Capítulo 6

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Hoy vamos a la playa! Tengo unas ganas de ponerme al mar y flotar, ver los peces y tomar el sol!

Salimos de casa a las 11 a.m. Hoy no he tenido que madrugar y por eso ya creo que este día será perfecto.

De camino a la playa nos hacemos fotos entre todos.

—Chicos, —dice Violet— nos hemos hecho tantas fotos que creo que deberíamos hacer un grupo en Whatsapp e irnos pasando las fotos para que las tengamos todos.

—Estoy de acuerdo—digo—. Nos pasamos ahora los números de teléfono y cuando lleguemos al apartamento creamos el grupo?

—Perfecto—dice Ash.

Al llegar al apartamento, papá y James sacan las cosas del coche mientras mamá y Lilian deciden ir al supermercado a comprar comida.
Nosotros nos quedamos con nuestros padres y les ayudamos a poner nuestras cosas en el ascensor. Todos subimos las escaleras pero como es un segundo piso, no pasa nada.
Un poco de ejercicio no es malo.

Mientras papá nos abre la puerta del apartamento para que vayamos poniendo las cosas, él le pide a James que lo acompañe a encender la llave del gas, del agua y de la luz.

Les dejo a todos apreciar lo bonito que es el piso, mientras que lo primero que hago es abrir todas las ventanas para que se ventilen las habitaciones y para poder disfrutar de las vistas mejor.

—Chicos,—les llamo la atención a todos— mirad que vistas.

Y todos salen conmigo al balcón para mirar como se rompen algunas olas del mar.

—Me encanta tanto! Tiene un no sé que que me hace querer relajarme completamente y flotar en el mar. Es tan bonita.

—Lo es—afirman todos.

Quito la mirada porque siento que alguien me esta mirando y al girar la cabeza veo que es Zack.

Estoy tan confundida. Él es tan serio, pero cuando sonríe... Maldita sea. Cuando sonríe podría contagiar su sonrisa a la persona más triste y amargada del mundo, podría incluso hacer que yo saltara de un maldito puente y lo haría solo por ver una vez más esa sonrisa. Por no hablar de su mirada. Es tan profunda que sí lo intentara podría ver dentro de mi.

Y me asusta. Mucho. Pero no. Él solo es mi amigo. Y tengo que pensar que dentro de 11 días ya no volveré a verlo. Al menos, no tan seguido y podré seguir como si nada con mi vida.

Veo que frunce el ceño antes de darme una sonrisa tímida y se la devuelvo.

Con un ligero movimiento de cabeza como si se negara algo a él mismo devuelve su mirada al mar y antes de que me pille siguiendo mirándole mi padre me salva.

—Chicos, estáis aquí. Entrad, deberíamos empezar a guardar nuestras cosas para que cuando vuestras madres lleguen podamos ir a comer e irnos a la playa.

Papá le enseña a James su dormitorio mientras que yo guío a los chicos a ver la habitación de invitados.

—Carla, supongo que esta es tu habitación porque no creo que quieras dormir con nosotras.

—No os ofendáis, pero no. Solo necesito un poco de privacidad para mi edad del pavo y que al hacer tonterías no me juzguéis mucho—se ríe.

—Tranquila—le digo—. Todos hemos pasado por esta etapa. Y chicos, quedamos nosotros —digo girándome finalmente hacia ellos—. Ya habéis visto el sofá. Estiraos haber si estáis cómodos—les digo antes de que ellos vayan corriendo hacia el sofá y tirándose como si su vida dependiese de eso.

Violet y yo negamos la cabeza.

—Chicos—decimos a la vez y riéndonos.

— Chica, ahora solo faltamos nosotras —le digo cuando veo el compresor de aire—. Toma, infla la cama mientras yo voy a buscar las sábanas y algún cojín más.

I'll Love You Till The EndDonde viven las historias. Descúbrelo ahora