✴️ Citrus One-Shots.~
" Donde Yuzu es pasiva - activa, tiene bikini, es una Diva, va con todo y Mei... Mei es Mei. "
Los One Shots no me pertenecen, están bajo nombre de su respectivo autor.
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—Yuzu levantante.
—Mrrgh.
—Yuzu. —Mei tiró de la cabeza de Yuzu. —No seas perezosa.
Yuzu se acurrucó en su propio cuerpo, gimiendo una vez mas. —Bebé, es domingo. —Ella gimió. —¿No hay una ley bíblica contra esto?
—Hay una ley bíblica contra todo lo que haces. —Replicó Mei tirando de la camisa de Yuzu. —Arriba.
Yuzu hundió su cara en la almohada y pronunció un silencioso "no"
Mei irritada fulmino con la mirada la cabeza rizada de cabello rubio.
—Yuzu.
Ninguna respuesta.
Maldición, eso había sido mucho mas efectivo cuando comenzaron a salir. Ella suspiro, después de haber descubierto que la honestidad era el mejor curso de acción. —Yuzu, tengo hambre.
Yuzu hizo un pequeño gemido lamentable antes de rodar, estirando su cuerpo. Cuando terminó de estirarse, abrió solo un ojo con una sonrisa perezosa adornando sus rasgos.
—Un buen beso de buenos días primero.
Mei apartó el pelo ondulado de la cara de Yuzu, inclinándose hacia abajo. Este era un ritual al que ella ya no miraba. —Buenos días. —Le dijo a Yuzu antes de besar tiernamente sus labios.
Yuzu gimió de placer en el simple tacto, ajustando su cabeza para inclinarse.
—Buenos días, nena. —Susurró ella, poniendo su mano detrás de la cabeza de Mei para mantenerla en esa posición. Mei se entregó a la codicia de Yuzu. Se besaban una y otra vez, cada uno mas persistente que el anterior. Sus suspiros y sonrisas eran suaves, tomando su tiempo para deleitarse en el simple placer del afecto de cada uno.
Esto debió haber sido un truco por parte de Yuzu porque antes de que Mei lo supiera, ella estaba de vuelta en la cama holgazaneando ese domingo por la mañana. Pasaría un tiempo antes de que tuvieran un desayuno real.
