Caminar por la ciudad era aburrido, más aún cuando era tan pequeña. Siempre la misma gente con caras largas, algunos preocupados por lo que pasa en sus celulares, mientras otros se dedican a observar la gente a su alrededor. Yo soy una de aquellas. Me gusta mirar a las personas, pensar en que quizá han tenido un mal día y ese es el por qué de sus caras largas. Me gustaría poder decirles que solamente es un mal día, y las cosas pueden mejorar; pero simplemente no puedo.
Las caminatas son comunes, veo gente andar para todos lados, niños jugando, o simplemente viendo sus celulares; es increíble lo indispensable que son en estos días aquellos aparatos. Paso de la gente sin darles importancia, observándolos o simplemente obsequiándoles una sonrisa, la cual normalmente es correspondida. No muchas personas logran captar mi atención.
Al menos no hasta aquél momento... Ya que aquello logró cambiar de una forma inesperada; o al menos lo era para mí.
Mis ojos se centraron en una chica; estatura unos centímetros más baja que la mía, el cabello claro; unos lindos ojos color marrón y una mirada penetrante. No logre apartar mis ojos de ella, se me hacía imposible. Sonreí para mis adentros, observándola en todo momento hasta que logró salir de mi vista entre la gente. ¿Quién era esa chica?, y ¿por qué no podía apartar mi vista de ella? Eran una de las preguntas que rondaban en mi cabeza en aquél momento, y es que sentía tanta curiosidad por ella.
Es increíble como un extraño puede generar tanta curiosidad en ti, a tal punto de no poder dejar de pensar en el rostro de aquella persona... Sólo quería volverla a ver.
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Our little infinite
Romantizm¿Cual es ciertamente el comienzo de todo? ¿Ayer?, ¿hace un año? Nunca sabemos de manera exacta cuándo fue realmente el comienzo de todo, y cuando nos situamos la idea de pensar sobre aquello, nos damos cuenta de que todo inicio antes de lo que imagi...