ETERNAL | Andy Biersack | Alissa Lindberg

6

Su emoción al estar sobre lo escenarios era algo que nadie entendería, ese Andy era enérgico, alegre y se veía saludable al estar cantando. Tal vez su emoción fue más lejos, pensando que saltar de un parlante a otro de al frente se vería increíble.

Pero no tenía en cuenta de que el rostro de Alissa se le cruzaría, tropezando y fracturándose las costillas.

—Te contaré todo, al menos todo lo que sé. Calíope llegó aquí desde el primer curso, yo llegué un poco después así que no sé mucho se lo que pasó antes, pero si te interesa preguntale a Ashley. Según lo que dicen, su padre biológico abandonó a su madre apenas supo que estaba embarazada, así que ella se quedó sola junto a los que son sus abuelos; su madre era drogadicta y narcotraficante, no era peligrosa y se cuidó demasiado en el embarazo para evitar enfermedades o malformaciones. Cuando nació Calíope, su madre volvió a su adicción, hasta matarse. Calíope fue criada por sus abuelos y por su tía, sin embargo, su madre tenía una enorme deuda con la mafia, así que desde los 10 años comenzó a trabajar para ellos, al poco tiempo ya tenía armas y sabía buscar los problemas, pero nunca pudieron sacarla del instituto por más problemas que hiciera.

—¿Por qué?

—Por sus buenas calificaciones, es la mejor en matemáticas, lengua y ciencias, es un genio la chica, y sería perfecta si no fuera por la parte de las drogas. Desde que tiene 14 años ya vendía droga dentro del instituto, marihuana, cocaína, pasta base, heroína, todo lo que quieras ella lo tiene. Su único amigo es Elián, es más sociable y si te interesa puedes sacarle información, pero con cuidado, igual está armado. ¿Alguna otra cosa?

—¿Crees que Elián me diga algo?

—Lo dudo realmente, pero siempre puedes hacer un intento. Yo una vez le dije que era para saber su horario para una fiesta, así que puedes aprovechar la instancia que tienes trabajo con ella y preguntarle.

—Gracias Chris.

—De nada, pero yo que tu nunca me haría amigo de Calíope.

—¿Cómo has estado cariño? Me enteré sobre el accidente.

—Bien, aún duele un poco, pero ya no es nada.

—Me alegra saber eso, cuando vi el vídeo que unos fans subieron me quería morir, ¿no necesitas nada?

—Tranquila, tengo que estar una semana completa en reposo y después me harán otras radiografías para saber el avance. Los chicos estarán conmigo, así que no te preocupes.

—Está bien, te llamaré todos los días para saber de ti, cuidate mucho, te amo.

—Yo igual Juliet.

—Por cierto, me debes una —dijo terminando de comer su barra de chocolate.

—Creo haber pagado esa deuda.

—Corrección, pagaste la anterior. Está vez será algo más fácil.

—Dilo ahora, después no quiero sorpresas.

—Solo te lo pediré en un mes, ahora no lo necesito tan urgente.

—Está bien, como quieras, pero no haré nada de narcotráfico o cosas por el estilo.

—Nunca te metería en eso, tonto —rió.

Su semana le había parecido más corta de lo que él creía. Había encontrado algún que otro pasatiempo que antes no le daba importancia.

Sin embargo, su mente no había estado presente en esos días. Su memoria de ver a Victoria volvía como una grabación que se repetía una y otra vez.

Los recuerdos lo torturaban día y noche, como si su ausencia nunca hubiese existido, además se había tomado el tiempo suficiente para hacerse las preguntas más inexplicables.

¿Se habría vuelto un alcohólico si Alissa siguiera junto a él? Bueno, ya lo era, pero la duda es si ahora estaría vivo o muerto.

¿Seguiría componiendo canciones sin la finalidad de que ella supiera que la estaba buscando?

¿Habría salido con Juliet con la única finalidad de que Alissa cerrará la boca?

¿O simplemente seguiría todo igual?

Y su peor temor es que para todas había un porcentaje que fueran ciertas como también que fueran erróneas. Alissa ya era alcohólica, si tomaba se debía emborrachar, sino perdía la gracia. Las canciones no le preocuparon en lo absoluto, las seguiría componiendo, pero no con las mismas letras y melodías. Tal vez Juliet habría sido una escapatoria, pero solo por unos días. Dudaba que todo fuese igual, sin embargo le daba temor aquel universo paralelo.

—¿Qué pasa Andy? ¿Tienes miedo? ¿Estás nervioso? —dijo una vez que lo acorralo contra la pared de su habitación.

—Yo... —su garganta se rehusaba a formular alguna palabra, y para que hablar, sus nervios eran notables y el miedo de la vergüenza ante Alissa era más que evidente.

—Vamos, di algo —su paciencia se agotaba, si el chico no daba el primer paso, ella lo haría.

—Yo... —miró torpemente buscando su solución, y vaya que la encontró —. ¿Recuerdas? Tenemos un trabajo mañana, y no hemos empezado.

La esquivó y fue al escritorio, dándole la espalda a la chica para abrir los libros y cuadernos.

Suspiró, en su mente sus dudas crecían y las respuestas de otras eran más dudosas que antes.

Tal vez Andy no la quería como ella lo amaba. Y sus ganas de llorar eran enormes.

—Claro, iré a buscar algo para comer y vuelvo —dijo aguantando el mar de emociones, y sin dejar que él hablara ella bajo corriendo a la cocina.

Ya era de noche, sus padres no estaban así que para suerte suya pudo llorar unos minutos en silencio mientras preparaba algo de comer.

—Hey, Andy, debemos ir al doctor.

—Claro —se levantó con cuidado, y caminó junto a su amigo hasta donde estaba el auto.

El camino fue bastante corto, al menos para Andy, el cual no pudo dormir en toda la noche, ansioso esperando alguna respuesta a sus dudas.

Para cuando llegaron al hospital, Andy varias veces creyó ver a Alissa observándolo, sin embargo no decía nada ya que solo sabía que era parte de su imaginación.

—Bueno señor Biersack, la recuperación fue exitosa, pero no debe hacer ejercicios bruscos y si le duelen a veces solo tome unas pastillas para el dolor.

—Está bien, muchas gracias por todo doctor.

—Debo de igual manera informarle que una chica estuvo preguntando por usted algunos días.

—¿Quién? —un pequeño rayo de esperanza en su voz.

—No recuerdo el nombre, lo siento, pero era una chica alta —No —, rubia —No — y muy delaga —No, Juliet.

—Bueno, gracias por al menos la descripción, ya sé quien es.

Dejó rápidamente el hospital, Chris se tardó más, y sin saber que lo escuchaban se disculpó por Andy por su actitud.

—Disculpe a mi amigo, por 4 años ha estado buscando a una amiga que desapareció y aún no lo supera.

—No se disculpe, y lo lamento por eso, pero su necesitan ayuda hay unos buenos psiquiatras que lo pueden ayudar