Capítulo 15

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-¿Estás segura de que todo va bien? -Zayn reposaba un codo sobre la baradilla del pequeño balcón en el que Julie, él y yo nos encontrábamos. El moreno y yo sosteníamos un cigarro cada uno en la mano, yo con la intención de tranquilizarme tras la discusión con Louis y el, según me había contado, por puro vicio. Al verse rodeada de humo en un espacio tan reducido Julie se excusó y volvió hacía dentro, donde la fiesta continuaba ajena a lo que me acababa de ocurrir.

-Sí, no tienes que preocuparte. Es normal que Louis y yo tengamos cosas que discutir. -Continuaba excusando su comportamiento delante del resto del mundo cuando lo único que debería hacer es contar la verdad. -Es verdad que no lo ha hecho de la mejor manera pero no se lo tengas en cuenta, por favor.

-Es mi amigo al fin y al cabo, pero tendré que hablar con él seriamente de todas maneras. -Dijo antes de dar otra profunda calada a su cigarro. No me gustaba la manera en la que estaba hablando.

-Si es por mi sabes que no lo tienes que hacer -Le miré frunciendo el ceño, dándole a entender que hablaba en serio. -Esto es una cosa entre él y yo y es a nosotros a quienes nos toca solucionarlo.

No estaba nada cómoda con el rumbo que estaba tomando la conversación y mucho menos con las intenciones de Zayn. En el fondo eran buenas, pero no las adecuadas para mi, ni para Louis y la delicada situación que teníamos entre manos.

-¿Qué ha pasado que sea tan importante? Quiero decir, pensaba que él ya había superado lo que pasó. Según nos dijo así fue. -Tal y como pensaba, Zayn volvió a meterse con ese tema, intentando entender, algo que era comprensible, pero no viable.

-¿Qué quieres que pase? -Pregunté con la misma medida de enfado e ironía. -Que es gilipollas, eso es lo que le pasa. ¡Os ha mentido a todos! -Me frené a mi misma y me vi obligada a reformular la frase para no soltar lo único que tenía ganas de decir. Por muy alterada que estuviera, algo hacía que las palabras no salieran de mi boca cada vez que tenía intención de hacerlo. Me mordí el labio inferior con rabia y por fin di con la manera adecuada de expresarme. -Nunca llegó a perdonarme.

La cara de Zayn pasó de interrogarme con la mirada, prácticamente suplicando que hablara, a estar algo más relajada cuando dije lo último con calma. Sin decir nada más pasó su brazo derecho por encima de mi hombro, haciendo que apoyara mi cabeza en su pecho. Estaba intentando consolarme y no sabía ni lo que me pasaba realmente. Cerré los ojos resignada y di la última calada a mi cigarro que prácticamente se había consumido mientras hablábamos sin que lo pudiera disfrutar.

-Vamos para dentro, anda. -Le pedí incorporándome ligeramente.

El resto de la noche la pasé bailando con Julie, a quien le prometí que le contaría todo en cuanto saliéramos, que en ese momento no me apetecía hablar. De vez en cuando podía ver a Louis por el rabillo del ojo mirándome. De vez en cuando también, le devolvía alguna mirada. En una de esas ocasiones le dirigí un gesto interrogante entre la multitud, a lo que él me contestó agitando ligeramente la cabeza en negación con una media sonrisa dibujada en su rostro.

Odiaba cuando no se tomaba las cosas en serio. Acabábamos de discutir y ya me había metido en el juego de las miraditas. Aparté la vista de él, le sonreí a Juls y mientras bailaba distraída me las arreglé para sacarle el dedo de una manera disimulada, sin dejar de mover los brazos al ritmo de la música. Aquello no le provocó otra cosa que risas. Cada vez se le notaba más el alcohol en sangre, así que decidí pasar de él.

Durante el tiempo que estuve por allí tuve oportunidad de hablar con los otros tres miembros de la banda, a los que solo les dije lo superficial, “Zayn y yo nos encontramos y decidió invitarme, pero parece ser que Louis no se lo ha tomado muy bien”. Ninguno de ellos quiso indagar más, lo que fue un alivio. Se limitaron a recordarme viejas anécdotas de Xfactor y, en parte, pude ver como Zayn tenía razón: se reían y disfrutaban hablando de esos buenos momentos y seguramente (en caso de que las copas que habían tomado les dejasen) cuando se acordaran a la mañana siguiente les motivaría para continuar la mitad del tour que tenían por delante.

A una hora bastante razonable, decidí coger a Julie del brazo y arrastrarla hasta la puerta del local para por fin, irnos a casa. Mientras avanzábamos entre el gentío, que había incrementado desde que llegamos después del concierto, noté como me agarraban del antebrazo, empujándome hacia atrás, haciendo que soltara a Julie. Antes de que pudiera girarme, noté unos labios posarse en mi cuello, justo bajo mi oreja. Al momento supe de quien se trataba, inluso antes de que me susurrara con una voz rasposa y bebida:

-No se lo digas a nadie, pero te necesito.

Notaba el aliento cálido de Louis chocando contra mi cuello mientras pronunciaba esas palabras, provocándome un escalofrío. Volvió a depositar otro beso y en cuestión de un segundo soltó mi brazo. Instantáneamente me giré, pero la única imagen que pude presenciar fue la de su espalda haciéndose espacio entre la gente. Inspiré todo lo profundamente que pude y retomé mi camino hacia la puerta de salida.

Una vez hube llegado uno de los porteros me tendió una pequeña bolsita que le daban a todos los asistentes a la salida. Julie me esperaba allí algo desorientada, buscándome con la mirada, aunque mi retraso hubiera sido de escasos segundos. Le dediqué una sonrisa que indicaba que ya podíamos salir.

Varios taxis esperaban en la puerta, lo que era una verdadera suerte, ya que llovía a cantaros.

Cuando ambas estuvimos metidas en el vehículo, le dimos la dirección al taxista. Vi a Julie abrir la bolsa que nos habían dado y decidí hacer lo mismo. Era un bolígrafo con la silueta de los chicos en él. El mio concretamente tenía la de Liam.

-A mi me ha tocado Louis. -Comentó despreocupada mirando mi bolígrafo. -Si quieres te lo cambio.

-Hazme el favor de callarte que vas borracha. -Le reprimí molesta. En otras circunstancias la broma seguramente hubiera hecho gracia, pero no estaba nada de humor y mucho menos al comprobar que era la única que quedaba medianamente sobria aquella noche.

Ambas estuvimos en silencio durante unos instantes hasta que Julie volvió a hablar de repente.

-He hablado con él. 

-

Holiiii chiquitinees,

con más retraso que nunca y un bloqueo de tres pares de narices aquí vuelvo. 

Me ha costado lo suyo escribir este capítulo para que al final me saliera semejante caca, pero algo tiene que hacer de puente entre las situaciones, lo siento muchi. 

Tenemos juegos entre Alice y Louis otra vez, vuelta a las mentiras delante de la gente y una amiga borracha que a estas alturas del cuento se decide a soltar que ha hablado con él, ¿como creéis que habrá sido la conversación? ¿habrá tenido algo que ver para que Louis tuviera ese gesto cuando vio que Ali se iba? ¿o lo habrá hecho por la plana y básica razón de que es un señor picaflor? Bueni, veremos si en el próximo alguna de estas cosas se ve. 

Millones de besitos a las que leen comentan y votan, (las que no, podéis hacerlo, ¡es gratis!) y ante todo me gustaría dar las gracias a Julia, que es un amor de chica, por recomendarme y hacer que más gente pueda llegar hasta aquí. Si alguna de mis lectoras (que lo dudo, pero bueno jajajaja) no la conocéis, os recomiendo encarecidamente sus historias en @Ladydirectioner. 

Voy a hacer todo lo posible por centrarme un poquito más y llevar continuidad, de verdad, me lo prometo a mi misma jajajaja

Un besitin enorme a todos y mil gracias por las más de 3000 lecturas que hemos alcanzado hoy. No podeis imaginar la ilusión que me hace<3333

Morning (Louis Tomlinson) // Actualizaciones lentasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora