—No te había hablado de los demonios porque son seres inferiores a nosotros, no encajan en la jerarquía. Sin embargo, son cruciales para el desarrollo de armas así que dependemos de su existencia. Resulta irónico a la vez que penoso.
Jacqueline estaba en completo silencio. No sabía cómo encajar ese eslabón en aquella cadena infinita.
—¿Entonces me estás diciendo que usáis armas mágicas? —murmuró ojiplática. En su mente había imaginado un colegio de brujos y brujas con varitas y escobas voladoras.
—Claro que no. —Negó con la cabeza—. Borra esa sonrisa, no somos hechiceros. Los demonios son seres vivos, así que esto no tiene nada de magia. Es comparable a cómo los humanos utilizan a los bueyes para arar sus tierras, son solo herramientas. Y no piensas que el arado es mágico, ¿verdad?
Jacqueline también negó con la cabeza.
—Deben de ser herramientas muy valiosas si son necesarias para matar a un Hijo de la noche. ¿Ellos están a vuestra completa disposición gratis, aún sabiendo lo necesarios que son?
A pesar de que no fuesen miembros de la jerarquía le parecía muy cruel la manera en la que eran tratados. Ella les comprendía más que nadie en eso de ser tratados como objetos o monedas de cambio.
—No lo entiendes, Jackie. Entra en contacto con un demonio y te darás cuenta de que lo único que quiere es tu propia destrucción. Son animales sanguinarios en busca de la presa adecuada, y cuando la encuentran se aseguran de destruirla hasta sus cenizas. Ellos existen para ser usados o para ser destructores, no sientas lástima o jamás podrás poseer uno. Es algo que tendrás que comprobar por ti misma durante tu preparación.
Ella asintió en silencio de nuevo.
—Y esto nos lleva a lo último que quería contarte —prosiguió mientras cambiaba de postura—. No todo el mundo puede optar a cualquier arma demoníaca. Esto se debe a dos razones. Uno: los Alfas, Betas y Omegas no tenemos las mismas habilidades.
—Asumo que esa es la razón por laque se formó la jerarquía.
—Exacto. Por eso nos dividimos en tres razas. Los Alfas tenemos la particularidad de beber sangre para poder sobrevivir. Eso no significa que vivamos solo de ella, pero es tan imprescindible como el agua para vosotras. Los humanos nos pusieron el estúpido nombre de vampiros. Tenemos menos melanina que el resto de razas y los colores de los pigmentos en nuestros ojos y cabello también varían en pequeña medida respecto a vosotros. Es por eso que mis ojos son de tres tonos de azules diferentes y mi pelo roza el morado.
La chica chasqueó los dedos al conocer ese detalle que le traía de cabeza.
—Llevaba preguntándome eso desde el momento en el que te he visto.
Yoake se encogió de hombros, como quitándole importancia al asunto.
—En cuestión de habilidades, nuestro coeficiente intelectual es superior al de los Betas, pero nuestra fuerza física es incomparable a la suya. Por eso siempre optamos por equipamiento de larga distancia, como rifles, fusiles, arcos y ballestas.
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Omegaverse: Jerarquía
Ficción GeneralOmegaverse: donde ser suicida te hace especial. Tras su fallido intento de suicidio, la ya de por sí desastrosa vida de Jackie se vuelve aún más difícil; sus padres adoptivos la abandonan y es enviada lejos de ellos a un extraño internado llamado O...