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{Buenas Decisiones}

No podía hacerlo, sabía que algo malo pasaría si, si quiera, lo intentaba. Me negaba rotundamente a hacer cualquier cosa que me afectara disciplinariamente en la escuela, en física, y sobretodo porque era mi segundo día de clases. Además, para mi, física era la más complicada de mis demás materias y, si a eso le agregábamos que el maestro me odiaba, simplemente me arriesgaba.

Frente a mi, justamente en la puerta de mi salón, con una cara de cachorro abandonado en la calle, se encontraba Kate con ambas manos juntas en forma de súplica.

'No lo haré, no caeré ante sus súplicas, debo mantenerme fuerte'-repetía en mi cabeza una y otra vez, mientras Kate decía "por favor" cada segundo.

-Anda Jamie, no puedes cancelarme ahora. Traje las paletas y las pelotas de ping pong...y son rosas- dijo acercando una pelotita rosa a menos de cinco centímetros de mi cara.

-Kate no puedo hacerlo..-dije alejando la pelota de mi cara-...no lo haré, es el segundo..

-Si ya lo se, el segundo día de clase, pero tu me prometiste que...

-Yo no prometí nada Kate

-Escucha...ya me salí de mi salón, y estoy aquí en la puerta del tuyo, antes de que llegue el señor Wesley..

-No se Kate, que pasa si se dan cuenta?

-No va sucedernos nada güey!-dijo casi gritando

-Bien, Bien-estaba harta-...vamos a jugar Ping Pong-dije quitando la pelota rosa de sus dedos.

'No lo haré, no caeré ante sus súplicas, debo mantenerme fuerte'- ese pensamiento se había ido a la mierda.

Kate brincó y aplaudió con emoción.

'¿Por qué no podía negarme a nada de lo que Kate me pedía?'

Ella tomo mi mano y bajó las escaleras corriendo. No solía tomar buenas decisiones cuando estaba bajo presión. Y Kate sabía como presionarme.

**********

-uno...dos..tres..cua...

-Ha' punto para mi- dijo Kate señalándome con la paleta de Ping pong mientras la pelota caía al suelo.

-No! La pelota cayó después de la red..no le pegaste!-grité dejando caer la paleta sobre la mesa.

-Bien..-Kate se agachó para levantar la pelota y volvió a hablar- que frustrante que te hayas aprendido las reglas tan rápido, ten..te toca sacar.

Kate me aventó la pelotilla rosa y volvimos a jugar.

Veinte minutos, y cinco partidas de ping pong, después de ganarle a Kate, golpeé la pelota y en un acto de rapidez, Kate levantó su paleta y golpeó la pelota haciendo que fuera a hacia unas bancas donde algunos chicos reían y platicaban.

-Hey..que te sucede?-pregunté atónita al ver la pelota pasar cerca de mi cara

-Te toca ir por ella..

-Pero tu la golpeaste muy fuerte, es tu culpa

-No iré yo-dijo cruzándose de brazos y cambiando el peso de su cuerpo hacia la pierna derecha.

-Tranquila 'su alteza'- dije fastidiada- afloja tu sostén un poco y relájate, es sólo un juego.

-Ve por mi pelota-dijo señalando con su dedo índice la dirección en que había volado la pelota

-Bien...esto no se va quedar así-dije riendo, me encantaba ver a Kate molesta, hacia que me sintiera superior a ella.

Dejé la paleta en la mesa y camine hacia una banca color naranja, donde varios chicos reían y platicaban. Un chico de piel morena, cabello castaño y muy delgado la levantó y la vio a contra luz.

El ViolinistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora