Capítulo dedicado a into_you12
Me encontraba en la Universidad, aún faltaban dos horas para salir de clases, iba subiendo las escaleras sola, mis amigas se habían quedado en la cafeteria. En el último escalón escuche algo que no podía creer.
-Ella es una zorra.- dijo uno de los chicos más detestables de la Universidad, sólo con escuchar su vocabulario, era desagradable. -Justo viene llegando.- agregó viéndome.
Subí el último escalón y lo mire, no iba subiendo nadie más y sólo estaba él con otro chico, mire al pasillo, estaba mi amigo, quien al ver todo se puso de pie y se acercó a nosotros.
-¿Es conmigo?- pregunté alzando una ceja.
-Con quien más, eres de las pocas que anda atrás de chicos con novias.- dijo sin importarle nada, no sabía porque sus palabras si con él nunca había hablado.
-No le hables así.- dijo mi amigo, Ruggero, con un tono de voz molesto.
-Puedo hablarle como quiera.- dijo mirándome de pies a cabeza.
-¿Por que dices eso de mi?- pregunte molesta. Me molestaba que dijera algo de mi, sin realmente conocerme.
-Es lo que dicen, es lo que acabó de escuchar.- con mi ceño fruncido lo mire, no andaba atrás de chicos con novias. -Sólo amigos y andas atrás de ellos.- dijo mirando a Ruggero y luego a mi, inmediatamente comencé a unir cabos. La novia de Ruggero.
Nunca la entenderé, por días es amable y otras veces veo odio en ella sólo por ser amiga de su novio y llevarnos como hermanos.
Mire a Ruggero, esperando que dijera algo, pero por lo visto él también sabía quien lo había dicho. Respire ondo antes de perder el control.
-No deberías hablar de ella sin conocerla.- dijo una voz a nuestras espaldas. Reconocía esa voz, Agustín.
-¿Vas a defenderla?- pregunto el desagradable de Marcos.
-Si, porque no creo que sea lo que estas diciendo.- dijo ya junto a mi. Lo mire y le agradecí con la mirada.
-Tampoco la conoces.- dijo mirando con desagrado.
-Da igual lo que digas...- dije mirándolo fijamente. Me estaba enojando demasiado y cuando lo hacia muchas palabras despreciables salían de mi boca. -se quien soy y eso es lo que me importa, me vale lo que estés diciendo o quien lo dijo en un principio.
Me di la media vuelta y comencé a bajar los escalones, no podía seguir viéndolo. Llegue a la primera planta, mire a los alrededores. Unas sillas estaban vacías en el fondo, camine hasta ellas y me senté. Cerré mis ojos, respirando ondo durante unos segundos, hasta que escuche su voz.
-¿Estás bien?- pregunto frente a mi. Lo mire unos segundos.
-Si, pero me enoja que digan cosas sin saber.- dije jugando con mis manos en mi regazo.
Después de varios segundos lo mire y muchos recuerdos llegaron a mi. Ese momento donde lo mire por primera vez, donde descubrí su hermosa sonrisa.
Estábamos en el pasillo junto con mis amigas conversando de diferentes temas, con una de ellas estábamos riendo hasta que lo vimos pasar, llevaba una hermosa sonrisa en su rostro.
Lo mire fijamente, nunca lo habíamos visto de esa manera, él llevaba meses en la Universidad, pero no lo había visto de esa manera, me cautivó su sonrisa.
-¿Por qué no lo habíamos visto?- pregunto mi amiga, la mire y me encogí de hombros.
-No se, pero esta muy lindo.- dije mirándolo nuevamente, él miró hacia donde estaba, su mirada conecto con la mía, seguía sonriendo y eso fue suficiente para seguir teniéndolo en mis recuerdos.
-Si, bastante.- mi amiga también lo vio con una sonrisa. Minutos antes habíamos estado hablando de chicos, ambas estábamos solteras y de alguna manera esperando encontrar un chico. -Te lo dejo.- dijo mirándome mientras alzaba una ceja con una sonrisa pícara.
Comencé a reír, ella siempre tratando de escapar de los chicos. De esa manera, los días fueron pasando y cada vez lo miraba más, mis amigos bromeaban con respecto a él, lo que hacía que él estuviera cada vez más presente en mis pensamientos.
Mi amiga, la misma que me lo cedió, comenzó a investigarlo, hasta obtener la información más importante, como su nombre, edad, y sobre todo si tenía novia, lo cual hizo que no me ilusionara con él, pero fue imposible, sin poder evitarlo a cada momento soñaba con una vida junto a él, más cuando estábamos conversando y me regalaba una de sus hermosas sonrisas.
Agustín, sin duda alguna, era lo que quería en mi vida, era el chico que siempre he querido en mi vida.
Ahora lo observaba detenidamente sin saber porque me había defendido, si realmente no me conocía, las pocas veces que hablamos fueron de nuestras clases, nunca hablamos de temas personales.
-¿Por qué me defendiste?- pregunte directamente, necesitaba una respuesta.
-No se, sólo sentí ese deseo...- dijo mirándome, dentro de mi, mil emociones comenzaron a removerse. -Estoy seguro que no eres lo que él dijo, eres muy diferente a esas palabras y eso fue lo que me impulso.
-No me conoces.- dije mirando hacia otro lado, soñando con un abrazo de él. -No se porque dicen eso de mi, si un chico tiene novia, no me acerco por más que me guste.
-No le hagas caso, sabes cómo es él.- dijo acariciando mi mejilla, acto que me hizo mirarlo, él estaba llenándome de mil emociones, sin saber que estaba ilusionandome.
-Lo sé.- dije casi en un susurro.
-Carolina...- dijo con voz baja, lo mire prestándole atención, casi nunca decía mi nombre. -Yo, desde hace días quería decirte esto, de alguna manera has cambiado mi vida a muchos colores...- sentía mi corazón acelerado, era casi un sueño lo que me estaba diciendo. -removiste mis sentimientos, con sólo tu sonrisa, provocas algo diferente en mi, algo que nunca experimente, me gustas, esa es la verdad.- dijo sin apartar la mirada de mis ojos.
-Tienes novia.- fue lo único que pudo salir de mis labios.
-Ya no, quiero una oportunidad contigo, quiero amarte sin condiciones.- dijo acariciando nuevamente mi mejilla. No pude evitar sonreír, es como había estado soñando.
-También me gustas...- comencé a decir con una sonrisa. -eres lo que más quiero en mi vida, y si, quiero intentarlo.
Agustín me miró durante unos segundos, la sonrisa que tanto amaba estaba en su rostro. Se acercó a mi y me abrazó fuertemente, inhale su aroma, ahora se convertiría en mi favorito.
Al separarnos, sus manos comenzaron a acariciar mis mejillas mientras se acercaba lentamente, sus labios comenzaron a rozar los míos hasta unirse completamente.
Sin duda alguna, él era lo que quería amar sin condiciones, lo que quería en mi vida y quien había llegado para convertirse en mi ángel.
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Holaaaaaaaaaa, ¿me han extrañado? Yo a ustedes si.
Hace mucho no actualizaba aquí y han pasado varias cosas.
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También inicie un nuevo proyecto, se llama Cambiando Mundos, hay varias secciones, ojalá pueden ser parte de él, el book lo encuentran en mi perfil.
Un gracias nunca será suficiente por todo su apoyo, pero aún así les doy mil gracias, significan mucho en mi vida.
