Mío.

Capítulo 30.

Miró a Sok Min que comía al parecer tranquilo como si eso fuera un almuerzo más que compartían desde que su relación terminó, y debería serlo, sin embargo Taemin no lo sentía así, había estado pensando las cosas demasiado e incluso habló con sus amigos con temor a lo que estos fueran a decirle con respecto a que no quería alejarse de su ex, y ellos habían dado sus puntos de vista en las cosas, en su actual relación con Min Ho casi no habían querido opinar diciendo que ellos no estaban felices por eso pero que era su decisión, porque ellos podrían estar a favor de Sok Min pero que no sabían qué sentía realmente y eso era algo que Taemin tampoco estaba seguro, no obstante, ahora creía que debía ser más sincero con su ex que seguía esperando a que se aclarara con respecto a sus sentimientos.

Ni siquiera había probado su comida observando a su ex, pensando en qué momento era el adecuado para hablar, sin embargo no encontraba ninguno, no quería arruinarle el almuerzo a Sok Min, pero no sabía cuando hablar, porque ningún instante parecía adecuado y al tener una vez más la mirada de su ex sobre él apretó las manos que habían permanecido en su regazo con tanta fuerza que sus uñas se clavaron en la palma de sus manos.

—¿Estás bien? —la voz de Sok Min se escuchó lejana y sus nervios incrementaron que dudó que pudiera hablar por lo tanto asintió —no has comido nada.

—No tengo hambre —susurró.

—Taemin... —su tono cambió a uno preocupado que Taemin odió que usara porque sólo lo hacía sentirse más culpable.

—Estoy con Min Ho.

La frase salió de sus labios tan apresurado que él mismo parecía oírse como si aquello hubiese sido dicho por alguien más, y odiaba cuando muchas veces no tenía tacto para decir las cosas, más cuando los nervios eran muchos y en ese momento él estaba demasiado nervioso, no quería lastimar a Sok Min con sus palabras pero creía que lo había hecho, a pesar de que éste no hubiese dicho nada y sólo lo estuviera mirando ahora ya sin interés en su comida, sino que parecía que estaba esperando que él dijera algo más.

—Lo siento —volvió a susurrar —sé que pediste que nos separáramos para me aclarara con respecto a mis sentimientos, y yo...

—Lo amas a él.

No lo sé, estoy confundido, porque sé que lo quiero, quiero que esté conmigo, pero tampoco te quiero perder a ti.

—Me hubiera gustado que fueras un poco más sincero y que me lo digas cuando te diste cuenta que no me amas.

—Sok Min yo a ti te quiero...

Sok Min sonrió amargamente aunque intentó disimularlo, los sentimientos de Taemin no eran nuevos para él, de hecho, era algo que había estado esperando que sucediera mucho antes, cuando se dio cuenta que no estaba viviendo con Ki Bum, que todo había sido una mentira para cubrir el lugar en el que vivía, del cual se había enterado cuando lo vio junto a Min Ho, no los siguió, pero no fue necesario para saber que estaban juntos cuando Taemin lo saludó con un beso en los labios, quizás habían sido un error verlos pero no pudo evitarlo cuando eso sucedió ya que sus horarios de trabajo habían terminado, y esperó ésta conversación desde mucho antes.

—Pero no me amas —dijo en un tono suave —sabía que esto podía pasar cuando pedí que nos tomemos un tiempo, no me sorprende que hubiese sucedido cuando su reaparición en tu vida hizo demasiado.

Un demasiado que él no quería especificar pero que lo tenía claro, porque la lejanía que Taemin empezaba a mostrar hacia él y aquellas salidas que no le eran ocultas, su constante mención cuando hablaban. Min Ho empezó a estar en todo y ahora creía comprenderlo y aunque dolía quería aceptarlo, porque por mucho que doliese él tampoco quería alejarse de Taemin, lo amaba demasiado como para pensar que de un momento a otro dejó de estar a su lado, para lo que todavía no estaba preparado por mucho que hubiera querido estarlo, porque Sok Min había creído que iban a estar juntos mucho más tiempo, y antes de la aparición de Min Ho todo parecía así, pero ahora sabía que no, porque lo mismo daba si aparecía ahora o después, creía que Taemin iba a volver a él porque no lo había olvidado como él mismo quiso creer.