Leyendas de Esmira Capítulo 24

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CAPÍTULO 24

La flamante Tix-12 se acerca a Rixión, mientras que la pequeña Zarc Ferox la escolta. - Tix-12 a Zar Ferox, ¿me recibís? -Alto y claro Aiden.- Responde Leyre alegremente. -Antes de entrar a Rixión, debéis saber una cosa. -¿Cuál?- Responde Enzo exaltado. -Vuestras armas. ¿Sabéis crearlas? -No. -Sólo tenéis que concentraros en algo que os de mucha rabia... Y aparecerán... -¿Pero qué son? -No lo sé, Enzo, pero sé que sólo hay cuatro personas en la Galaxia que pueden usarlas. De repente, una nave se acerca. -Identificación, por favor. - Dice una voz robótica. -Chicos, ¿qué hacemos? No les iremos a decir quiénes somos...- Dice Enzo. -Identificación, por favor.- Repite la voz.- Los no identificados serán destruidos en treinta, veintinueve, veintiocho... -¡Aiden, prepárate, que vamos a tener mucha compañía! -¿Por? Antes de recibir ningún tipo de respuesta, Aiden ve como la Zarc Ferox maniobra y se pone a la cola de la nave de seguridad, y, sin previo aviso, la derriba con un torpedo. -¡Buen tiro, Leyre! En ese instante, varias naves de seguridad aparecen. -¡Enzo, más te vale tener un plan! -Lo tengo, Aiden, lo tengo.- Dice mientras da media vuelta y vuela al encuentro de las naves enemigas. -¡No sabía que suicidarse entraba en el entrenamiento de la BIC!- Dice Aiden mientras la Zarc Ferox destruye a su primer oponente. -¡Aiden, ayúdale!- Grita Kate desesperadamente. Aiden resopla, y, de mala gana gira y se encara a la poderosa flota. Tras un breve combate aéreo, aparece una nave nodriza de la Coalición, escoltada por cientos de cazas. -¡Aiden, retirada!¡Con eso sí que no podemos! La Zarc Ferox maniobra rápidamente y vuela hacia abajo, pero la Tix es alcanzada en el por un disparo y comienza a caer. -¡Aiden, trata de aterrizarla en esa llanura!- Dice Kate. -Te escolto.- Dice Enzo seriamente. La nave cae, cada vez a mayor velocidad y prácticamente sin control alguno. Además, comienza a dar vueltas sobre sí misma. -Enzo, ¿algún consejo de cómo estabilizar esto? -De eso se encarga Leyre. ¡A los lanzatorpedos, dispara al ala que está intacta! -¿Estás loco?¡Está girando a demasiada velocidad!¡Podría darles a ellos! -¡Es nuestra única forma de salvarles! Resignada, Leyre se pone el visor. Enzo maniobra y se pone en cola de su objetivo. -¡Tú puedes, Leyre!- Grita Aiden. Ésta se concentra, aprieta los dientes, apunta y dispara. Logra partir el ala por la mitad, y la nave se estabiliza justo a tiempo para poder tomar tierra forzosamente. La Zarc Ferox aterriza justo al lado de la nave accidentada. Los ocupantes de ambas naves abandonan sus vehículos y se guarecen de los disparos enemigos tras una enorme roca. Están en silencio unos segundos, hasta que el fuego cesa y se asoman. Ven como un carguero aterriza al lado de las dos naves. Entre varios operarios meten la Zarc Ferox en el carguero y este despega dejando una nube de arena.                                                                       

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