Los Milagritos de los Milagros

Tenía que ser más interesante

Notas iniciales:

¡Disfrutad del capítulo!

Capítulo 6 - Tenía que ser más interesante

Una vez la canasta fue bajada a la altura para que los niños pudieran usarla, empezaron. Luka era quien atacaba y Mirai defendía. El moreno avanzó intentando hacer una finta, pero Mirai le conocía lo suficiente como para saber que vendría con eso y le robó la pelota para alejarse al menos un metro y ponerse en posición de tiro, lanzando desde la línea de triples. La pelota rebotó en el tablero, pero entró.

- Tres a cero, nanodayo. -dijo Mirai, subiéndose las gafas en un gesto que tantas veces había hecho su padre.

- ¿Por qué crees que te he dicho a diez? -le respondió Luka- Ya esperaba que hicieras eso, eres previsible. -fingió que no le molestaba que le hubiera robado la pelota tan fácilmente y volvió a ponerse en posición de ataque, esta vez pasando con éxito a Mirai, pero el pelinegro no tardó en seguirlo y alcanzarlo. Tenían una velocidad parecida.

Luka se detuvo enfrente de la canasta para lanzar, queriendo aprovechar que él era un poco más alto que Mirai, pero el niño ya estaba ahí bloqueando el tiro. El peliazul soltó un "tch" y fue a por la pelota antes de que Mirai la consiguiera para volver al ataque, dando toda la vuelta por la media pista consiguiendo dejar atrás al pelinegro, lanzando la pelota a canasta, consiguiendo que esta entrara.

- ¡Dos a tres! -exclamó Luka, girándose a presumir, pero Mirai ya tenía la pelota de nuevo y estaba llegando a la línea de tres- ¡Ah, ni hablar! -exclamó, corriendo a saltar para bloquear, pero no llegó y esta vez el tiro entró limpiamente.

- Seis a dos, nanodayo. -soltó Mirai, mirándolo con suficiencia- ¿Su majestad Aomine podrá recuperarse de esta? -preguntó burlón, mientras los que miraban pensaban que la combinación de seriedad de Midorima con el temperamento burlón de Takao daba miedo.

- ¡Por supuesto que podré! -respondió, sin darse cuenta de que el "su majestad" había sido sarcasmo.

Luka se preparó con la pelota, pensando en si intentar un triple como hacía Mirai para alcanzarlo de una, o seguir intentando lanzar un "Formless" como los de su papá y rezar para que entrara. Era muy arriesgado, tanto una opción como la otra, pero entonces sonrió. Tenía una tercera opción, en realidad, o más bien una opción 1.2...

Antes de que Mirai se pusiera en guardia, agarró la pelota corriendo hacia la línea de triples, poniéndose en posición para tirar teniendo una imagen mental de lo que acababa de ver y lo que quería hacer. Mirai corrió hacia él, intentando bloquearlo, mientras Luka se movía y lanzaba la pelota con rostro calmado, observando como ésta seguía una trayectoria idéntica a un minuto antes y entraba sin rozar el aro.

- Cinco a seis, nanodayo. -se burló Luka, fingiendo que se subía unas gafas invisibles, mientras en el banco Kira chillaba sobre que había sido una copia increíblemente igual (¡para algo es una copia!).

- Tenía que ser más interesante. -sonrió Mirai, empezando a olvidar por qué estaban haciendo un one-on-one, el ser copiado era algo fuera de sus planes, pero más que preocuparle le divertía.

Sabiendo que podría copiarle si hacía otro triple, Mirai avanzó con la pelota alejándose de la línea de triples, sin necesidad de comprobar con la mirada dónde estaba Luka gracias a su Hawk-Eye. Sabiendo que venía tras él, se detuvo de golpe para luego avanzar rápido, sorprendiendo así a Luka por unos momentos que aprovechó para acercarse a canasta y lanzar, consiguiendo así dos puntos más.

- Ocho a cinco, nanodayo. -dijo Mirai, sonriendo levemente, recibiendo una sonrisa de satisfacción por parte de Luka. Él también estaba olvidando de dónde venía el hacer el one-on-one, pero no le importaba, esto era demasiado divertido. ¡Ojalá le hubiera dicho a quince o veinte en vez de a diez!