Leyendas de Esmira

Leyendas de Esmira Capítulo 18

CAPÍTULO 18

Ambos amigos salen del túnel, el cual está infestado de enredaderas y entran a una estancia circular. -Esta... Es la Zarc Ferox ...-Dice Enzo mientras señala una astronave de unos cuatro metros de largo, con dos alas en la zona ventral, pintadas de verde, mientras que el cuerpo de la nave presenta un reluciente color plateado. A los lados del alerón trasero, aparece, casi descolorido, el escudo de Esmira. Por algunos sitios asoman cables, y faltan agunas de las placas metálicas que recubren el motor y los cargadores de los cañones. -¿Y crees que esto volará? -No es momento para preguntas técnicas. -No es una pregunta técnica, es que paso de acabar frita porque este trasto ha explotado. Ambos se miran desafiantes, hasta que Enzo, con un deje de súplica en su voz, vuelve a hablar. -Pues quédate aquí con la Coalición y con el hombre de plateado. Yo me voy a por Leyre y Aiden. -No no, yo voy.- Dice Kate. Oído esto, Enzo abre la cabina y ambos entran. -No es muy espaciosa, ya que la hice pensando en la velocidad y la agilidad. Es una nave de combate. Ahí atrás tienes el control de los dos lanzatorpedos. Yo tengo los láseres y los mandos de la nave. Bajo tu asiento tienes unas botellas con agua, por si hay algo de fuego... -¿F...Fuego? -Tengo un pequeño panel para los ajustes generales del estabilizador. El panel general lo llevas tú detrás, yo te indicaré. Ah, y, Kate, una cosa más... -¿Qué más? -Esta vez no le des a ningún botón de emergencia. Kate asiente, captando la recomendación indirecta de ser prudente. -¡Encendiendo motores! Con un estruendo, los motores se encienden y ronronean. -Campo de fuerza... Activado... Alerones... Combrobados... ¡Despegue! La nave sale por una compuerta situada en la pradera, que se abre de par en par. -¡Nos siguen tres cazas de la Coalición! ¡Huyamos! -¡Enzo, hay algo en el cielo! Una capa azul eléctrico aparece en el cielo. Enzo logra ser lo suficientemente rápico como para no chocar con ella y volver a volar a ras de los árboles. -¡Han rodeado el planeta entero con un escudo de rayos! -Eso significa que han traído naves nodriza hasta aquí... Y haría falta media docena de esas para activar un escudo que rodeara el planeta entero...- Masculla Kate.-¡Enzo, vamos a tener mucha compañía! Enzo vuela bajo un tiempo, hasta que la sombra de las naves nodriza cubre su nave. -¡Debe haber un generador por aquí, en tierra! -Yo me encargo de buscarlo... ¡Kate, tú encárgate de esos cazas! La chica afrirma, se pone el visor de disparo y agarra los mandos con fuerza. -¡Se mueven muy rápido! ¡No tengo un tiro claro! -¡Cuando se crucen dos, aprovecha! Kate espera a que la trayectoria de dos de las naves doradas se cruce, y dispara. La primera logra apartarse, pero la segunda, que no había visto el torpedo, es derribada por la esfera azul. -¡Buen tiro! Valiéndose de unas virguerías aéreas, Enzo logra esquivar un torpedo enemigo, y derribar con los láseres a dos aeronaves. -¡A la derecha, abajo! En un pequeño claro, se encuentra la puntiaguda torre del generador. -¡Daré unas vueltas, tú ataca con los torpedos! Enzo comienza a describir círculor alrededor del claro. Kate, en el asiento de atrás, se concentra, fija el objetivo y dispara. Acierta en el blanco. El escudo desaparece y la pequeña nave plateada asciende hasta el cielo, cruza la atmósfera, y entra al espacio. -Los hemos perdido... De momento... -¡Vaya, Enzo, has estado increíble! -Aquí la que ha destruido el generador has sido tú. La nave se aleja del planeta, y pone rumbo a Yermaf.