We Want War

I.

Misty estaba más que feliz, colocando los platos para la cena.

Su madre estaba arriba, arreglándose para su mamá.

La joven de ojos verdes siempre había sufrido abusos de los otros niños ya que ella no tenía un padre y una madre, sino dos madres. Jamás presto atención a los insultos que le daban, pero cuando un día uno de esos niños dijo que sus madres "arderían en el infierno" no pudo reprimir el impulso de tocar su corazón. Era como un instinto, algo más allá de cualquier lógica razonable.

Por suerte, su madre había estado cerca para detenerla de matar a aquel niño, ya que Misty había estado absorbiendo la energía del pequeño. Después de ese, aprendió sobre la dinastía de que ella provenía.

-Madre, ¿mamá ya va a venir? Para saber si ya saco el pollo del horno...-decía la morena, acomodando cada minúsculo detalle de la mesa.

Era de las pocas noches que su mamá no trabajaba, ya que ella era policía federal y siempre tenía trabajo.

Se quedo muda cuando escucho como algo allá arriba se rompía, y enseguida se quedo sumamente quieta.

-¿Madre?- titubeo ella, y cuando no hubo respuesta, su corazón comenzó a bombear con rapidez.

Lanzó los utensilios a la mesa con agresividad, mientras utilizaba sus largas piernas para correr escaleras arriba, su mente solo vagaba en rezar a Dios para que su madre estuviese bien.

Toda la tensión que tenía se fue cuando vio a su madre parada allí, a punto de bajar las escaleras, su vaso había caído al suelo.

-Me diste un susto de muerte- suspiro Mitsy, mientras colocaba su mano en su corazón, pero paró cuando vio que su madre no hablaba.

-¿Madre?-volvió a preguntar, mientras tocaba el hombro de su madre.

Aquello hizo reaccionar a la mujer, quien enseguida pasó su mirada llena de lágrimas hacia su hija.

-Mi pequeña- susurró, y de pronto Mitsy vio como algo ardía detrás de su oreja. Ella ya lo había visto; era el tatuaje de una hamsa, pero jamás pregunto por el. Más que deseo haberlo hecho, ya que ahora el tatuaje ardía como si tuviese fuego dentro de el.-Me está llamando, ella me está llamando. La guerra está aquí.

-¿De que hablas? Mami me asustas- sollozo Mitsy, pues la verdad sea dicha, su madre si la estaba asustando.

Tomo a su adorada hija, a su pequeño milagro, colocando una mano sobre su mejilla.

-Ella está por venir, tu mamá y yo cometimos muchos pecados antes de tenerte a ti, y es hora de pagar por ellos. Pero tú no necesitas pagarlos-negó con decisión, dandole un beso en la frente.- eres libre, y debes luchar por eso. Corre hija mía, y no te detengas hasta que encuentres a La Heredera. ¡Corre, Mitsy, corre!-le grito su madre, y la morena vio con horror como detrás de la pared de su madre, comenzaba a acrecer una negrura.

Así que hizo lo que su instinto, lo que su madre le rogaba; ella corrió.

Nada existía en su mente más que el miedo en los ojos de su madre, y en las últimas palabras que le dirigió.

Encuentra a La Heredera.

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Intense xd . Les estoy dando capítulos cortos por muchas razones; a)tengo exámenes. b)tengo flojera, aveda . c) aún no termino el segundo, que será el largo.