Causa perdida

Capítulo 4: The Valleys.

{MULTIMEDIA: Philipp Peitz}

-¿Qué estoy y haciendo aquí?—preguntó Violet sorprendida e irritada.— Pensaba que había dejado claro que quería que me llevaseis a casa.

-Oh, vamos, no te enfades por querer que no te mueras del asco en casa un viernes.—contestó Philipp saliendo del Jeep que Jackson conducía.—

-Philipp, yo... Quería estar sola.

-Te conozco y sé que lo peor que puedes hacer ahora es estar sola. ¡Vamos! ¡No puedes estar en ningún sitio mejor que este!—contestó él riéndose—

-¿Y qué es este sitio exactamente?—preguntó—preguntó

-Esto, querida Violet, es 'The Valleys'. —dijo Nate—

-Gracias Nate, gran aclaración. ¿Podéis explicarme que narices es 'The Valleys'?

-Es..., como decirlo, nuestro sitio secreto. ¿Ves esa casa de ahí? Es la vieja granja The Valleys.—dijo señalando un cartel en el que apenas se podía leer "The Valleys Farm".— La cerraron y abandonaron hará unos ocho años más o menos. Un día decidimos subir aquí; alcohol por un lado, música por otro, ya sabes.—rió Jackson—

-Y desde ese día es una tradición.—continuó Nate—

-Nadie sube aquí.—añadió Jackson— Excepto nosotros.

-Respecto al alcohol.—dijo Philipp haciendo un gesto con la cabeza y señalando en la dirección en la que un coche y una moto se aproximaban—

Jackson se apartó a un lado y dejó que Dylan bajase de la moto y Julia y Jenna del coche.

-Pensaba que vosotros ya no os llevabais bien.—dijo Philipp—

-Es difícil de explicar. Pero digamos que Caroline no se entera ni se va a enterar de que venimos aquí. No queremos que se adueñe de este sitio también.—contestó Jenna—

-Me alegra saber que esto está aún libre de esa zorra.—bromeó Philipp— Pero no entiendo, ¿por qué es así? Ella... antes...

-Nadie lo sabe Philipp. Simplemente cambio, de un día para otro.—contestó Nate apesadumbrado—

-Bueno, olvidémonos de ella ahora, ¿queréis?—dijo Jackson mientras abría una botella de Jack Daniels—

Violet le observó divertida. Le impresionada la facilidad con la que Jackson cambiaba de tema, se emborrachaba y divertía, ignorando cualquier preocupación que pudiera tener antes.

Jackson le tendió una copa a Violet y ella la aceptó con curiosidad.

-¿Qué es?—preguntó mirando el líquido color rosado—

-Tú pruébala, a ver si te gusta.—contestó guiñándole un ojo. Después volvió a buscar más botellas de entre las bolsas y empezó a preparar más mezclas en unos vasos de plástico que había también en ellas.—

Violet tomó un trago de aquella misteriosa bebida y se sorprendió ante su sabor. Era ácida, pero a la vez dulce. Se notaba el sabor del alcohol, pero éste no empeoraba el sabor de la mezcla. Sabía riquísima.

-Es lo mejor que he probado en mi vida.—dijo Violet acercándose a Nate—¿Sabes qué narices lleva?

-No, ni yo ni nadie. Jackson nunca dice que llevan sus mezclas.—dijo dándole un trago al vaso de Violet— Estoy casi seguro de que esto es un "Red Sunset".

Violet se quedó pensativa y siguió bebiendo de su copa. No tardó en acabársela y se acercó a donde estaba Jackson.

-Ponme otro "Red Sunset".—dijo señalando su vaso vacío—