●The Hotel● ●Larry Stylinson●

2. "¡Bienvenido!"

 Lunes 5:10 am. 

-¡Joder Harry! Levantate-. Gritó por tercera vez Gemma, irritada-. Harry, carajo, te dije que tenías que estar listo a las cinco en punto... son cinco diez Harry, vamos a llegar tarde. 

-Cinco minutos-. Pidió con voz ronca. 

-Al carajo Harry, levantate o le diré a mamá que te suspendieron esa vez por chuparsela a ese chico-. Amenazó Gemma. 

Harry se levantó fugaz de la cama y corrió a la ducha.Gemma río, al fin algo habia funcionado. 

Sin más que hacer y lista para trabajar, bajo con Anne, ayudándole a hacer el desayuno, era la primera vez que se le hacía tarde en el trabajo dentro de sus 3 años de trabajar en el hotel. Estaba nerviosa. 

 Harry bajó en cuestión de minutos, terminando de vestirse en las escaleras. Gemma rodó los ojos enfurecida. 

-¡Eres un tonto Harry Styles!-. Gruño su hermana para luego morder su sándwich. 

-¡Callate! Es solo que lo olvidé. 

-Por favor Harry, no quiero que me despidan, desayuna rápido y nos vamos. 

-Ya voy-. Dijo atandose las agujetas. 

Tomó su malteada, terminandosela en cuestión de segundos. Gemma lo miró asombrada, río al ver el bigote de leche que se le había formado. 

-Harry, limpiate y nos vamos-. Rogó. 

-Oh, si-. Río. 

Tomó una servilleta, y echandose el pelo atrás una vez más, salieron de casa, sin antes despedirse de Anne, quien les deseo suerte. 

 10 minutos después. 

-¿Cuánto le debo?-. Preguntó Gemma al hombre del taxi. 

-Un dolar con veintitrés-. Anunció. 

Gemma le extendió el dinero exacto y se bajó rápidamente con Harry.

 -Gracias, tenga buen día-. Se despidió Harry. 

-Igualmente-.agradeció el taxista, 

Harry quedó boquiabierto al ver aquel hotel, era realmente grande, y muy hermoso. 

-Y tiene piscina-. Susurró Gemma divertida. 

Entraron rápidamente.En la entrada estaba el área de recepción, un área de cafetería, y un largo pasillo hacía un ascensor, a los costados se encontraban las escaleras.Lo miró alucinado, era muy hermoso a decir verdad, un honor trabajar ahí. 

Se sintió culpable al pensar en que podrían correr a su hermana por su culpa, por ello, prometió hacer la cosas bien.Una mujer, no muy grande, aproximadamente de unos 36 años de edad, se acercó a Gemma. 

-Cariño, llegas con retraso, tuve que cubrirte, afortunadamente el jefe no se ha dado cuenta-. Suspiró la mujer. 

-Lo siento Ceci, te juró que no vuelve a pasar-. Dijo apenada. 

Harry miraba la escena culpable, sintiendo arder sus mejillas. 

-¿Él es Harry?-. Preguntó la mujer, llamada Ceci. 

-Si, es él-. Respondió Gemma. 

-¡Hola Harry, Bienvenido!-. Saludó. 

Le dio un pequeño, pero confortable abrazo de bienvenida. 

-Gracias Cecilia-. Respondió. 

-Ceci, dime Ceci cariño, ahora, lleva tu solicitud de empleo con el jefe-. Ordenó.