Y tu mirada...

Capítulo 14: "La segunda aplicación, la más importante"

 -¿Y bien?
-Hemos terminado
-Entonces esperaré a que llegué Kakashi
-Mejor dicho, ambos esperaremos, mientras me hablarás de ti, y yo te hablaré de mí
-Claro, lo había olvidado
-¿Tantas son tus ansías de irte ya?
-¿Tú qué crees? –lo miraba con seriedad mientras buscaba el uniforme escolar-
-Ese vestido que traes puesto –la miraba-
-¿Es de alguna de tus ex novias?
-Eres divertida. Para nada, sólo quería decirte, que te ves bien
-Ah, vaya...
-De nada –le decía con broma-
-En todo caso, ¿qué, quieres ver cómo me cambio?
-Ya salgo....-decía llegando al marco de la puerta del estudio. La cerró detrás de sí recargándose en ella unos instantes-
-"Me pregunto ¿cómo será verla sin...ropa?, no pienses esas cosas Naruto, con un demonio-dattebayo.... ¿por qué esta chica es tan difícil? Mejor dicho, ¿por qué tengo tanto interés? Ya ha pasado mucho tiempo desde que me pasaba esto, ahora hasta mi pecho se siente extraño, mi respiración es rara, mi cuerpo reacciona....diferente y...no puedo evitarlo tengo que mirar" –ésas, y más ideas se movían a velocidad de la luz, a la par de pequeños golpecitos y muecas graciosas que emanaban de su rostro un poco abochornado-
-Vaya, ese idiota... –susurraba la chica. Con ambos brazos, bajaba el cierre del vestido rojo que llevaba puesto. Un vestido que si bien la tela era floja, en la cintura se ajustaba para definir el cuerpo; sin mangas pero de cuello alto, bastante elegante. Y su cabello, amarrado en una coleta, dejándolo a la altura de los hombros, la hacía ver sublime-
-"Sé que Kakashi me mataría por esto, pero, debe de entenderlo también, esta chica no es más que un maldito demonio, tan tentador y mortífero...además, ¿cómo se enteraría? Sólo un poco"... ¿qué podría pasar-dattebayo? Y aunque me duela reconocerlo, tiene sus encantos dattebayo. La chica teme es linda. Hum, sólo mirare un poco y...-se decía mientras se volteaba para abrir muy lentamente la puerta-
-"¿Qué pasaría, si por obras extrañas del destino, se diera cuenta de la verdad?, ¿se callaría o me delataría al momento? ¿Me sacaría de todo esto? Bien podría demandarme, pero, eso no sería ¿excesivo? Aunque me estoy haciendo pasar por alguien más, eso podría tomarse como usurpación de identidad, ¿podría ir a la cárcel? ¿Pero por qué pienso en eso ahora?...
De todas formas, eso no pasaría, sólo se podría dar cuenta de dos formas: tocándome, eso sería simplemente imposible, y la siguiente, si me descubriera cambiándome o algo así, pero dudo que se atreva, sería realmente estúpido y un golpe de muy mala suerte para mí...
Oh por Dios, como sea, sólo, me cambiaré y me mantendré tremendamente al margen con este sujeto...-pensaba, cuando ya tenía el vestido a la cintura. Debajo de él, traía un pequeño sostén negro, que en cierta medida le ayudaba a simular la carencia de pechos. Se encontraba con la puerta a sus espaldas-
-"Aikawa"- pensaba el rubio mientras trataba de medio asomarse para mirarla. Abrió la puerta sólo un par de centímetros, haciendo el menor ruido posible para que la joven no se diera cuenta de ello. Asomó la mitad del rostro, y logró divisar, que la chica, estando aún de espaldas, buscaba en su mochila la blusa del colegio con la que había llegado a su casa. La piel de su espalda, tan blanca, fina, pareciera que no tuviera fin. Se encontraba acomodando uno de los tirantes del sostén con la mano izquierda y sacando la ya buscada blusa con la derecha. Se la acomodó de la manera más pulcra posible y estaba a punto de bajarse por completo el vestido, dando pie a demostrar su retaguardia; Naruto estaba a punto de verlo pero...
-Me pregunto ¿qué te haría si te descubre? –le susurraba un mayor a Naruto-
-Sen...sei –decía a la par que cerraba la puerta con sumo cuidado- no te esperaba tan...pronto
-Se supone que la tratarías de otra forma Naruto
-Y lo hago
-¿Entonces nunca espías a tus modelos?
-Jamás en la vida
-¿Desde cuándo ese cinismo tuyo a aumentado?
-Creo que hace tiempo
-En todo caso, será cuestión de esperarla
-¿Quieres un trago?
-Me encantaría
-No sabía que ha sensei le gustara tomar
-Satzuki...
-Hay muchas mañas que no conoces de Kakashi-sensei
-Supongo...
-Si supieras...asegurarías que se trata de una persona completamente distinta
-No es momento para criticar a su sensei chicos
-Y tan santo que se ve
-Las apariencias engañan princesa
-Tú lo has dicho
-Jóvenes tenían que ser
-Pues bien, al parecer no tardaste tanto cómo creímos Kakashi-sensei
-Bueno, Tsunade-sama me dejó salir antes de lo pensado
-Entonces tengamos la plática que me pediste...tengo que irme pronto
-Siempre viviendo a las prisas, así no podrás disfrutar de la vida princesa
-La disfruto ya...y tampoco es que haya mucho que disfrutar
-¿A qué te refieres?
-No hay muchas cosas en mi vida, con las cuáles pueda decir que existen motivos para...ser feliz
-¿Ni siquiera Gaara?
-Eso es punto y aparte
-Iré por el whisky...
- ¿Por?
-Después de acostumbrarse al dolor, es complicado sentir otra cosa
-Supongo...
-¿Y tú? ¿qué perdiste cómo para llenar ese vacío con tantos excesos sexuales?
-Me agrada tu vocabulario
-Me gusta jugar con las palabras...
-¿Tan obvio soy?
-Son suposiciones mías... ¿tu madre, cierto?
-Era como la luz de mis ojos ¿sabes?
-Puedo imaginarlo...
-Después de eso, creo que me sumergí más. Mejor dicho...-suspiraba un poco- no sé por qué planeo contarte lo que vas a escuchar, pero, es como si tuviera la necesidad de hacerlo...-la miraba-
-Te escucho...-"Y por alguna extraña razón, quiero escucharlo, necesito oírte" –pensaba prestándole mayor atención-
-Mi infancia fue muy normal y tranquila; sin sucesos trascendentes realmente, pero eso sí, llena de caprichos, berrinches y dinero. Creo que esa fue la mayor razón por como soy ahora; estuve acostumbrado a un mundo de materialismos y en vista de que con sólo un chasquido de dedos tenía todo lo que quería, la vida se me hizo tan aburrida que necesitaba experimentar con algo más.
Entonces, en mi adolescencia, mi padre me regaló una cámara profesional; desde siempre me llamaron la atención las artes visuales, en especial la fotografía...y creo que así empezó. Por primera vez me sentía motivado por algo que no fuera dinero o caprichos míos. De verdad quería hacer eso y...no sé, pero tenía la necesidad; era enserio la primera ocasión dónde me había propuesto algo y que de verdad quería hacer; porque me gustaba y me llenaba...
Mis padres me metieron a diversos cursos, talleres y escuelas de arte, incluyendo de fotografía en específico. Fue hasta entonces que, cuando era hora de entregar proyectos finales, a los directivos les pareció que era lo suficiente interesante como para demostrárselo a una importante marca en el mercado...
-Fue así que llegaste a Dolce & Gabanna...
-Les gustó el promocional que hice, me pidieron que creara uno para su empresa y...bueno, cómo verás les encantó
-De lo contrario no tendríamos esta plática
-Exactamente princesa
-No puedo creer que fuera así de fácil
-Bueno, no lo fue del todo. Igual estuve a prueba por casi todo un año. Y créeme en muchas ocasiones terminé tan frustrado que me arrepentía de haber estudiado esto
-¿De verdad? –lo miraba con ligera sorpresa-
-¿Por qué mentiría muñeca? –se cruzaba de brazos y la miraba divertidamente- cuando hablo con alguien, siempre es enserio
-Trataré de confiar en eso
-Hazlo...
-Bueno, continúa...
-Así que...estuvieron a punto de correrme de la compañía en más de diez ocasiones
-¿Tantas? Y cómo...
-¿Logré mantenerme? Pues he de decir que, después de deprimirme hasta el punto de querer abandonar, mi madre siempre estaba ahí para levantarme el ánimo y recordarme que si estaba ahí, era porque tenía la capacidad y más importante aún, amo lo que hago. Cuando eso sucede, entonces, pase lo que pase, siempre logras salir a la superficie
-Comparto tu idea...
-Fue así que, con el tiempo me fui abriendo paso entre mis demás compañeros de trabajo, pero reitero no ha sido fácil por muchos factores. Entre ellos la edad; la mayoría de las personas no confía en gente joven como nosotros, prefieren a personajes que tengan un mayor historial, sobre todo por la experiencia, criterio y demás cosas...
-Umnh...
-Pero, digamos que, gracias a Kakashi-sensei fui descubriendo el modo en el cual se rigen las cosas en este negocio; conocí a otras personas como Kurenai-san y también por ella es que ahora sé lidiar con los gajes y situaciones un tanto molestas con los proveedores, los demás fotógrafos, en especial con los modelos
-Son las personas con las que trabajan directamente por obvias razones
-El caso es que, se me presentó la oportunidad de hacer un trabajo importante en Londres hace algunos años
-¿Te refieres a lo de Sasuke?
-Sí...a lo de Sasuke Uchiha...-suspiraba-
-Ya veo...-lo miraba un tanto tensa-
-Aunque bueno, como te digo, no fue fácil irme posicionando, tuve que sacrificar muchas cosas, y llorar sangre para estar donde estoy parado ahora. Mi casa, familia, amigos, estrés, soledad....ocasiones en las que me decían que el trabajo no servía, que era porquería, basura, cómo era posible que me dejaran salir de la universidad. Aunque no parezca la vida de un fotógrafo también es complicada y dura
-...........................
-En cuánto a cuando mi madre murió, creo que...me eché a perder más
-¿Enserio? –le decía con sarcasmo-
-Al descubrir de qué va el trabajo y las formas en las que a veces se rige, me fui sumergiendo en un mar de excesos y libertinaje, tanto que comencé a cometer errores tan tontos y grandes que...
-Se fue convirtiendo en un círculo vicioso, además de que al estar rodeado siempre de toda esa mala vida, se convirtió en costumbre, y así de esa manera podías conseguir las cosas de una forma mucho más sencilla. Después con la muerte de tu madre, se convirtió en un detonante para seguir haciendo lo que hasta el momento; pues el vació que sentiste desde que llegaste a este mundo se fue acrecentando y no había o mejor dicho, hay mejor forma de llenarlo que, haciendo lo que haces y de la manera que lo haces, ¿cierto?
-...........Cierto niña genio –le decía con ligero asombro-
-Si te preguntas cómo acerté, pues fue sólo probabilidad y análisis que hice anteriormente sabiendo ciertas cosas de ti
-Tú podrías trabajar como perfilista en el FBI o alguna cosa de esas...
-Tampoco es para tanto
-Ya sabes entonces lo necesario de mi vida
-¿Te has enamorado?... "¿Por qué diablos preguntaste eso?" –se tapó la boca notando lo que había dicho?
-¿Por qué te callas? Ya lo has preguntado ¿no? Además no tiene nada de malo preguntar esas cosas...y, yo te he preguntado peores ¿cierto?
-Cierto...-lo miraba-
-Pues, te diré algo...después de probar tantos vinos, llega un punto dónde ya no sabes diferenciar al bueno del malo; terminan siendo iguales, y creo que eso es lo que me ha pasado...todos los que han pasado por mí cama, no han sido más que eso. Yo no sé que es el amor...nunca me he enamorado Satzuki...-hacía una mueca de tristeza-
-...........
-¿Y tú cómo estás?
-¿Como estoy de qué?
-¿Tienes pesadillas a menudo?
-Kakashi te ha hablado de eso
-En lo absoluto...antes que amigos, es un profesional, jamás haría algo como eso. Simplemente lo deduje, después de un momento tan fuerte como ese, sería extraño no tenerlas, ¿cierto?
-Últimamente, han sido más recurrentes, y es como si me perdiera poco a poco en ellas
-¿Ya se lo has dicho a sensei?
-Me dice que es cuestión de que lo deje ir. Puede que tenga razón, de cierta forma aún me aferro a eso y no sé como dejarlo ir
-Por eso te digo que te relajes y tomes las cosas más a la ligera
-Dudo que funcione
-Mis métodos son raros, pero siempre funcionan
-¿Debo de confiar en ti?
-Deberías, puesto que de aquí en adelante estaremos juntos por una larga temporada
-¿Confiarías en mí?
-Aunque no me termine de agradar la idea, creo que tendré que hacerlo
-Tomaré eso como un cumplido
-El caso es que eso se irá dando, conforme nos conozcamos más
-Supongo que sí
-Aún así...faltan muchas cosas
-Y muchos secretos por descubrir
-Ciertamente, con el tiempo...todos los secretos saldrán a la luz
-Si son malos, ¿perdonarías una mentira de parte mía?
-¿Mentira?
-Sí...
-Hay muchas mentiras, y todo el mundo lo hace, no tendría por qué molestarme, además es normal ¿no?
-¿Seguro?
-¿Hay algo que quieras contarme entonces?
-..........................
-¿Me estás mintiendo ahora?
-..........................
-¿Qué me ocultas princesa?
-Por más que trato no sé nunca, en dónde dejas las cosas Naruto