A través de la red

Cuarto capitulo

-Hoy amanecí con ganas de matar.- exclamó él diablo.
Su piel ardía de coraje, lo que más odiaba era la traición y la persona que más amaba, lo había traicionado.
Ese diablo perverso se había enamorado de un hermoso ángel, era puro, casto y hermoso. Una verdadera creación de Dios, tenía defectos porque él no es perfecto. Solo Dios puede ser perfecto, a pesar de todo lo amaba, él era débil pero a la vez fuerte, hacía daño cuando no correspondía y era débil cuando debería ser fuerte.
A pesar de todo, lo amaba, lo amaba, lo amaba.
Me siento vacío, muerto, sin ningún motivo de vivir.
¿Ustedes se han sentido así?
(Sí)
La vida es una decepción muy amarga.
Hay personas que aparentan ser la misma imagen de Dios pero al final resultan ser satán.
Atrapado en un lugar sin salidas, donde no existe entrada. Pero tú estás allí. ¿Magia?
¿Por qué algunas personas se vuelven tan significantes para ti? Que no puedes decirles adiós tan fácilmente, no te puedes rendirse pero rendirse es tu única opción.
Aveces la vida te trae buenas sorpresas que acaban con amargas decepciones.
Aveces es solo una cuestión de tiempo, el tiempo lo "cura" todo.
Aveces, aveces, aveces, aveces, aveces.
Me siento como una grabadora, diciendo lo mismo cada día, mi agonía me consume, la tristeza, todo me está consumiendo, poco a poco. ¿Acaso no merezco ser feliz? ¿No?
¿No puedo disfrutar mi única oportunidad de ser feliz?
Esa persona sonrío con malicia, abrió su boca y dió un agudo:
No.

Me asfixia el aire, me atragante con las mentiras de ese ángel y me volví adicto a su indiferencia.
-Te debería dar vergüenza.- musitó el diablo.
Una hermosa imagen de un ángel se aparece adelante de él.
-¿Por que me debería de dar vergüenza?.- lo miró con indiferencia, con aburrimiento.
-¡ERES UN MALDITO DÉBIL! ¡UN COBARDE DE TU DESTINO!.- gritó con furia, su saliva quemaba y la garganta le raspaba.
-Las personas merecen ser felices. Yo soy feliz y tú eres un amargado, que torturas siempre con lo mismo.- veneno, su lengua escupía veneno.
-No, no, no, no.- me acerqué a ese ángel odioso- no te confundas, tú, serás la persona que te torturas con lo mismo. PARA SIEMPRE.
¿Esto es un sueño?
¿En serio esta es la vida?
No parece, vivo en una completa agonía, en odio y rencor.
¿Acaso no merezco ser feliz?
No

-¡PUTA MADRE!.-
Estaba jadeando, ese sueño de mierda me perturbó mucho, mi mirada se fija en la pared.
¿Por qué habré soñado eso? Son... son puras babosadas.
Suspiré, saque todo ese aire que me contenía, inhale el humo de la mentira, de las drogas y los cigarros.
Ese sueño se me asemeja a mí vida, no sé porque. Pero en serio, parece un acertijo que debo de responder.
Me levanté, estaba frustrado y enojado. Mis pasos se dirigieron al baño, mi vejiga estaba reprimiendo mucha orina.
Saco mi linda ver*a y continuó a hacer mis necesidades, miro hacia arriba y suelto un gemido de la satisfacción, orinar es tan satisfactorio, soltar tus líquidos a un retrete. Me acomodo la ver*a y me dirijo al lavamanos, ahí estoy yo, Levi Ackerman, un hombre con un futuro prometedor, pero lo consumió el rencor y el odio, y por eso soy lo que soy. Un asesino.

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Ese espagueti parecía alambres con salsa, le dolía tanto la garganta a Eren, sentía como raspaba al digerir la mierda de vida que tiene.
-Eren, aún no nos has dicho.- su madre sin despegar su mirada de la comida, dirige su palabra hacia el susodicho.
-Es verdad, Eren, Dinos, ¿por qué terminaste con?.- Parecía que hacía eco su nombre en su mente, que le mencionaran a esa persona, le revolcaba el estomago del asco.
Aún seguía con su mirada perdida, como si solo él estuviera en esa mesa.
-Eren
-Eren
-Eren
-Eren
Parecía un musical, pero esta vez en igual de cantar, solo decían "Eren"
-¡YA PAREN!.- gritaba interiormente, su cerebro le estaba dando una mala jugada. Él no quería decir nada pero él mismo decía en su subconsciente. <<hazle saber que él es una basura>> <<diles, diles, diles, diles>>
-¡ME ENGAÑÓ! ¡ME ENGAÑÓ CON UNA PERSONA QUE YO MISMO CONOCÍA! PERO ME DA ASCO PRONUNCIAR SU NOMBRE. ¿CREEN QUE ES FÁCIL DECIRLES? Fíjense que me engaño, ¿okay?. ¡PUES NO!.- rabia, sus palabras eran de rabia, coraje y odio. ¿Como se sentía Eren? Fatal.
-Eren, nosotros.- sus padres arrepentidos quisieron darle compasión a su pobre hijo, pero esté siguió con el odio.
-¿NOSOTROS QUÉ? "¿REALMENTE LO SENTIMOS?".- imitó la voz de su madre.- ¡ustedes realmente no lo sienten! Ustedes no saben lo que yo sentí.
-No es para tanto, Eren.- le reprochó su papá, con cierto enojo.
-¿No es para tanto? JÁ JÁ, si es para tanto. YO LE ENTREGUÉ 5 AÑOS DE AMOR. PARA QUE A ÉL LE IMPORTARA UN CARAJO.- Su pecho dolía, su voz estaba quebradiza y lo peor que su cabeza ardía. Él quiere venganza, él se va vengar. ¿Cómo? Aún no lo sabe. Pero lo hará.

Hay cosas raras, dirán e.é pero ya verán lo que significarán esas cosas raras :v ya el quinto capítulo Eren y Levi hablaran <3