Silence!➷muke [en pausa]

8.

           

Caminó tranquilo hasta su casa. Eran las seis de la tarde, y él ni siquiera lo sabía. Se había pasado la mayor parte del día en la biblioteca intentando ponerse al día en los temas que no había podido estudiar toda la semana, gracias a su vecino.

Saco su celular del bolsillo trasero de su pantalón para fijarse la hora y se sorprendió al ver lo tarde que era. De seguro sus vecinos ya se encontraban en su casa con su familia esperándolo para cenar.

Luke soltó un bufido al escuchar risas dentro de su casa, tendría que aguantar al chico de cabello de colores el resto del día.

Abrió la puerta lentamente y dejo su mochila al costado de esta. Se fue acercando lentamente al lugar de donde provenían las carcajadas (para ser más específicos, su sala), algo nervioso y avergonzado gracias a lo tarde que se le había hecho.

—Buenas tardes —saludo algo tímido.

Las risas se esfumaron al escuchar la voz del rubio. Todos los presentes prestaron atención al chico que acababa de entrar, en especial el chico de cabello rojo.

Michael sonrió al ver al chico rubio entrar, lo había estado esperando desde que había llegado a la casa de su vecina y por fin se había dignado en aparecer. Mordió su labio y recorrió su mirada de arriba abajo. De cerca se veía más atractivo, podía apreciar sus largas piernas y el resto de su perfecto cuerpo.

Las manos del rubio empezaron a sudar al sentir la mirada del teñido recorrer su cuerpo sin ningún pudor. Esta sería una larga noche, pensó.

—Hasta que dignas a aparecer jovencito —lo regaño su padre.

—Lo siento no me di cuenta de la hora, estaba estudiando —murmuro en respuesta a su padre.

—¿No crees que estas estudiando demasiado hijo? —pregunto preocupada su madre.

—No he podido estudiar bien esta semana... —respondió y despues le lanzo una mirada cargada de odio al teñido, provocando que este soltara una pequeña risa.

—Está bien Luke, pero que no se vuelva repetir, para la próxima avísanos que llegaras tarde.

Luke asintió en respuesta.

—Un gusto verte otra vez —lo saludo su vecina mientras se ponía de pie para abrazarlo.

—Igualmente señora.

—Oh por favor dime Karen —le pidió —; quiero presentarte a mi hijo —añadió mientras le hacia una seña a Michael para que se ponga de pie.

Michael obedeció y se levantó del mueble para despues caminar hasta quedar frente al rubio.

El rubio se tomó algo de tiempo de observar al teñido, ahora que lo podía ver de cerca, tenía que admitir que era más atractivo de lo que pensaba. Tenía las orejas perforadas y un pequeño piercing arriba de su ceja, el cual Luke nunca se había fijado. El chico era casi de su tamaño y vestía una casaca de cuero, que ayudaba a su estilo "rebelde", junto con un polo de Green Day, unos skinny jeans, al igual que Luke, acompañados de unas botas negras. Que Luke apostaría que eran unas Dr. Martens.

—Un gusto poder conocerte al fin, mi madre me hablo de ti —hablo el teñido para despues guiñarle el ojo sin que ninguno de los presentes se diera cuenta. —; te agradezco por haberla ayudado con la mudanza, enserio.

—No hay de que —murmuro el rubio para despues morderse el labio logrando que el teñido enfocara su vista en estos.

—Por cierto, mi nombre es Michael Clifford —le dijo y estiro su mano.

—Luke Hemmings, un gusto —respondió para despues estrechar su mano con la del chico.

El teñido se acercó sus labios al oído del rubio sin que su madre pudiera darse cuenta.

—Por cierto, eres más hermoso de cerca Luke —murmuro.

Las mejillas de Luke se volvieron a teñir de rojo, como siempre lo hacían cuando Michael le hacia un cumplido. Blanqueo los ojos intentando disimular causando que teñido se riera.

—Ya verán que se harán grandes amigos —aseguro la señora Hemmings.

—Eso es seguro... —respondió Michael.

¿En que se había metido Luke?

Pero de algo estaba seguro. Todo esto era culpa de Green Day.