Confesiones (GOT7 MARK)

Capítulo 2

Desperté con mis ojos ardiendo y mi cuerpo adolorido. Miré el reloj y vi que eran las 2:00 pm ¿Cómo demonios dormí tanto? La luz que entraba a la habitación me molestaba a tal punto que maldecía inútilmente. La llamada proveniente de mi secretaria rompía mis tímpanos y cabeza. 

- ¿Qué? - conteste de mala gana

- Señor Tuan todo esta listo para que baje al desayunador y coma - La voz tediosa de Emmy se escuchaba por el altavoz de mi teléfono - .. y no olvide que hoy tiene la reunión de.. - 

- No me importa, cancela todo - la interrumpí 

- Pero señor Tuan esta es la última vez que... - 

- ¿Que no escuchas Emilia? ¡que la canceles! - 

- MIRA TUAN - tomó un respiro antes de seguir hablando - entiendo que estés mal y deprimido pero no voy a tolerar que me trates de cualquiera cuando te he estado ayudando con la empresa -

Suspire hondo - Lo siento Emmy - tenía razón, después de todo fue la única que se quedo a mi lado apoyándome en esto - me deje llevar, perdón - 

Supiró- Disculpas aceptadas.. ahora solo ve y vive mejor que ayer -

- Como si pudiera pero gracias de todos modos.. intentaré ir a la reunión, pasame la dirección y la información que necesito - 

- Todo lo que necesitas esta en el desayunador, junto a la comida - se escuchó la puerta de su auto cerrándose - hablamos después, necesito dejar a mis hijos a la escuela - 

- Perfecto.. ten cuidado - 

- Tu también - 

*fin de la llamada* 

Bajé a desayunar, leí todo lo que necesitaba saber de la famosa reunión y me duché. Mientras dejaba el agua recorrer mi cuerpo escuché el timbre de la puerta. Como no le di importancia, el timbre siguió sonando hasta desesperarme. 

- Ya voy ya voy - me puse mi bata de baño y salí a matar a la persona que había interrumpido mis pensamientos. - ¿Qué desea? - dije cuando abrí la puerta sin casi fijarme en la persona detrás que estaba del otro lado de la puerta

- Hoo-laa - 

Era ella. Se veía más delgada, pálida y sin el brillo en sus ojos. Su ropa parecía como si nunca se la habría cambiado durante bastante rato, lucía mal, lucía diferente. 

- ¿Mark? - 

Su cabello corto y despeinado, su rostro mostraba dolor, y su vientre.. bueno aún estaba algo hinchado. 

- ¿Mark? - 

Mi corazón y mi cuerpo seguían inmóviles, rotos y pegados en un solo lugar. Solo mi mente trabajaba con tantos bombardeos de teorías e imaginaciones de donde pudo haber estado para regresar en ese estado, o como hizo para llegar. 

Sus ojos miraban los míos con preocupación. No pude evitar cogerla del brazo, cerrar la puerta y llevarla hacia la ducha. 

Con cuidado le quite su ropa y la abracé con todas mis fuerzas mientras las gotas de agua mojaba nuestros cuerpos. 

- Te amo - fue lo único que pudimos decir después de tanto tiempo.