Mi Venganza...

cosas nuevas

Yurio estaba en la puerta sonrrojado pensando en lo que vio.

Al hacer el cambio de guardia, decidio entrar a saludar a sus amigos, sabía que Otabek estaba ocupado con la proxima llegada de Yakov, así que quería ver a Victor y a Yuri.

Pero nunca penso en encontrarlos en tal situacion, el ver a Yuri siendo penetrado por Victor era algo que no esperaba ver.

Los gemidos de satisfacion de Yuri pidiendo por más le dejo en su ser un deseo de probar aquello, claro que con Otabek.

Solo unos segundos miro la esena antes de salir del lugar, pero queriendo probar aquello.

Exactamente por eso se debía su sonrojo, querer probar cosas nuevas con Otabek imaginandose a si mismo gimiendo por más.

Conociendo a Victor como lo conocia le dejaba en claro que era serio en cuanto a Yuri.

Y el poco tiempo que paso von Yuri supo lo bueno que era y que no dañaria a nadie.

Estaba contento por ellos.

Pero sus pensamientos tanto buenos, como pervertidos fueron interrumpidos por Otabek.

- es raro no verte con Yuri, supongo que estara con Victor, ire a darle unos papeles...

- no - lo detubo antes de que pudiera ver algo comprometedor.

- como...

- si...si...si Yuri esta con Victor seguro puedes quedarte un rato aquí, haciendo guardia.

- solo pideme que me quede contigo, no tienes que darle tantas vueltas.

- tienes razon.

- llegara Yakov en dos días.

- seguro de nuevo busca una prometida para Victor.

- ¿se rendira algun día?

- espero que si.

- porque lo dices.

- ya no es un niño, es nuestro rey, sabra escojer a su pareja.

- solo espero que sea pronto muchos en el pueblo se preguntan cuando tendra a un heredero.

- supongo que quieren estabilidad y esperan verlo con una familia - era verdad, por más que Victor amara a alguien más, debía estar con alguien quien le diera desendencía.

- pasa algo, de repente te pusite serio.

- no es nada - por un momento tambien penso en que Otabek en algun momento tambien desearía una familia y esa relacion que mantenian tendria que terminar.

Despues de hablar de otros temas Vicor solicito a Otabek para rebisar algunos papeles y Yuri fue a hacer guardia en otro lado.

*

Como ya era costumbre por la noche Otabek y Yuri salieron juntos en direcion a la casa de Otabek.

Yurio esa noche quería experimentar nuevas cosas con Otabek, pero tenía miedo de lo que Otabek pensaría si él se le lanzaba y le pedía hacer aquello.

Seguian sin hablar de sus sentimientos o de un futuro juntos pero al cerrar la puerta nada más importaba, se besaban con todo el amor y el deseo que tubieron que refrenar durante todo el día.

Dejando un camino de ropa por toda la sala en direcion a la habitacion, sin dejar de deborarse las bocas.

Llegaban desnudos a la cama tocandose saboreando el momento tan especial que les pertenecia, solo ellos y la noche siendo testigo de sus encuentros y de todo el amor que se mostraban en el acto.

Por un momento Yurio perdio el miedo para decirle a Otabek lo que deseaba.

Pero fue Otabek el que guiandolo lo llebo al piso, quería intentar algo.

Yurrio no puso resistencia dejando que su amante cumpliera su fantacia.

A Otabek le encantaba la manera en que su rubio se la chupaba, pero por su tamaño no podía con toda su logitud, esa noche quería ser él quien penetrara a su gusto y antojo la boca de Yurio.

Comenzo lento, tomando la cabeza de Yurio para evitar que quisiera escapar.

Con más fuerza dio una estocada llegando a su garganta, la sensacion de dominio ante la situacion le encanto y empezo a dar más estocadas profundas.

Las arcadas y las lagrimas no tardaron en llegar, tratando de tener control sobre su cuerpo se nego a llorar solamente aguantando las lagrimas al igual que el impulso de vomitar.

Otabek se separo para dejarlo respirar, no iba a negar que le encantaba eso, pero tambien quería que estubiera comodo con su brutalidad.

Yurio limpio sus lagrimas y le permitio a Otabek seguir, no imagino que los gemidos que se le eacapaban a Otabek le encantarían tanto, el tono tan exitado en el que repetia su nombre, era tan erotico que estaba totalmente duro, sin siquiera tocarse.

Otabek siguio penetrandolo con rudeza y Yuri seguía aguantando el ardor en su garganta, ver así de extaciado a Otabek era maravilloso.

Cuando Otabek gruñia su nombre, su deseo aumentaba, su miembro temblaba de emocion.

Algunas estocadas que llegaron a lo más profundo de su garganta, llego la libercion para ambos, aun sin estimulos Yurio estaba muy exitado tanto que se corrio al tiempo que Otabek, trago todo el semen de Otabek y siguio en el piso.

Otabek lo llebo a la cama cargado y lo limpio, se limpio a si mismo y se acosto a su lado abrazandolo.

- ¿estas bien?¿fui muy rudo?

- nmn - nego con la cabeza.

- quieres...

- estoy agotado - su garganta aridia.

- perdon, fue un largo día, siempre que llega Yakov es así.

- Victor suele dejar todo para ultimo momento.

- solo cuando no esta Yakov, que haría sin él.

- ¿es tan nesecario buscarle una pareja?

- es nuestro rey debe tener un heredero.

- y si ... - mordio su labio sin querer continuar por miedo a una respuesta que tambien a él lo lastimara.

- dime.

- no es nada.

- vamos, te conosco solo dilo.

- si él no quisiera estar con una mujer - lo había dicho, ahoara se preparaba para que le destrozara el corazon.

- si se enamorara de un chico - se habia encojido y apretado con fuerza las sabanas, entendio que Yurio preguntaba por algo.

- ... - esperba su respuesta.

- es mi amigo lo apoyaría, pero como rey debería dejar un heredero, si no fuese rey podría estar con quien quisera y que lo demas no importara - lo abrazo fuerte y lo beso, quería que entendiera que èl no lo dejaría.

- tienes razon, supongo que llega un tiempo en el que todos quiern familia.

- insistes mucho ¿pasa algo?

- creo que Victor y Yuri tienen una relacion como la nuestra.

- enserio - la felicidad lo inundo no porque su amigo se enamorara sino porque Yuri ya no sería un obstaculo entre él y Yurio,aun sentía celos de su amistad.

- aunque se que es algo...

- entonces apoyemoslos - lo beso una, dos, tres y muchas veces antes de que el cansancio los venciera.

%%%

Awe...