-Chupachups- [V-Hope]

Capítulo 9 - Parte 2.

By TaeHyung.

Era increíble. ¡Increíble! Como Hoseok hyung conseguía agotar mi paciencia. Es que se pasaba de infante y simplemente no lo soportaba.

>¿Poco me conoces y ya me tomas de la mano?<

>Oye..<

>Qué atrevido.<

Tragué en seco, pues solo recordarlo me avergonzaba de manera insoportable. Es que hasta era capaz de jurar que él me descubrió tocando sus...

Sus labios.

Cerré los míos con fuerza, sintiéndome nervioso ante la sola idea y comencé a mordisquearlos mientras jugaba de manera inconsciente con mis dedos.

Por otro lado estaba el hecho de que me dirigía a su antigua casa, donde aquella extraña mujer me estaría esperando.

Y si, digo extraña porque nadie en su sano juicio manda a buscar a un desconocido para que habite su hogar sin motivo alguno.

De todos modos, ese no era el problema, el problema era que pese a que me había decidido a continuar con mi vida sin ver de manera tan...anormal a Hoseok hyung, sentía que con los actos de la noche anterior y esta mañana, cada vez estaba mas lejos de aquel objetivo.

Y Hoseok, estaba cada vez más dentro de mi corazón..

No pude evitar el soltar un suspiro y pasarme la mano por los cabellos de la frente en un intento de aliviar un poco mi estrés.

-¿Y esto?. -Le miré parpadeando-Estoy bien.-Dije cogiendo la tableta con bayaspirinas sin comprender su significado todavía.-Gracias..

-Le harán sentir mejor.-Dijo el hombre sin emoción alguna en su rostro, concentrado en las calles por las que transitábamos.

Cogí dos de esos calmantes y me los tomé con un poco de agua que aún lw quedaba a mi pequeña botella.

Siempre andaba con agua en ella a donde sea que fuera.

-Dan es su nombre ¿Verdad?.

-Así es señor.

-Usted...¿Lleva mucho conociendo a Hoseok hyung?.

-Si.-Y su inexpresiva respuesta simplemente no me contentó.

-Ah..Veo.

Y así fue cómo continuamos el viaje, en total silencio, pues Dan no estuvo muy dispuesto a entablar conversación alguna, por lo que simplemente no insistí.

Hasta que a lo largo de lo que habrá sido alrededor de media hora, finalmente llegamos a destino aquella mañana.

.....

La tomó por sus hombros mientras aún seguía sentada sobre la cama y se acercó a su rostro para posar sus rasposos labios con olor a tabaco sobre los de la joven, quien le evitó contacto ladeando su rostro y enseñando su cuello.

Ella se quedó con la vista clavada en el suelo, con el semblante serio mientras mordía sus labios en un intento por contenerse. Pues estaba determinada a concluir con aquello.

Después de todo, ella no iba a perder.

-Vamos de mal si continúas así zorrita.-Le susurró el hombre muy cerca de su rostro con una cínica sonrisa que ella supo descifrar al instante.-El dinero no crece de los árboles.

Y golpeó el pecho de la joven con una fina y delicada bolsa de telas cristalinas, las cuales ella cogió por mero impulso mientras sus manos tiritaban.

-Colócate eso. Ya sabes dónde estaré.-El viejo hombre desprendrió su blusa al tirar del delicado cierre que sellaba a ésta, e introdujo un manojo de billetes entre el escote de la joven.