A través de las palabras #AT2

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Micaela

Después de haber visto la montaña de La bella durmiente y habernos tomados varias fotos, íbamos a ir a visitar otro lugar, pero comenzó a llover fuertemente y se canceló la excursión.

Llegamos al hotel a las 6 pm y teníamos toda la noche para pasear por el gran hotel, había una discoteca, gimnasio, cafetería, y hasta había un pequeño cuarto donde proyectan películas.

―¿Te veo más tarde? ―El brazo de Mateo se enrollo en mi cintura acercándome más a él.

―No voy a poder, tengo planes con Ariana―respondí cambiando la sonrisa de mi rostro―Pero...mañana te lo compenso―me acerque a su rostro esperando tocar sus labios con los míos.

Estaba a punto de darle un beso, pero sentí una mano jalándome el brazo por detrás de mí.

―Ya Romeo deja a Julieta por un rato, en toda la excursión no la soltaste―río mientras me alejaba de él.

―Te amo―dije.

―Y yo a ti amor ―Le oí decir antes de entrar al edificio.

Ariana salía y entraba del baño cada cinco minutos con un nuevo atuendo, esta es la quinta vez que entra al baño y se está demorando más.

―¿Qué opinas? ―dijo al salir.

Traía puesto unos jeans y una blusa café que dejaba su vientre desnudo, se veía hermosa. Su rubia cabellera descansaba en sus hombros y espalda, se dio una vuelta y comencé a aplaudir.

―Perfecto―sonreí.

No sé si Mateo ira a la fiesta esta noche, lo más probable es que si, sin embargo no me ha enviado ni un mensaje invitándome a la dicha fiesta, mire la pantalla de mi móvil y no había ningún mensaje.

―Ahora es tu turno―me empujó hacia adentro del baño y me dio unas prendas.

Después de probarme los cinco atuendos, me quede con los típicos jeans y una polera color gris. Ariana protesto al principio pero al final dijo que después de todo me quedaba bien. Ya eran las nueve de la noche, y decidimos que ya era hora de ir a la fiesta. No miramos al espejo y dimos lo último toques, o bueno Ariana me las dio a mí.

Oí que alguien tocaba la puerta, por un momento crei que era Mateo, pero era Leonel que ingreso dándole un apasionado beso a mi mejor amiga, me saludo y Ariana me dijo que ya era hora de irnos. Sí, me siento un poco triste porque Mateo no ira conmigo, o no me recogió como lo hizo Leonel con Ariana.

Cerré las puerta atrás mío y nos dirigimos al elevador, marque el botón y el letrero en la parte de arriba comenzó a nombrar : Uno, Dos, Tres; luego de eso sonó un pitido y las puertas del ascensor se abrieron, y no sé si tengo poderes psíquicos para llamar a Mateo, pero él estaba ahí, dentro del ascensor con una rosa en si mano, salió del elevador y me dio un dulce y suave beso.

―Hola―me saludo.

―Pensaba que no ibas a ir―recibí su rosa.

―Y perderme esta noche contigo―sonrió―, eso no lo dejare pasar.

Los cuatro entramos al ascensor, el ambiente era cálido y se sentía un olor a rosas.

―Mira que romántico señor Hilton―bromeo Leonel.

―Estaba pensando en hacerle la escena de 50 sombras de Grey en el ascensor o esto―Le di un pequeño golpe en su abdomen.

Me apego a él y esperamos a que el ascensor descienda. Ya en el piso uno nos dirigimos al lugar de la reunión y llegamos en unos minutos después de pasar por unos edificios del hotel.

Las luces se podían ver desde afuera, era un lugar abierto junto a la piscina. Ya podía oler alcohol desde aquí, el ambiente está muy caluroso, la música hacia retumbar mis oídos y el piso literalmente, había una mesa de snacks en un lado y yo ya me veía ahí comiéndome todas esas deliciosas frituras. Mis compañeros del salón saltaban, reían y por supuesto bailaban hasta destrozar el piso.

Fuimos a la barra de bebidas y pedimos unas bebidas, pero no las bebidas no tenían mucho alcohol, sin embargo se podía percibir el olor a alcohol, mire hacia los lados y vi a unos hombres (turistas creo) que bebían botellas de licor.

―Así que ustedes...¿ya? ―Mateo alzo la mirada.

―No, solo es una amiga―se burló Leonel, Ariana le dio unos pequeños golpes y Leonel la agarro de la y la apego a él, ―hace un día que pertenezco a estar rubia hermosa.

―Yo pensando que siempre ibas a ser el mismo mujeriego de siempre―rió Theo―Es broma―aclaro cuando vio la cara de Ariana.

Lo agarre del brazo y lo arrastre hacia donde todos bailaban.

―Solo era una broma―replico.

―Solo quiero bailar―comencé a mover sus brazos.

Mateo comenzó a hacer unos pasos raros y chistosos mientras yo reía. Y no sé como pero yo también comencé a hacer unos pasos que creo nunca había hecho en mi vida, y su estupidez con la mía se fusionaron creando a los dulces y peores pasos de la historia.

Luego de unos minutos sonó una canción lenta, la mayoría comenzó a abuchear sin embargo unas parejas salieron a bailar. Mateo me agarro de la cintura y yo de los hombros, la música comenzó a invadir el espacio, y él y yo nos comenzábamos a mover con lentos pasos mientras me miraba a los ojos.

―¿Te he dicho que tienes los ojos color caca más lindos del mundo? ―preguntó.

―Creo que si―sonreí.

Recosté mi cabeza en su hombro y comenzamos a bailar al suave ritmo de la música, podía sentir su cálida respiración en mi cuello, podía oler su dulce aroma que desprendía de su polo. Ahora solo quiero congelar el tiempo para que nunca se vaya de mí,  ahora solo quiero estar cerca a este torpe castaño que me alegra el día con sus dulces estupideces.

...

Extraño sus comentarios :"v

¡Sorpresa! x2 :"v

"Oí el sonido de la campanilla que está colgada arriba de la puerta principal de este lugar y que suena cada vez que alguien entra. Y en ese momento la miré, entró poniéndose un mechón de su castaña cabellera por detrás de su oreja izquierda. A su costado hablaba por el teléfono una rubia que siempre la acompañaba a todos lados, las dos se dirigieron hacia una mesa que estaba casi al fondo de la cafetería, se sentaron y un mozo fue a tomarles la orden.

― Tú te quedas con la castaña y yo con la rubia―bromeo mi amigo.

― Tengo una novia―Le di otro sorbo a mi café."

A través del teléfono-Nueva edición

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