Te sigo amando, weon (#2)

CIENTO DIECISÉIS

[narrado]

-¡No voy a llamarlo! -grita la Vale mirando su celular como si fuera una bomba.

-Bien, yo lo hago. -dice la Xime sacando su celular de su chaqueta.

La Xime se alejo un poco y empezó a hablar se demoró un par de minutos, luego volvió y se cruzo de brazos. Antes de que alguien dijera algo se puso a anotar algo en una servilleta.

-Toma ahí esta la dirección. -dice la Xime pasándole la servilleta al Javo.

El Javo busco en google maps y luego todos comenzaron a ir hacia el lugar, la Belén llevaba en brazos al Gabo y todas iban revisando cada 5 segundos que la Vale no fuera a desmayarse.

Cuando estuvieron frente a la casa donde estaba quedándose el Dano, la Vale se echo hacia atrás y la Janis con la Cona la agarraron de los brazos.

-Ya no sé si puedo... me preparé todo el camino mentalmente y ahora ya no recuerdo ni como se respira.

El Javo rodó los ojos y agarro a la Vale de los cachetes.

-Mira, rucia, vai a ir hacia allá, vas a tocar esa puerta y vai a pedirle hasta tirá en el suelo que hablen... porque necesitan aclarar todo y si deciden volver pues genial, pero sino entonces nos vamos y conocerás a alguien más, y podrás ser feliz de nuevo.

La Vale asintió y camino hasta la puerta toco dos veces con los nudillos y espero mirando de reojo a sus amigas.

La puerta se abrió y apareció el Dano sin polera con solo un buzo adidas.

-¿Vale? -dice el Dano confundido antes de acercarla hacia él y abrazarla con fuerza.

La Vale tenía puras ganas de comercelo entero.