VII

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Laura

Despertar al lado de Ross era nuevo, sin embargo eso no lo hacía menos lindo. Me agradaba más de lo que me gustaría admitir, y eso me asustaba.

— ¿En qué piensas? — pregunta Ross acariciando mi cabello suavemente mientras me mira y yo le sonrío.

— En nada. Debería irme a trabajar... — murmuro.

Ross me abraza con más fuerza y me acurruco en él. Algo me decía que hoy no iría a trabajar.

— No vayas... Di que has sufrido un ataque y que preferirías quedarte en casa con tu caliente novio, de todas formas no es mentira. — sugiere y me río levemente para después besarlo.

— De acuerdo... No iré... — susurro en el beso mientras que él se sube arriba mio sin dejar todo su peso. — Necesito mi celular para avisarles.

Ross me lo alcanza y comienza a repartir besos por mi cuello. — Llama de una vez...

Ruedo los ojos riendo y llamo a mi secretaria, Miranda.

— Buenos días, señorita Marano. — me saluda ella.

— Buenos días, Miranda. ¿Cómo estás? Quería avisarte que hoy no iré al trabajo, ayer sufrí un ataque de parte de un acosador y preferiría quedarme en casa hoy.  Cancela mis citas y explícales por qué no voy así no creen que soy una irresponsable.

Ross se ríe y vuelve a besar mi cuello, provocando una sonrisa tonta en mi mientras que cierro los ojos.

— ¡Oh, Dios! ¿Está bien? ¿Necesita algo? ¿Necesita que vaya?

— No, descuida. Mi amigo se quedará conmigo hoy. Tómate el día, cancela mis citas y vete a tu casa. También dile a... — le digo pero Ross muerde levemente mi cuello mientras se pega más a mi y yo me contengo para no gemir. — Dile a Brandon y a Lisa si preguntan... Debo irme. Adiós.

Ni siquiera dejo que responda ya que corto la llamada y tiro mi celular a la otra punta de la cama, Ross une sus labios con los mios con ternura y yo le correspondo de la misma manera.

Sus manos descienden lentamente y yo me quito la remera para luego besarlo nuevamente. Yo solo estaba con su remera y mi ropa interior, mientras que él solo estaba en ropa interior, así que no se nos dificultaría mucho... La puerta se abre y una voz se hace escuchar interrumpiéndonos.

— Oye, hermano... — comienza a decir quien yo creo que es Ryland, y Ross se baja de arriba mio. De inmediato me tapo. — Tú debes ser Laura. Un gusto conocerte. Lamento las circunstancias... Aunque no tanto.

— ¿Qué quieres, Ryland? — pregunta Ross rodando los ojos y alcanzandome su camisa.

— Solo quería decirte que te llaman desde el trabajo.

— Diles que estoy enfermo y no podré ir. Muy enfermo.

— Yo creo que se va a morir. — me dice Ryland. — De sobreexitación

Suelto una carcajada sin poder evitarlo y Ross me abraza con fuerza ocultando su cara en mi cuello.

— Vete Ryland... Quiero estar con mi chica a solas.

Ryland sonríe de lado y me guiña el ojo antes de irse. Ya me agrada.

— Con que soy tu chica... — murmuro divertida.

— Completamente mía.

Sonrío ante la idea y lo beso con intensidad. — Prefiero esperar un poco para tener sexo... Me he dejado llevar.

Law Above Seduction RAURA (One shot)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora