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Cada vez que Bastian iba a la habitación donde me tenia retenida se iba con algunos golpes y muchas blasfemias de mi lado.

En mi vida habia dicho tantas malas palabras como lo hacia con Bastián.

Esos nombres que ellos llevan no son de dominicanos porque si fuera asi simplemente se llamarían: Juan, Pedro, Jeffrey, Mario, Jendry, Albert, Jose, Esteban, Israel, gonzalo, Domingo,  etc.

Mientras que yo, si a mi madre le hubiera dado la gana, seria: Danna, Paola, Maria, Nicole, valery, Anyi, Ángela, Anacleta, Petronila, Juana, Luz,Daniela, florinda, Etc.

Estoy harta de este maldito lugar y tambien puedo asegurar que no estamos en la República dominicana porque el maldito calor que hace allá no lo hace aquí.

Estos malditos vestidos me tienen sudando la gota gorda, estoy harta de ellos.

Con el unico que no peleo es con Xav,  el es muy comprensivo... Aunque el tambien a llevado algunos golpes porque no me deja salir.

Aquella mañana Xav me saco de a habitación y me llevó a la sala. Al final de esta habia una puerta que poseía mucha luz, una luz muyyy blanca.

Sentía como aquella luz me llamaba y cuando traté de acercarme aparecio el hijo de perra ese de Bastián impidiendo el maldito paso.

—Bastian del diablo quítate de mi maldito camino coñazo.

—¿Qué haremos con esa boca tuya tan mal hablada?  Dime tu.

—Lo mejor que puedes hacer en tu puta vida es dejarme ir.

—Claro, supongamos que te dejo ir,  digo supongamos porque eso no va a pasar.

—Hijo de tu puta existencia,  maldito coge gata, rapa concón de velorio,  singa aveces.

La risa de Xav se escucho en toda la sala y Sonreí. A xav se le pego mi amada risa de foca,  que se cae al suelo y sigue aplaudiendo.

—Xav,  Amira esta siendo una mala influencia para ti.

—Vete a la mierda Bastián, esta chica es un amor de persona.—dijo el riendo.

Bastián se puso la mano cubriendo sus ojos mientras negaba, mientras Xav y yo reíamos muy fuerte.

—Bueno, señorita Amira Jameela... De significado líder hermosa. ¿Qué tal si bailamos?

—No voy a bailar.

—Una dominicana que no baila....

—Ja.  Ya quisieras maldito desgraciado.

Y asi fue como pasamos la tarde bailando Merengue, despues de todo no baila mal... Pero hay algo que me llama mucho a la atención.

Lo que hay detras de esa puerta.

"Mi Dominicana mal hablada."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora