2. El entrenamiento

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A la mañana siguiente, alrededor de las 7, sonó un despertador en la habitación de al lado. Yo ya estaba despierto para entonces, el hecho de dormir era nuevo para mi y se me hacía tan raro que no podía conciliar el sueño más de dos horas, por lo que a las 4 estaba dando paseos por la habitación. Decidí levantarme, vestirme y desde las 4 hasta las 7 estuve leyendo un par de libros de la estantería y escuchando música de un mp3 que había encima de la mesa al lado del ordenador. Me escuché media discografía de Elvis, que me gustó mucho, y me leí los dos primeros libros de Harry Potter, Charlie tiene buen gusto adorando este tipo de libros.

Sobre las 7:15 alguien llamó a mi puerta.

-Castiel ¿Se puede?

-Si, adelante

Cerré el tercer libro de Harry Potter dejándolo encima de la mesita al lado de la cama mientras se abría la puerta, era Charlie con una bandeja llena de vasos con zumo de naranja.

-Coge uno, querido ángel -miró hacia la mesita mientras se acercaba con la bandeja- veo que has estado leyendo la mejor novela del mundo.

-Si... es que no podía dormir y al ver los libros ahí me decidí por leerlos -sonreí mientras cogía uno de los vasos- gracias por el zumo

-Esta noche, si quieres, vemos la segunda peli de la saga -sonrió y se dirigió hacia la puerta- y no hay de qué -salió por la puerta y se encaminó hacia otra de las habitaciones.

Me bebí tranquilamente el zumo, preparé la mochila y fui a la cocina a por el desayuno. Allí estaba Dean comiéndose un trozo de tarta de manzana mientras veía Doctor sexy en la tele. Entré en la cocina, cogí un trozo de tarta y saludé a Dean. Este me respondió con una ligera agitación de cabeza sin apartar la mirada de la televisión.

En ese momento apareció Sam con su vaso de zumo y la mochila en su espalda.

-Hola chicos, yo hoy salgo antes que tengo que terminar un trabajo en la biblioteca.

-Hola Sammy... pero si el trabajo es para la semana que viene, que prisa tienes...bitch.

-Solo quiero tenerlo cuanto antes, así no me pasa como a ti, teniendo que hacerlo el último día todo, Jerk.

Yo les miraba a los dos como si un partido de tenis se tratase. Sam cogió un trozo de tarta y se fue caminando al instituto. Gabriel salió de su habitación aun en calzoncillos.

-Hola guapos... ¿que nos toca hoy a primera?

-Arte, creo... o igual Historia, aun no me se el horario -respondí aguantándome la risa viendo los calzoncillos de corazones de mi hermano

-Si, toca Arte -afirmó Dean y se empezó a reír al ver los calzoncillos de Gabriel- ¿Y esos calzoncillos, trickster?

-Gracias por decirme que toca, lo de los calzoncillos... bueno, son muy bonitos, me los regaló Sammy por navidad, no le iba a decir que no... además, a mi me gustan.

Sigo sin entender muy bien que tienen Gabriel y Sam, pero bueno, ya les preguntaré algún día, en este momento tengo que desayunar que sino llegaré tarde a clase. Terminé de desayunar y miré a Charlie que estaba tumbada en el sofá con los cascos puestos mientras leía un libro. Decidí acercarme a ella y preguntarle que escuchaba, la duda me estaba matando.

-hey, Charlie, ¿qué escuchas?

-Buenas, Cas. Pues ahora mismo Attention de Charlie Puth ¿quieres escucharla?

- Si, claro -sonreí y me puse sus cascos- ¡está muy bien!

-Sabía que te gustaría -sonrió y se levantó- bueno ¿nos vamos a clase? no quiero llegar tarde.

El amor de un ángel (Destiel/Sabriel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora