Día 30.

3.8K 361 95
                                    

Haciendo algo caliente

— ¡M-Murdoc! —se quejo.

— ¿Qué pasa? —lo miró con una sonrisa.

El mayor lamió nuevamente y el peli-azul trató de alejarse.

—No seas agua fiestas Stuart.

— A-Alejate Murdoc, te dije que dejaras la cuchara en paz —le quito la cuchara con restos de comida y siguió cocinando.

—Vamos, esta delicioso —trató de alcanzar la cuchara de nuevo.

¿Entienden?, por que la cena esta caliente...
Ya, ahora en serio por lo que están aquí:


Lo obligo a voltear y acercó su rostro para besarlo lentamente, sus dedos tomaron los  cabellos azules para llevar un control en los movimientos de sus cabezas para recibir los labios del otro con pasión.

—Murdoc, por favor —gimió al tiempo de intentar separarse.

—No puedo —empezó a bajar sus labios y suspiros hasta el cuello del menor.

Stuart soltó uno que otro gemido, ya que no podía resistirse a los movimientos de los labios del contrario en su piel. Nuevamente intentó alejarlo en vano y después de unos segundos sus manos estaban enredadas al cuello del mayor.

—Murdoc —suplicó, claramente por más.

Este mordió y lamió cada lugar en el cuello del menor hasta sentirse desesperado por más acción. Sus manos dieron un viaje hasta llegar a las caderas del menor donde comenzó a jugar con el resorte de su ropa interior que resaltaba arriba de su pantalón.

Poco a poco comenzó a recostarlo en el sillón negro de su viejo auto; y a pesar de dejarse recostar, Stuart detuvo las manos del azabache y las llevó a sus hombros.

—No quiero ensuciar tu auto de nuevo —susurró en un tono divertido.

—Eso ya no importa, cariño —respondió y volvió a besarlo.

La ropa comenzó a sobrar y poco a poco los cuerpos de ambos quedaban desnudos. Sus ojos estaban perdidos en los ojos del otro, sus miradas estaban llenas de cariño y pasión, parecía que simplemente el mundo desapareció.

—Te amo Murdoc —murmuró Stuart, ahora perdido en sus labios.

—Yo también te amo —acarició su mejilla y con su otra mano acarició su pierna.

Treinta días 2doc.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora