Is my Girl (En Edición)

capitulo 9

Hola chicas lamento la demora pero he tenido muchas cosas que hacer 😖😖😭😭

Capitulo 9

Camila se había convertido en una prisionera en su propia casa, tenía que salir a hurtadillas al anochecer gracias a que Lauren se la estaba dando de acosadora profesional.

Había venido varias noches poniendo sus manos en sus ventanales observando hacia el interior, al principio se había sentido molesta pero ya ahora solo sonreía al ver a Lauren tratando de averiguar quién vivía en la casa. Ya sabía que Lauren sabía que la dueña de la casa se llamaba Camila solo quería averiguar si es que era su Camila quien vivía allí.

Para el fin de semana había recibido una llamada de Frank diciendo que el día domingo sería el último día que estarían en su propiedad. Camila había sentido alivio y a la vez molestia de saber que Lauren se iría y no volvería a acosarla.

Volvería a su rutina y dejaría de aguantar las ganas de darle cara a Lauren he implorando que le diera una oportunidad de explicarle quién era y que jamás le haría daño. Que la amaría siempre si es que le da una oportunidad, pero luego pensaba que nada bueno saldría de ello. Que querría beber su sangre siempre y podría matarla y eso ella no estaba dispuesta a permitir, jamás.

Observo el reloj en la mesita de noche se dio cuenta de que ya iban a ser la una de la madrugada, Lauren no había aparecido. Tal vez se había cansado de acosar su casa o tal vez había salido a algún lugar, después de todo era viernes, Lauren era joven y tenía muchas cosas nuevas que descubrir.

Se dirigió al closet y sacó un shorts de mezclilla encima del bikini que llevaba y un top de color rosa. Se calzó sus zapatillas y se dirigió hacia las escaleras. Volvió a mirar su entorno pero no vio a nadie así que salió de la casa por la parte de atrás y bajó los escalones de piedra y camino por la playa. Su cabello se movía junto con el viento cálido que aún había debido a las altas temperaturas del día. A veces deseaba ser humana para volver a tumbarse al sol, sin sufrir daños. El cielo estaba estrellado y la luna llena se veía enorme reflejándose en el agua. Este lugar le había traído paz cuándo decidió comprar el terreno y hacer su casa junto con Dinah. Ambas habían vivido aquí cerca de seis años y después decidieron mudarse a los ángeles. Aquí ya había empezado su Calvario con Dinah. Ella fue la que se marchó primero, después de una pelea grande, después Camila le siguió como una tonta enamorada sin saber que su amor ya no era tan fuerte, si no que era el miedo a estar sola.

Después de un año Camila compró su propia casa, veía a Dinah una vez a la semana y tenían sexo por que ya a ese acto ni siquiera se podía llamar hacer el amor. Ya no había amor solo un cariño fraternal que se negaba en aceptar. Pero eso cambió cuando conoció a Lauren,sus emociones se desbordaron llenos de pasión y deseo. Lauren era como un soplo de vida lleno de luz. Las pocas horas que habían compartido habían llenado a Camila con nuevas emociones, emociones que ya no sentía hacía años. Quería saber mas de Lauren, que es lo que hacía para vivir, con quien vivía, sus sueños más profundos y sus miedos. Pero su miedo a lastimaría era mucho más grande.

Después de dar su caminata nocturna decidió volver y meterse al mar. Su casa estaba oscura y no veía nada fuera de lo normal. Así que decido quitarse la ropa quedando solo con el bikini de color blanco.

El agua no se sentía tan fría contra su piel se sumergió y comenzó a nadar hacia dentro. Y no salió de allí hasta que vio que había nadado bastante lejos, su casa se veía muy lejana. Le gustaba sentirse libre y no pensar en nada más que en el sonido del agua.

Observó por unos momento el cielo viendo la luna que parecía estar encima de ella y volvió a nadar hasta su casa. Salio del agua y se tendió sobre la arena.

Iba a cerrar los ojos pero una voz la hizo sobresaltarse.

-¡Lo sabia maldición!.-Camila se puso de pie y observó a Lauren que se acercaba a ella a paso tambaleante, Camila aspiro y el olor a licor llegó hasta sus fosas nasales.

Lauren se tropezó con sus propios pies y Camila se acercó a ella para sujetarla antes que se cayera.

-¿Qué haces aquí Lauren? Y en este estado.

-Esa pregunta debería estar haciéndola yo maldita desgraciada.-dijo Lauren superándose de ella.

-Te fuiste de nuevo, me dejaste... yo debería golpearte por perra.-dijo acercándose a ella con su mirada llena de furia.

Camila se hizo hacia atrás, llena de escepticismo a causa de la violencia de Lauren.

Pero cuál fue su sorpresa al sentir que Lauren la abrazada y Camila contuvo el aliento. Las manos de Lauren la atrajeron más a su cuerpo y Camila escondió su rostro en el cuello de la chica. Lauren tembló al sentir lo fría que estaba su piel. Pero no se apartó.

-Debería golpearte, pero no puedo yo...no he podido dejar de pensar en ti, se que no nos conocemos, que solo nos hemos acostado una sola vez...pero quiero mas...lo quiero todo.-susurro en su oído, haciendo que Camila se estremeciera.

Camila se apartó y con cuidado levantó su cabeza, su mirada se perdió en aquello ojos que le enamoraban.  Despacio se inclinó y tomó el labio superior de Lauren entre los suyos, Lauren suspiro y Camila sonrió. Beso aquella suave carne y después le dio un pequeño mordisco. Ahora haciendo a Lauren sonreír. Camila tomo su manos y con cuidado se dirigieron a la casa ya que Lauren estaba notoriamente borracha.

-Me gusta tu mansión...aunque solo la he visto por fuera…

-Me alegra que te guste, la verdad es que estar aquí me ha traído mucha paz.-contestó Camila ayudando a Lauren subir los escalones.

Lauren cada pocos minutos le tocaba el brazo, le apretaba las manos o le besaba. Haciendo casi imposible entrar a la casa.

Camila prendió las luces y Lauren la observó con las pupilas dilatadas. Paseando su mirada por su cuerpo deteniéndose en sus senos, Camila bajó la mirada al ver como sus pezones se traslación a través de la tela mojada. Camila sonrió al sentir el aroma a excitación que exudaba Lauren y negó con la cabeza.

-Ven Lauren, vamos a la cama.-le dijo volviendo a tomar su mano.

Lauren asintió y siguió a Camila, Lauren estaba borracha, pero no estaba tan idiotizada para no sentir excitación, deseaba a Camila con cada fibra de su piel. Sus manos picaban por tocarla y sus labios aún sentían a los de Camila. Su corazón latía de manera frenética.

Camila se detuvo en una puerta y abrió. Lauren entró primero gracias a una seña de Camila y se encontró con una cama matrimonial con cubierta con un cobertor color fucsia. Almohadones de color banco y dos mesitas de noche a cada lado, ambas con lámparas de papel.

-Es muy femenino.

-¿Gracias?.

-Lo digo como un cumplido, es muy femenino, como tu-dijo volteando a verla.

-Quiero hacerte el amor Camila.-dijo Lauren caminando hacia ella.