Capítulo 1: Volver a empezar

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Se oye el sonido del infierno, quiero decir, el despertador a las 6 de la mañana y así comienza un día mas en la vida de Victoria Aspen

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Se oye el sonido del infierno, quiero decir, el despertador a las 6 de la mañana y así comienza un día mas en la vida de Victoria Aspen.

Salvo que no es un día mas, el verano terminó y eso solo significa una cosa: es el primer día del último año de secundaria.

Perdí a mi padre cuando era pequeña asique vivo solo con mi madre y al ser hija única digamos que el instituto es un gran entretenimiento sobretodo si te va tan bien como a quien habla, a veces y solo a veces alardeo sobre ello. No es que sea una cerebrito sino que siempre, desde pequeña, he sido inteligente y solo estudiando lo indispensable. Volviendo al tema del instituto, soy bastante popular organizo bailes y esas cosas, me la paso en grande allí, estoy todo el día con mis amigas y no es que sea sentimental ni nada pero son lo mejor que tengo, casi hermanas, casi familia. Ellas dicen que soy la mas divertida del grupo, el alma de la fiesta y que estoy loca, cosa que no niego ni afirmo pero si diré que tengo una personalidad bastante peculiar: soy amable con quienes me caen bien, siempre trato de ayudar, tengo un gran sentido del humor que jamás se apaga y me considero algo fría con los sentimientos.

Una vez apagado el despertador hago un considerable esfuerzo por levantarme y arreglarme, porque nunca hay excusas para no arreglarse. Tomo mi mochila y bajo a desayunar algo rápido para posteriormente subirme a mi precioso bebé, digo, mi auto y conducir al instituto. Se preguntaran como tengo un auto y tantos otros beneficios si papá murió y mamá no se volvio a casar con ningún magnate, la respuesta es simple: mamá trabaja y paralelamente tiene otros negocios, además la pensión de papá resultó ser buena asique nunca tuve problemas económicos. No digo que sea millonaria pero si vivo comodamente. Una vez aparcado el auto me bajo, diviso a mis amigas y corro hasta ellas:

-No lloren mas por mí, ya estoy aquí. Digo saludando a mis tres amigas Ana, Emily y Astrid

-Veo que estas de buen humor, algo inusual para tus mañanas Vicky. Contesta riendo Ana que es mi mejor amiga y la que más me conoce, por lo tanto, mas se burla de mi

-Bueno, es el primer día, drisfrutenlo mientras dure.. Digo sonriendoles

En ese momento el timbre suena y todas nos dirijimos a clase: matemática. La profesora nos recibe y me siento en el ultimo puesto como de costumbre, al ser algo alta siempre ha sido mi lugar.

Luego de varias otras clases finalmente es la hora de irnos, voy caminando por el pasillo de salida viendo mi teléfono cuando siento que impacto contra un torso duro y al alzar la mirada veo una sonrisa arrogante que solo puede pertencerle a alguien en este mundo: el impresentable de Nick. No me malinterpreten, no es que no sea lindo el problema es que lo sabe y esa junto con otras cuantas cualidades negativas, llamense egoísta, insoportable, malpensado, playboy, desagradable, lo hacen una persona poco agradable para mí, para cualquiera en realidad.

- ¿Sabes? deberías tener mas cuidado, no vaya a ser que tan precioso ángel se lastime. Me dice coqueteando como siempre, lo que hubiera estado bien de no ser por el hecho de que nos odiamos: Yo sé como es y por eso lo odio, él sabe que lo sé y por eso me odia.

- ¡Nick, que sorpresa verte! pensé que durante el verano te habías ido a África y quizás te perdiste en un safari, es que nadie llega tarde el primer día de clases ¿sabes?. Y eso dejaba el marcador Vicky 1 - Nick 0 como siempre debía estar, ganar es bueno

- No fui a África pero si quieres te invito un trago y te cuento lo que hice durante el verano..podríamos continuar en mi casa.. Dijo con media sonrisa y sus ojos azules se encendieron

-Preferiría morir de sed. Dije imitando su sonrisa y seguí caminando hasta mi auto. Estaba acostumbrado a que yo lo rechace pero eso no significa que su cara se transformara cada vez que lo hacía. Además no iba yo a meterme entre el y su falsa perra, digo Caroline, su novia, quien por cierto me odia y desconozco el motivo.

Resulta que para mi segunda sorpresa del día, al llegar a casa, veo que unas personas parecen estar mudándose a la casa de al lado. Resulta que esas personas son los Miller y resulta que los Miller son los padres de Nick y puede ser que haya omitido el pequeño detalle de que mamá y la Sra Miller son amigas y hacían que Nick y yo jugaramos juntos de pequeños, creo que eramos amigos y después se convirtió en la horrible persona que es ahora. Dicen que Dios aleja las cosas malas de nosotros pero esto no es precisamente mi idea de alejar..

Solo espero no cruzarlo todo el tiempo, nuestros intercambios son divertidos pero estoy mas comoda con la idea de no verlo...





El amor tiene un límite, se llama dignidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora