The Black Alpha #OW2018 #WOWAWARDS2K18

Prólogo

El sacrificio es para los débiles. El odio corrompe. El amor destruye. La venganza es el don de los fuertes. 

Era un juramento que se había echo a sí mismo el día que se atrevieron a meterse con su manada, el día que humillaron a su padre frente a todos y tuvo que observar como eran asesinados muchos de los suyos siendo aún muy joven, ese oscuro día le arrebataron a su padre de sus manos, lo dejaron morir por sus heridas en los brazos de su madre sólo por placer y morbosa diversión, la manada de Ross pagaría por lo que habían echo.

Haz que los que se rieron de tu dolor paguen. No con odio, sino con una lógica fría y racional, la venganza es tu aliada. Que la Diosa Luna se apiade de aquellos que erraron al cruzarse en mi camino, porque yo no me apiadaré de ellos.

Luke tomó el cargo de Alpha de la manda Sutherland tras el fallecimiento de su padre, prometió protegerlos con su vida y eso era asumir una enorme carga sobre sus hombros. No todos los Alphas eran merecedores de la lealtad, pero él se la había ganado a pulso. Se la había ganado del modo mas terrible: sangre.

Con el paso de los años se concentró en que las cosas volvieran al apogeo que habían tenido durante el mandato de su padre, James Sutherland, quien había sido un hombre bondadoso, ejemplo de padre, esposo y líder, digno de la admiración y respeto que todos le tenían. Y él le haría honor a su memoria y como su sucesor no pensaba ser menos.

Un puño apresó su corazón cuando el recuerdo de su padre le vino a la cabeza. Siempre era peor en esta época del año, en unos días se conmemoraba el aniversario de su ascensión como líder de la manada y los fantasmas del pasado susurraban constantemente en su mente. Le habían arrebatado la vida antes de que tuviera la oportunidad de vivirla a pleno y a él lo habían obligado a mirar. Había crimenes para los que no existía el perdón, y la venganza era el único antídoto.

Se había convertido en un cazador Alpha, con la capacidad para rastrear asesinos y con la fuerza bruta y racionalidad suficiente para exigir justicia. Año tras año, pese a buscar y esperar lo más pacientemente que pudo, se terminó convenciendo a si mismo que por toda la sangre ajena que manchaba sus manos la Diosa Luna no le había concedido la oportunidad de tener o conocer a su mate, su compañera de vida, su Luna.  Y ahora no era más que alguien frió, soberbio, prepotente y por sobre todas las cosas letal, jamas se tragaba su orgullo y ya no creía en el amor.

El amor es engañoso, en su forma más pura puede llegar a sacar a relucir lo mejor de todos los seres, pero a su vez hay quienes de una manera retorcida lo utilizan como herramienta para manipular y arruinar a cualquiera los bastante imbécil para sentirlo. 

Y él ya había visto suficiente en estos docientos años como para no ser imbécil, decidió seguir adelante, pero no con odio ni con amor. Siguió adelante con un objetivo, pero que sucederá con ese objetivo cuando encuentre lo que pensó que nunca tendría, cuando se de cuenta que su compañera está en garras de su mayor enemigo...

Hola a todos! Gracias por leer, espero sus comentarios y que les guste la historia! Pronto subiré el próximo capítulo.