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El resto de las clases pasaron justamente como él lo había imaginado, quizá realmente esperaba que con su acción el mayor se sintiera curioso teniendo la necesidad de preguntar sobre lo sucedido, pero eso jamás llegó. A YoonGi esa acción le había importado tanto como los sentimientos que tenía ahora el más joven. Quizá Jeongguk debería ir aprendiendo a no esperar del mayor más de lo que éste estaba dispuesto a ofrecer, pero bien dicen que uno espera lo que está dispuesto a dar y es que sí, el castaño estaba dispuesto a dar por el mayor varias cosas que a estas alturas no valían la pena.

Su penúltima clase había terminado, y a pesar de que había hecho un gran esfuerzo por comprender cada uno de los temas sabía que era un caso perdido ese día, entonces pensó que mejor se hubiera quedado dormido con YuGyeom toda la tarde para reponerse y más tarde -porque era algo casi seguro- entretenerse con videojuegos en compañía de su mejor amigo. Dormir todo el día era mejor que ir a plantar solamente su cuerpo a la universidad, porque claramente su alma no andaba por ahí.

Tomó sus cosas y salió de aquella habitación, hizo algunas cuentas en su cabeza sobre el tiempo que le tomaría llegar a la siguiente aula si pasaba a comprar algún aperitivo, ya que sentía que sus intestinos podían comerse uno al otro si no echaba alimento, decidió que ir por algo antes de la siguiente clase era bastante buena idea ya que le daba bastante tiempo.

Pero eso solo se iba a quedar en un vago pensamiento, fuera de su aula un azabache se encontraba recargado de brazos cruzados, con auriculares en los oídos y ojos cerrados. Pensó entonces que si se escondía entre sus compañeros podía pasar desapercibido por el mayor, y se echó a andar en cuanto un gran cumulo de compañeros pasó a lado de YoonGi, pero quizá solo tenía mala suerte y por eso los ojos del pálido se habían abierto en el preciso momento que él iba pasando por su lado.

Debía ser lo demasiado tonto como para quedarse parado en ese mismo lugar, o como para sonreírle tiernamente mientras fingía que no le había visto antes esperando por él. Simplemente era tonto y ya, o eso era justo por lo que se reprimía a cada momento. El mayor no le hizo esperar más y pronto se encontró a su lado, mirándole lascivamente antes de tomar su mano con brusquedad y encaminarlo hacía la salida del edificio. No le había dirigido la palabra, tampoco se había comportado gentil y a pesar de eso ahí iban ambos, uno cerca del otro como si no existieran incomodidades por parte de ninguno.

- SeokJin está cerca de la cafetería con sus compañeros. -Dijo sin mucho ánimo el mayor, mientras dirigía sus pasos justo al lugar que mencionaba-. Si actúas justo como en la mañana, por primera vez estaré agradecido contigo.

¿Por primera vez? Después de todo lo que se había dejado hacer, de las maneras anteriores en la que se había dejado humillar y había dejado que le ilusionaran -aunque esto más bien él solo lo había creado con ayuda de su mente tonta- ¿era la primera vez que le iba a agradecer? YoonGi le debía mucho más que eso a Jeongguk, y se encargaría de cobrarle todo en cuanto él mismo presenciará los besos que sus dos mayores se dieran en un futuro.

El menor suspiro resignado mientras era llevado, y en el momento que el afiance entre su mano y la impropia se relajó supo que alguien más los estaba mirando, claro que no esperaba tener más de una vista posada sobre ellos por eso le sorprendió ver como dos de sus amigos y el hermano de uno de estos los miraban con total curiosidad, más bien solo dos. Había sido demasiado difícil convencer a los dos más jóvenes de que su "relación" era verdadera, ellos, a diferencia del más grande, no eran tan tontos como para no darse cuenta de que el más joven a veces se sentía incómodo en compañía del azabache.

Con una sonrisa en labios y un saludo de mano se acercó hasta los tres, aun sujetando la mano de su novio, trato de reprimir una risa cuando el azabache tomó su celular, e intentó disimular su interés, perdiéndose en éste. A pesar de que, al menos ellos cuatro, habían comenzado una conversación basada en cosas banales, quejas sobre los cursos y exámenes o comentarios de ocio por parte de los ojos, Jeongguk había notado como la mano envuelta en la suya temblaba y comenzaba a sentirse resbalosa, pero el asco quedo fuera de su mente cuando se puso a pensar en los motivos que le ponían así. SeokJin no había dejado de mirar el afiance en su mano, y a su compañero, desde que llegaron y sabía precisamente que él mayor también lo había notado. Si una simple mirada podía ponerlo de esta manera era porque realmente YoonGi estaba perdido.

- Kookie. -Pronunció el chico alto que se encontraba frente a él, ocasionando que también el mayor a su lado le mirara-. Escuché que estás perdido en un materia que a mí se me da muy bien ¿quieres mi ayuda?

Incluso ignoró la vista del pequeñín a lado de Jeongguk cuando habló, y aunque sus palabras sonaran firmes el menor podía notar que sus labios temblaban un poco, genial, ahora era usado como la carnada para despertar celos en ambos. ¿Qué era más estúpido que eso? Al menos uno había pedido -más bien, exigido- su ayuda, así que no estaba como para adivinar si el mayor ahora necesitaba también su ayuda para darle celos a YoonGi, en serio, en serio quería golpear a ambos por ser tan estúpidos y ni siquiera ponerse a pensar que ahora mismo el corazón de Jeongguk nuevamente era lastimado. La manera en la que YoonGi miraba a SeokJin le lastimaba, y la manera en que SeokJin le ignoraba lastimaba más y era justo porque él ya había experimentado como se sentía ser ignorado por alguien que, al menos fugazmente, te ha robado.





¿Alguien tiene un grupo de YoonKook en whatsapp al que me quiera meter?
¿No? ¿Nadie? nunca tengo con quien shippear, alv.

Jealous ; jjk + myg ; finalizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora