Déjà vu

Capítulo 2: Un sueño extraño

Acabé de hacer el trabajo con Óscar y Javi. Fue una experiencia inolvidable el echo de que Javi y Óscar  se hicieran amigos; y solo porque Óscar le prestó un manga de yaoi a Javi. Yo creo en un posible Oscavi, se les ve muy unidos.

Al anochecer María ya empezaba a tirarme caña a través del "direct" de instagram. (Probablemente ni si quiera tuviera mi número). Bueno, esta vez ya pasaba de seguirle el rollo; ¿para qué? si probablemente mañana estará flirteando con Luis, incluso la semana que viene podría ligar con mi vecino de abajo que recientemente acaba de mudarse. A si que como buen amigo le dejé en visto. Puede que ni el demonio tuviera castigo mejor.

Cuando me fui a la cama comencé a pensar; es de esas veces en la que la gente piensa en el desarrollo del universo o en cómo le ha ido el día o simplemente pensar en cosas que le gustaría que le pasaran.

Esta noche estaba más pensativo que nunca. Pensaba en los déjà vu que me habían sucedido hoy; ya había tenido 3 en un día y eso que suelo tener uno cada 1 semana aproximadamente. Mi padre los apuntaba en su cuaderno para descifrarlos mejor. ¿Qué podrían significar?

                                                                    *  *  *

Estaba sentado en un banco cualquiera mirando la gente. El tiempo pasaba extremadamente rápido, de repente retrocedía para luego volver a avanzar; y así varias veces. Cuando de repente creía que todo ya había parado, se acercó una figura joven, de unos 20 años: era mi padre de pequeño. Me susurró al oído: Tranquilo, todo va a salir bien. Me inyectó algo y de repente comenzaron a salir luces de colores. Cada detalle hacía todo más surrealista que lo anterior...

Y me desperté. Me desperté un poco confundido; con esa sensación de cuando te despiertas y preguntas: ¿Qué acabo de soñar?

Le conté el sueño a mi madre por la mañana y me dijo que podría ser un sueño premonitorio; que pueda prever algún acontecimiento futuro. 

Me gustaría no pensar en ello.

Volví a tener un déjà vu al entrar a clase; ya no me parecía extraño tener el primero a las 8:00 de la mañana. Hoy la clase comenzaba con mates, era difícil resistir la tentación de no dormirse; había dormido mal esa noche y además a Pitágoras no le caigo muy bien.

Mirando la ventana entrecerré los ojos y pensé: ¿Qué podría significar el sueño? ¿De verdad tendría algún sentido representar eso?

Cada vez fui durmiéndome más lentamente; esta vez estaba con mi padre y me llevaba a una especie de sala extraña con muchos escáners y mucha cableado. De repente me paró delante de una especie de urna y me dijo varias veces:

  — Zacarías... ZACARÍAS... ¡ZAK!¿Me estás escuchando? 

De repente, medio dormido, me desperté en clase. Era el profesor que me estaba llamando.

  — ¿Eh?(Medio dormido) Sí, sí; las oraciones seudorreflejas son las que...— el profesor me interrumpió.

  — Estamos en la clase de Matemáticas, Zacarías. Te importaría ir con el tutor?

  — Eeeemmm en absoluto— dije un poco mareado, dado que me acababa de despertar.

Cuando fui al despacho del tutor, me volvió a pasar. Esa maldita sensación de haberlo vivido antes cada vez se hacía más presente en mí...  

                                                   *  *  *

Por la tarde fui a clase de piano; allí me encontré a mi gran amiga Andrea, que también toca el piano. Teníamos un duetto de piano. ¿Adivinad qué pasó?

Esa manera de que Andrea presionara las teclas tan suavemente como si de un ángel se tratara solo podía significar una cosa; ya me sonaba de algo: era un déjà vu de nuevo.

¿Qué pensábais? ¿Que mientras tocamos juntos nos fuéramos a tocar las manos y acto seguido nos mirásemos comprendiendo que éramos el uno para el otro?

¡Por favor! Eso solo pasa en las películas. ¿No veis que se están cargando el romanticismo en España? Por ejemplo, en Estados Unidos las bolsas del supermercado no llevan asas; y así a la persona se le cae la compra, entonces, llega un muchacho/a joven y atractivo/a a ayudarte; en ese momento vuestras manos se rozan y os sonreís el uno al otro.

Nueva relación creada= Nueva familia= Más personas en el país.

Pues en España es un poco diferente: las bolsas del Mercadona llevan asas y no ocurre lo anterior.

Y luego se quejarán de las tasas de natalidad...

En todo caso, Andrea es mi mejor amiga y nunca me enamoraría de ella, definitivamente. Bueno, he de admitir que me mola un poquito. Bueno, solo un poquito. ¡No quiero ver a gente inventando fanfics de nuestra relación; que quede claro! (Bueno, en realidad no me sorprendería si lo hicieran).

Otro ejemplo es el de llevar los libros en la mano en vez de dentro de la mochila. ¡Todo son ventajas! Ejercitas los brazos, y si se te caen, esa persona especial te lo recogerá y sucederá eso del roce de manos y de la mirada y bla, bla, bla...

La única inconveniencia es que es un poco molesto el hecho de tener una montaña de libros encima y no poder ver nada de lo que tienes delante. Por lo demás, todo son ventajas. (Científicamente demostrado en la universidad de Oxford).

Volví a casa, cené y me fui a dormir. Mañana sería sábado y si dormía mal daba igual porque no había colegio...

* * *

Esta vez soñé con una especie de conflicto que dejaba la Tierra medio-despoblada. Mi padre me decía que no me preocupara de nada y que fuera con él, y me volvió a llevar a su laboratorio; que parecía un búnker de guerra. Por qué todo era tan extraño?

Me volví ha despertar con una decisión: preguntar a mi madre el paradero de mi padre.

— Hijo, creo que este no es el momento más adecuado— dijo mi madre con un tono despreocupante.

— Debo de saberlo— y a continuación le expliqué lo ocurrido.

— Ya veo... Toma, descúbrelo tú por tu cuenta— me entregó una especie de llave extraña con una tarjetita que ponía "Despacho", también ponía un código detrás: #DJV

Tenía la sensación de que mis padres me ocultaban algo, pero no sé el qué. ¿Quién sabe, tal vez estén inventando una máquina de batalla indestructible, por si a Donald Trump o a Putin les dan por iniciar la 3a guerra mundial.