The Amazing Spider-Man

Capitulo 14

Flint Marko y Alex O'Hirn entraron por las puertas del laboratorio central de OsCorp, acompañados del doctor Otto Octavius, quien portaba sus enormes cuatro brazos tecnológicos. Los tres cruzaron el laboratorio, donde Otto les proporcionó una platica acerca de los riesgos de los experimentos. Al llegar a la enorme cámara de paredes de vidrio donde se realizarían los experimentos, se encontraron con Norman Osborn.

—Caballeros —saludó cordialmente—. Les doy la bienvenida a OsCorp. Espero que no la hayan pasado mal en prisión.

—No es nuestra primera vez —dijo Alex.

—Nos pagarán, ¿cierto? —preguntó Flint.

—Ah, te gusta el dinero. ¿A quién no le gusta el dinero? —Norman abrió la puerta de vidrio, indicándole a Flint Marko que sería la primer persona en hacer la prueba—. El proyecto de fusión de moléculas será perfecto para ti.

Norman le asintió a Otto.

Otto, con sus cuatro brazos mecánicos dirigidos por Inteligencia Artificial, empezó a colocar cuatro túneles de hierro sobre cada esquina de la cápsula gigante de vidrio. Marko se encaminó directo a la habitación de cristal, donde se adentró, y la puerta se cerró después de unos segundos.

—Hágalo ahora, doctor octopus —se mofó Norman y Otto, dudando seriamente, activó el proyecto.

La habitación de cristal se vio inundada por un color verde claro, como si fuesen rayos analizadores que rodearon el cuerpo de Flint Marko. Se quedó quieto, observando cómo los rayos pasaron sobre su camisa verde hacia su piel.

Con su brazo mecánico derecho superior, Otto Octavius haló la palanca, y los tubos a e encendieron.

Por medio de los pequeños túneles conectados, kilos y kilos de arena cayeron sobre el cristal, como si se inundara una habitación. La arena llegó y cayó sobre los hombros de Flint Marko, por su rostro y en su abdomen. Éste sólo miró a su alrededor, notando que el máximo de arena llegó hasta la altura de su cintura. Del techo, en un movimiento versátil, una pequeña aspa emergió y se activó al instante. Un remolino de arena empezó a danzar alrededor de la silueta de un Flint Marko asustado; estaba sintiendo cómo la arena lo penetraba, la sentía en su cuerpo y en cada gesto que hacía.

Su corazón se detuvo, y cerró los ojos.

Al momento de abrir los ojos, su mano derecha se encontraba cubierta de granitos de arena, siendo absorbida por el remolino. Su cuerpo empezó a desprenderse como parte de la arena. Y Flint Marko sintió mucho dolor antes de desaparecer.

Lo que Otto Octavius, Norman Osborn y Alex O'Hirn observaron, fue una enorme montaña de arena dentro de la habitación de cristal. Alex se acercó, haciendo a un lado a Otto mientras se apegaba al vidrio de protección, observando que Flint Marko ya no se encontraba ahí.

Dentro de la habitación de cristal, con delicadeza, varios granitos de arena empezaron a moverse sobre el océano rocoso que había dejado en el centro. Pequeñas olas de arena se alzaron con delicadeza. Y en el centro, la masa de arena empezó a palpitar, como si se tratara del corazón de un nuevo ser.

Era un nuevo ser.

La silueta que emergió entre la arena, parecía rota: le faltaba la nuca por completo, mientras su rostro se encontraba inexpresivo; su brazo derecho se encontraba a la mitad, mientras que al izquierdo le faltaban tres dedos. La silueta intentó moverse, pero al instante, se desvaneció y se unió al resto de la arena. Segundos después, el océano de arena empezó a moverse, a correr como agua sobre tuberías, extendiéndose más a su paso. Empezó a formarse un bulto, una figura de una espalda gruesa, con sus brazos extendidos. Lentamente, la silueta volvió a levantarse, ahora por completo y se quedó ahí, observando a los tres sujetos que lo miraban a través de un vidrio protector. Sus ojos de arena se observaron las palmas, detallando las pequeñas rocas y granitos de arena que caían con cada movimiento. Finalmente, la silueta dejó reposar todo su peso, y la arena empezó a cambiar de textura y color, hasta formar la inexpresiva pose de un Flint Marko con los ojos cerrados.