El chico del bondi.

Matrimonio

 Capítulo Cinco

 Pasaba por un camino decorado con arreglos florales, con mi hermoso vestido blanco diseñado exclusivamente por Santiago Artemis, cundo lo veo de pie en el altar. Harry Styles me miraba desde allí, invitándome a estar a su lado por el resto de nuestras vidas.

— ¿Harry Styles, acepta como esposa a la joven Lucia Rojas? — Preguntó el cura, que por alguna razón se parecía a Papa Noel.

— Si, acepto — Contestó mirándome con sus hermosos ojos.

— ¿Lucía Rojas, acepta como esposo al joven Harry Styles? — essa vez se dirigía a mi.

Estaba a punto de contestar, cuando sentí caer agua en mi cara.

Era mi mamá tratando de despertarme.

— DESPERTATE QUE SE TE HACE TARDE — Gritó. — CONSTE QUE AYER NO ESTABAS ASÍ — Me recordaba mi vieja con algo de sarcasmo.

Si, gente. Ayer estaba de joda con mis amigos festejando mi cumpleaños y que la mayoría aprobó el trimestre. Nos quedamos hasta muy tarde, y solamente dormí una hora.

Así que como buena hija que soy, le hice caso, me vestí con el uniforme y me fui de casa sin desayunar, ya que se me hizo tarde, pero tenía mi vaso térmico lleno de café con leche para tomar en el camino.

Yendo a la parada, volví a ver al turro de la otra vez. Si, el que nos cantó en el colectivo. Al acordarme de lo que hizo, me vi tentada a reír.

Me miró y levantó su vinito en cartón hacia mi dirección.

— Eh Wacha, ¿Todo piola? — Me preguntó el turro.

— Si, gracias— Le respondí por miedo a que me robara el celular.

Mentira. Me cae bien.

Estando a media cuadra de la parada, vi pasar el bondi a mi lado, así que corrí lo más rápido posible para alcanzarlo, y lo logré. Menos mal, no podía llegar tarde porque sino me quedaba libre.

Al estar dentro del bondi, cerré los ojos por cinco minutos, ya que seguía cansada y un poco agitada. Los abrí cuando escucho que el chofer paró en otra parada.

Entonces, lo vi a él, pero de la mano de una piba.

Y en ese momento se me rompió el cora.