Capitulo 1

4.3K 217 134
                                    

Harry miró por la ventana de su habitación en Hogwarts. Tal vez, si cerraba los ojos, podía hacer como que nada había pasado, como que todo era una pesadilla. Pero no, no era así. Su padrino, la persona más cercana a él, aquel que había sido un padre para él, había muerto hacía apenas una semana. Su recuerdo aún estaba latente en su mente y en su corazón. Sobre todo, en su corazón, de donde, con tristeza sabía que jamás le iba a sacar.

- ¿Harry? – Una voz proveniente de su amiga pelirroja le sacó de su ensoñación.

- Hola Ginny. ¿Qué quieres? -Preguntó el joven.

- Perdona, pero es que Dumbledore te estaba buscando y parecía importante...

- Gracias -la cortó rápidamente-. Enseguida voy.

Ginny suspiró y, sin hacer caso al ofrecimiento poco disimulado de salir de ahí de Harry, se dirigió hacia el muchacho y se sentó a su lado en la cama.

- Harry, entiendo que estés así, tienes derecho a lamentar la pérdida de Sirius, a ver, él era como un padre para ti, pero, lo que no debes de hacer es culparte por ella. Tu intentaste evitarlo.

El joven la miró. Parecía serena, tranquila y apaciguadora. Pero él estaba enfadado, enfadado con el mundo, con las personas, con todo. Su padrino había muerto y nada iba a hacer que volviera.

- Si al menos pudiera evitar que todo esto pasase... Que mis padres no hubiesen muerto, que Sirius no... que él no...Pero no puedo. Y eso es lo que no me deja descansar. No pude hacer nada para evitar la muerte de mis padres, pero, ¿y la de Sirius? Algo más pude hacer.

- No voy a permitir que digas eso. Mucho haces ya para la edad que tienes. Tienes muchas responsabilidades encima de ti, y eso no es justo para un chico de dieciséis años. -Le contestó Ginny.

- Gracias, pelirroja. – Dijo Harry, sonriéndole.

Ginny le pasó una mano encima de su hombro y le calmó con suavidad.

Harry la miró. Durante esas últimas semanas ambos habían pasado bastante tiempo junto y ya llevaban lo que se podía llamar una relación de amistad. Harry se sentía cómodo cuando ella estaba cerca, y le daba una cierta sensación de felicidad sentirla a su lado. La observaba embelesado el pelo, los ojos, los labios...

Entonces, sacándolos de su ensimismamiento apareció una luz, y lo último que vieron fue a Dumbledore asomado a la puerta recitando unas palabras en lo que parecía ser Latín.

"Et ego dabo vobis occasio, peregrinatione et invenire, et dabo tibi paulo auxilium, ut possis fateor ea"

("Te daré una oportunidad, viaja y descubrirás, y una pequeña ayuda te daré, para que a ella te puedas confesar")

Pero claro, ellos no sabían, cual era la traducción de sus susurros...

Lo siguiente que sintieron fue caer estrepitosamente al suelo, delante de un sitio que a los dos, sobre todo a Harry se les hacía conocido.

- Ginny, ¿estás bien? -Preguntó Harry, preocupado. Aunque enseguida se dio cuenta de donde estaban. Estaban en frente de su casa, o mejor dicho, la casa de sus padres, en Godric's Hollow, pero estaba diferente. Las luces estaban encendidas, parecía que dentro había gente, y lo más importante, estaba perfecta e intacta.

-Sí, estoy bien. ¿Dónde coño estamos? ¿Ha visto lo que ha hecho Dumbledore? Harry, es.. ¿es esta la casa de tus padres? -Dijo Ginny, mitad enfarruscada, mitad confundida.

- Sí, Ginny, es esta. ¿Qué creees que ha hecho Dumbledore? ¿Crees que hay alguna posibilidad de que...? Madre mía, me vas a tomar por loco, pero...

¿Conozco a mis padres?Where stories live. Discover now