Capítulo Dos
Era un día diferente, pero al fin y al cabo, común y corriente en mi vida. Aunque tenía dos bolsas oscuras bajo mis ojos y además mucho sueño por estar estudiando hasta hace tres horas, me vi en la obligación de no volver a tirarme en la cama e ir al colegio a rendir.
Todo sea por tener buenas notas y ser el orgullo de la familia.
Con suerte, la ida al instituto en colectivo es de media hora por lo menos, esperaba poder dormir en el bondi.
Una vez que terminé de desayunar y de despedirme de mi madre, cerré la puerta de casa, mientras que con una mano, la cual está llena de resúmenes, me acomodé el uniforme.
Fui hacia la parada tratando de desenredar mis auriculares, y una vez que terminé de hacerlo, los conecté a mi celular, abrí Spotify y dejé que la música me relaje.
Justo cuando llegué a la parada, vino el colectivo. Mientras la gente de la fila iba subiendo, busqué la Sube* y no la encontraba.
Me volví loca tratando de buscar esa tarjeta, ya que sin eso no se puede viajar. Pero, por cosas de la vida, me la olvidé en casa.
Le expliqué al chofer que no tenía la Sube y, como era una buena persona, me dejó pasar.
Elegí irme al fondo del colectivo y me senté.
Traté de dormir cerrando mis ojos, pero no lo logré, ya que tenía miedo de pasarme de donde tenía que bajar. Así, dándome por vencida, le di una leída a mis resúmenes.
Pasados dos minutos, en los cuales me terminé aburriendo, ya que el viaje se estaba haciendo largo, cambié de playlist. Puse un par de canciones que me gustaban, no me contuve más y canté en voz baja.
Estaba por llegar a la parada, en la cual tenía que bajar, así que me paré del asiento y toqué el timbre. En eso, sentí escalofríos en el cuello, ya que alguien me sacó delicadamente un auricular de la oreja y me dijo:
—Que linda voz tenés.
Estaba por girar la cabeza, cuando el colectivo frenó de golpe y terminé en el piso.
Admiren a "La Gran Luci".
La puerta se abrió, me levanté del piso y bajé del bondi.
Una vez en la vereda, hecha un tomate, intentaba ver quién me dijo esas palabras que lograron sonrojarme.
Y lo vi, era el chico del bondi regalándome una sonrisa.
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*SUBE: Es un sistema implementado en la República Argentina a partir del año 2011 que permite a cada usuario con su respectiva tarjeta inteligente, abonar los viajes en colectivos, subtes, trenes y los peajes.
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El chico del bondi.
Novela JuvenilLucía no era una adolescente fuera de lo común. Lo que si la distinguía de la mayoría de sus compañeras, era que viajaba a la secundaria en colectivo. Esto hizo que mediante varios viajes, conociera a Theo, el chico del bondi. En una historia do...