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Taehyung para mi desgracia me llevo hasta mi casa en su carro, a pesar de que prácticamente le suplique por qué no lo hiciera, además de que me insistió en que me quedara la ropa después de un rato de repetirle que se la regresaría.

Me tiré en mi cama, y empecé a tratar de recuperar mis fuerzas. Yo no soy de una persona de alta sociedad como la mayoría de mis compañeros -y el- pero si vivo bien a pesar de pasármelo en casa las veinticuatro horas solo, vivo bien, soy el menor de dos hermanos, un alfa muy liberal y un omega muy sobreprotector. Mi celular comenzó a sonar con un numero desconocido, era algo realmente extraño, solo mis hermanos, mi madre y Yoongi tenían mi número de celular, como buena persona curiosa que soy tome mi celular y muy despacio respondí.

-La curiosidad mato al gato-

-H-hola. -dije.

-Hoseok-quede en una especie de estado neutral al escuchar la voz de mi progenitor del otro lado de la línea.

-Papá. -mencione en susurro.

- ¿Como has estado...Hoseok? - pronuncio.

-Bien... ¿cómo obtuviste mi número? -

-Se lo pedí a tu madre... solo quería saber cómo estabas. -

-Está bien -Por supuesto que no lo estaba, ese señor y yo jamás congeniamos por el hecho de que no soy su hijo de sangre, no tenemos una buena relación, pero tampoco me quejo, agradezco no tener del todo sangre de ese alfa alcohólico.

-Iré en unas semanas a verlos...- Eso me dejo completamente noqueado, mamá no se encontraba y el hecho de que creyera que mis hermanos estaban en casa me hizo pensar que venía solo para asegurarse de que no estén modelando por ahí o como él lo dice... dejando que otras personas los conviertan en putas.

-Tú puedes...-

-Puedo. - respondió de inmediato, se escucharon varios ruidos de papeles y voces del otro lado de la línea, continuo- Tengo que colgar... Hoseok. -

-Está bien... supongo. -

-Adiós. -

-Adiós. - Mi mano aún se quedó pegada en mi oreja junto con mi celular, tenía mi corazón desenfrenado, por supuesto, el hecho de tenerlo por aquí no era de mi agrado, y se claramente que yo tampoco lo soy para él. Cuando mi celular de nuevo comenzó a sonar sacándome de mi placentero terror y nerviosismo.

Baozi

- ¡Hola! - escuche del otro lado de la línea.

-Hola Baozi. - sonreí mientras me sentaba en la cama.

-Mira que si me recuerdas- escuche su risa- Pero no que crees que estas algo grandecito como para decirme mi apodo-

-No claro que no, además ustedes que no me hablan, claro ya son famosos y su hermanito sin estilo lo dejan. -su risa otra vez.

-Exageras como Jin, hobi-shi. - pude escuchar una queja detrás de él.

-A ver repite conmigo Hobi-shi. -

- ¿Que repita contigo que cosa? - pregunte extrañado.

-Xiumin

- ¿Es en serio? -

- ¡Dilo! -

-Xiumin. -

-Esta. -

-Esta. -

-En la puerta y se cansa-

- ¡Que! - salí corriendo de mi cuarto tratando de caerme, mientras esquivaba una buena caída escuché la otra voz de mi hermano mayor.

-Oye mocoso ábreles a tus hyungs que acaso no nos extrañaste. -

- ¡Jin! - no me importo nada tire por un lado mi celular, solo saque las llaves y abrí la puerta observando el deslumbrante brillo que los caracterizaba a los dos, no lo dude dos veces me tire directo a ellos dos. Aun que se quejaron me retuvieron con sus brazos tomando mi cintura.

-Cuidado te puedes caer. -dijo Xiumin- Hay mocoso mi ropa se arruga. -dijo Jin cuando correspondió mi abrazo.

-Y esa ropa. - hablo Jin mientras inspeccionaba la ropa una vez que nos separamos y entramos a casa- este no es tu olor Hoseok. - me dijo con cara de pánico.

-Esta noche será muy larga-

Xiumin y Jin prácticamente me bombardearon con un montón de preguntas y no pararon hasta que me cambie la ropa de Taehyung y les explique el por qué y cómo la obtuve, además de que para mí desgracia les tuve que contar que nuestro querido padre me llamo para decirme que vendría en unas semanas para vernos, aunque no tomaron en cuenta lo mencionado.

-Qué bueno. -menciono Jin- Seguro que no te hizo nada. -volvió a decir por encima vez.

-Que no Jin, él se portó bien conmigo. -susurre, pero obviamente Xiumin lo escucho.

- ¡Oh, por el amor de dios!, ¡el Hoseok, nuestro hermano menor, mi angelito, nuestro angelito está enamorado! -grito Xiumin.

- ¿qué? ¿de quién? - pronuncio Jin

-Hay Jin, del alfa que nos habló Hoseok-

- ¡Te gusta el alfa popular de tu escuela! -juraría que me puse demasiado rojo.

- ¡Yo no he dicho nada! -dije.

-Tendrán cachorritos lindos y con sonrisas cuadradas como la que dijo Hoseok. -

-Serán igual de lindos y con hoyuelos como los de Hoseok. -dijo Jin.

- ¡Sigo aquí! -dije.

- ¡Vamos! - se pararon tomándome de las manos.

- ¿A-a dónde?, si acaban de llegar-

- ¡A comprar ropa mucho que sea más linda y puedas tener a tu alfa! -me dijeron los dos- Todavía no es muy tarde, podemos alcanzar algunas tiendas y cenas algo en el centro comercial. - si querido Jung Hoseok tenías que ser hermano de modelos.

Cuando llegamos al centro comercial comenzamos a caminar, pero mucha gente comenzaba a observar a mis hermanos. La gran mayoría de sus fans se acerba y se quedaba con la boca abierta cuando ellos respondían -Es nuestro hermano menor- no las culpo no soy ni lindo ni guapo, pero soy seguro con mi forma de ser y de vestir.

Después de dos horas comprando cosas que mayormente me gustaron, me estaba comenzando aburrir, pero en realidad no me preocupaba el llegar tarde ya que no tenía tareas y quería pasar un gran rato con ellos, ya que casi no los veo.

- ¿Podemos irnos ya? -dije un tanto cansado

-Solo una tienda más. - me dijo Jin con un puchero que no pasó desapercibido por las personas que nos seguían.

-Está bien. - sonreí mientras Jin pasaba su brazo por mis hombros y me tiraba más cerca de él y comenzamos a seguir a Xiumin.

-Si definitivamente este será un largó fin de semana-


-OmegaVerse VHOPEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora