Capítulo 20: Doctora Hoffmann

19 5 6
                                    

A pesar de que llevo menos de 3 días trabajando con el club ya me he dado cuenta de que el orden no es realmente su prioridad, (de los jugadores, claro está). 

Además del desastre que podía ser atender a algunos atletas estaba muy cansada y lo único que quería era ir a casa y tomar una siesta, pero no puedo porque me falta un paciente. Justo cuando acabo de pensar esto la puerta se abre y un chico bastante alto entra a la oficina.

Buenos días -Dice mientras camina hacia mi escritorio pero su expresión cambia repentinamente al verme, parece espantado cómo si hubiese visto un fantasma-

Bue..buenos días -Respondo intentando concentrarme por dos motivos, primero el chico me mira cómo si yo fuese un extraterrestre aunque intenta disimularlo y segundo, es exageradamente lindo-

Seguro ya te lo han dicho pero no puedo resistirlo, eres demasiado joven y tierna para ser la Doctora Virginia Hoffmann de la que todos hablan -Dice mientras extiende su mano en mi dirección sobre el escritorio-

Su comentario me toma por sorpresa, y no mentiré, también me pone algo incómoda. Estrecho su mano saludándolo, usualmente un comentario así me hubiese molestado, pero, él tiene algo que hace que todo se escuche tan amable...

Creo que me han estado pintando como una bruja ¿no? -Pregunto arqueando una ceja sin despegar la vista de mi computadora en la que empiezo a buscar su historial médico-

No como una bruja, pero sí como alguien bastante estricta y hasta en ocasiones temible, o algo así me dijeron -Responde él y al final se ríe un poco-

Mi vista choca con sus brillantes ojos azules y rápidamente desvío la mirada de vuelta hacia mi computadora.

Pero a mí no me parece que seas así -Continua diciendo- de hecho me pareces demasiado tierna como para creer algo de eso...

Dejo la computadora por un momento y sólo lo miro con una pequeña sonrisa pues realmente no tengo nada que decir, o no se me ocurre nada. 

Supongo que si no empiezas a alimentarte mejor conocerás mi lado rudo -Respondo e inclino la pantalla del computador para que pueda ver los resultados de sus análisis- ¿Ves eso?, es tu nivel de azúcar en sangre,  está un tanto elevado y eso es un pecado para cualquier atleta, ¿qué has estado comiendo Manuel Neuer? -Digo intentando no hacer contacto visual para evitar los nervios-

No ingiero mucha azúcar todos los días, pero me descubriste, un día antes de los análisis si comí bastantes dulces y nutella sobre todo...

No te puedo regañar porque también tengo conmigo a un gran fan de la nutella y sé que es un vicio difícil de dejar..

¿Tu novio? -Pregunta clavando sus ojos directo en los míos- ¿es el gran fan de la nutella?...

Ehhh no, no tengo novio -Le digo algo incómoda- Pues supongo que eso es todo, todo lo demás se ve en orden por el momento, ya eres libre -Digo mientras cierro la computadora y me pongo de pie para quitarme la bata y por fin ir a casa-

Gracias Virginia, ¿Te puedo decir así, no te molesta? -Pregunta acercándose a mi-

No hay problema -Respondo un tanto nerviosa y me quito la bata para luego dejarla sobre el sillón-

Bueno, muchas gracias, espero verte pronto -Manuel se acerca y me da un delicado beso en la mejilla, su cercanía me permite sentir su delicioso perfume y ver más de cerca el azul de sus ojos, todos mis nervios se activan e intento no actuar torpemente-

Manuel sale de la oficina y yo hago lo mismo después de tomar mi bolso y apagar las luces, al salir veo a Sofía hablando con mi otro querido paciente Chris Pulisic, él esta de espaldas y Sofía de frente así que logra verme, yo le hago una señal para esperarla fuera.


The Good Game (Futbolistas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora