Príncipe de Lobos

Capítulo 11: Milk

—¡¿Qué hiciste qué?! -Milk interrumpió abruptamente a su madre mientras le estaba diciendo a Lily Satan que había invitado a Goku y a Los Henry por pizza-.

—Hola Pan -dijo la mamá de Milk, ignorando el arranque de esta-. Te quedarás para cenar ¿cierto?

—Si eso te parece bien -respondió Pan dulcemente-.

—Cuantos más, mejor. Vamos a jugar también ¡será divertido! Bulma también vendrá ¿no? -preguntó Lily-.

—Si madre, ahora ¿podrías decirme porque te interesa tanto Goku? -preguntó Milk a su mamá-.

—¿Podrías decirme que tienes en contra de él que tienes tanto miedo a conocerlo? -respondió su mamá-.

Milk no entendía. Quizás su mamá pensaba que porque ella y Trent se habían separado, empujar a otro chico hacia ella la ayudaría a avanzar. Sí, había sido un poco difícil para Milk; ellos habían salido por casi dos años. Pero su mamá no había notado que ya había avanzado, habían pasado como 2 meses desde la última vez que ella y Trent se habían visto y apenas había pensado en él. De hecho, en las últimas 24 horas ni siquiera había pensado en él. Decidió dejarlo pasar; reconocía una batalla perdida cuando veía una.

Milk miró a Pan y la animó a ir arriba.

—Estaremos arriba mamá, probablemente Bulma llegue más tarde, dijo que comería con sus padres, pero espero que llegue para el juego de esta noche -dijo Milk simulando emoción-.

—Mantén esa actitud Milk y verás lo que obtienes -dijo Lily severamente-. Lily raramente se cruzaba con Milk y cuando eso sucedía ella sabía que era mejor ir escaleras arriba antes de que su gran bocota la llevara a trabajar a la librería cada viernes y sábado por el resto de su último año.

Una vez en la habitación de Milk, Pan se sentó con las piernas cruzadas en el piso y miró la colección de CD. Escogió el disco favorito de Evanescente de Milk y lo puso en su estéreo. Una vez que la música sonó lo suficientemente alta como para mantener los oídos indiscretos lejos de su conversación, miró a Milk y le dijo: —Así que, vamos a oírlo, ¿qué sucedió cuando Bulma y yo nos fuimos?

Milk pensó en el momento en el que se dio cuenta que la voz que escuchaba era la de Goku. Cuando él le habló en rumano, no tenía ninguna duda de que en verdad era su hermosa voz en su cabeza.

—Bueno después de que se fueron me recosté en la cama, a relajarme, ya sabes, organizar mis rollos y mientras estaba en eso, la voz volvió a mi cabeza, él me preguntó si estaba asustada y me dijo que no había sido su intención -explicó Milk-.

—¿Él? -preguntó Pan-. —¿Así que es Goku? ¿La voz en Goku?

Milk asintió con la cabeza y añadió: —Finalmente lo confirmé cuando me habló en rumano y honestamente Panny, si vas a escuchar voces, ¿por qué en la tierra, escucharías una que hable rumano?

—Bueno, eh, quizás ¿por qué secretamente tienes la fantasía de huir con un hermoso rumano noble a su hermoso castillo de hielo? -Pan lo dijo con una pizca de melancolía en la voz-.

—Oh, sí claro, pase totalmente por alto una respuesta tan plausible -dijo Milk volteando los ojos-.

—¿Bueno y por cuánto tiempo hablaron? -preguntó Pan y cuando dijo "hablaron" levantó las manos haciendo el signo entre comillas-.

—Después de que me habló en rumano y le pregunté si era Goku, tú sabes, solo con el propósito de aclarar.

—Definitivamente es mejor estar claros con eso -interrumpió Pan-.