi cartera, el brillo del broche que la decora es lo que me llamó. Corrí para buscarla, pero la presencia de un policía que se acercaba a mi me asustó y trajo una inmediata señal de alto a mi mente.
Más sorprendente fue el hecho de que el policía cruzó casi rozando y su actitud era indiferente a mi presencia, como si no estuviera ocupando el lugar físicamente. Con escalofrío constante en la nuca, avance dando pasos largos pero pausados.

Vi mi cartera, está estaba aferrada a una mano... mi cuerpo se tenso, a su compás mis manos tomaban la forma de una persona en estado catatónico, se me dificulta el respirar y mi visión reduce su nitidez.
La mano que se aferraba a mi bolso era perteneciente a un cuerpo sin vida, una masa con forma humana; tenía un aspecto el cual conocía, un rostro que miraba todas las mañanas en el espejo de mi baño, prendas desgarradas que hace no tanto cubrían y decoraban al mismo tiempo un cuerpo... no, un cuerpo cualquiera no, aquel era o parecía ser mi cuerpo.

Pero, ¿Cómo puede ser? Hace menos de... 5 horas creó, estaba volviendo a casa, no recuerdo que haya sucedido algo fuera de lo normal en ese trayecto.

Volví la vista a ese cuerpo (no me acostumbro a la idea de que se trate del mío); al verla sentía un sentimiento de pesadez, se veía más pálida de lo normal, sus finas prendas estaban rasgadas y manchadas con barro y sangre, su rostro a lo contrario que muestran en series y películas, se veía vacío, inexpresivo, como si solo se tratara de un conjunto de piezas formando un algo ensamblado a otro conjunto de piezas. Sus piernas llenas de huellas y su ropa interior a penas por encima de sus rodillas al rojo vivo... Y su cuello, rajado de par a par, como el corte de un carnicero al filetear un lomo.

De inmediato sentí unas inevitables ganas de vomitar, pero aunque la recepción estaba, la acción no podía efectuarla. A diferencia de lo que hago siempre que siento angustia o tengo ataques de pánico, comencé a correr. Cómo si siguiera viva, como si lo que acabo de ver solo fuera una fea escena de un documental.*A mi eso no me puede pasar, a mi eso no me va a pasar*

Aire, el refrescante aire del anochecer pegando en mi rostro es lo que necesitaba. Pero a pesar de estar corriendo, no podía sentir el aire. Era extraño, mi alrededor se veía agitado y mi cuerpo se movía con rapidez, pero no era así con lo que sentía, las acciones se sentían igual que al caminar.

*Tengo que ir a casa, mamá me está esperando, ella me va a calmar*

Pero... ¿Dónde estoy?