Abrí un ojo para ver la reacción de Zayn. Él solo me observaba como siempre lo hacía, y cuando abrí los ojos por completo, me sonrió.
– Okey – Dijo con voz calmada – ¿Entonces, cuál es el problema?
Le planté cara – ¿Ah? – dije una octava más arriba de lo que solía hablar.
– Solo pregunto qué... – Habló entre risas – ¿Cuál es el problema?
– ¡Te lo acabo de decir, Zayn! – Dije con un tono de enfado. El moreno acababa de arruinar el drama que yo tenía en mente, tenía un guion hecho de todo lo que debía de suceder.
– Eso no suena como un problema – se encogió de hombros. Se acercó hasta mi lado, apoyándose en el barandal con la vista a la ciudad.
– Pe-pe-pero...– Tartamudeé – Yo pensé que...
– ¿Qué te iba a criticar? – Me interrumpió – ¿Me haz criticado por eso? – dijo señalando al cenicero donde a escasos minutos había apagado un cigarrillo.
Negué con la cabeza.
– ¿Por qué debería yo criticarte a ti?
– Pero creí...
Sonrió – Creíste que iba a tomarlo de mal manera.
– Bueno... ¡Sí!
Zayn rio por lo bajo – Harry, no Importa. – dijo con una media sonrisa. Su mano se dirigió a mis rulos y los comenzó a acariciar.
De un momento a otro, mis labios estaban pegados a los de Zayn ¿Cómo ocurrió eso? Ni idea, pero realmente lo disfruté.
Cerré los ojos cuando sentí el contacto de sus labios contra los míos, su mano seguía acariciando mi cabello. Sentí la saliva de Zayn colarse entre el beso, tenía sabor a tabaco, pero por alguna razón me resultaba fascinante. Cuando pensé que ese momento no podía ser un poco más perfecto, alguien tocó el timbre.
Nos separamos, Zayn mordió su labio inferior. Sentí como mis mejillas tomaban temperatura.
El timbre volvió a sonar, esta vez con más desespero.
Zayn se dio la vuelta – ¡Joder, que ya voy! – exclamó.
Narra Zayn:
¡Wow!
Besé a Harry, y fue mucho mejor de lo que había imaginado (lo había imaginado varias veces, cabe destacar).
Mi momento feliz fue arruinado por el sonido del timbre. Me dirigí a la puerta para abrirle al inoportuno visitante. Detrás de ella me esperaba un muy sonriente Liam.
– ¡Hey!
Rodé los ojos y empuje la puerta para cerrarla. Ágilmente él la detuvo con el pie, y se adentró al departamento.
– ¡Oh! Gracias por la calurosa bienvenida.
Me encaminé hacia la cocina para preparar el desayuno para Harry y para mí, Y ahora también para Liam. Siempre que venía a mi casa venía a comer. Tome un par de huevos, bacon y encendí la sartén.
– ¿Zayn? – Habló el castaño quien se había acomodado en mi desayunador – ¿Por qué amaneciste tan cabreado?
– No estoy cabreado – le repliqué – el problema es que acabas de llegar en un momento inoportuno.
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Players - Zarry & Larry |En Edición|
FanfictionY recordé que todos somos jugadores en una partida en la que nadie gana y nadie empata, solo hay perdedores, y el que mejor juega es el que más pierde.