Química legal

Capítulo 5

Capítulo 5

Llego hecha una furia a su oficina, nadie le dijo nada, no se arriesgaban a eso, pues si la enfadaban más, los mataría, ya conocían su famoso mal genio y estaba tan irritada que era visible, fue solo Erien, quien se atrevió a hablarle.

— ¿Qué tienes His?

—Yo... Es tu culpa Erien, le pregunte a Armand, si me era infiel.

— ¿Y lo es?

—No, pero se enfadó conmigo y yo con él, todo por mis reclamos y todo por tu estúpida psicología inversa, es tu culpa.

—Tú que me haces caso.

— ¡Erien!

Grito furiosa aventándole un matraz que él esquivo con habilidad y se burló de ella enfureciéndola más, pero un rato después, estaban trabajando como siempre, alegres.

—Ninfa y Náyade listas ¿qué hay de...?

—Nereida y Sirena listas.

—Hay que llevarlas al departamento de publicidad.

—Sí, supongo.

— ¿En qué piensas?

Pregunto al verla tan distraída, e intuitivamente, supo que no era por su pelea nupcial. Ciertamente no era una chica, pero siempre había poseído una gran intuición y aseguraba que dicho don, no era sólo cosa de mujeres.

—No en nada, bueno, mira me llego esto hoy.

Dijo enseñándole un sobre.

—Miller Softwercomp. ¡Wau es de una gran compañía! ¿pero que tienes tú que ver con ellos?

—Nada, pero Thomas Miller, es el gerente según sé, hubo un tiempo en que salí con él y ¡oh dios!

— ¿Oh dios? ¿Por qué? ¿Qué pasa?

—Es un citatorio ¿verdad?

Erien abrió el sobre y lo leyó.

—Sí, lo es para arreglar cosas amablemente, tienes...No mucho. Una semana para arreglarlo de manera oculta o te demandaran. ¿Por qué? ¿Qué hiciste?

—Nada, bueno una vez arruine un programa de Thomas, estaba enfadada con él, era mi novio, pero yo no quería acostarme con él todavía, así que como no le di lo que quería, me engaño con mi mejor amiga Josefina, por eso sabotee su trabajo, él no se dio cuenta entonces, pero ahora creo que al fin lo ha descubierto.

—Ya lo noto y puede demandarte ¿tomaste copia del trabajo antes de sabotearlo?

—Sí y se lo di a Nicolás Ranferi. ¡Oh no! Ahora él es...Es el dueño de...

—Sistemnicks y si lo copio y salió a la venta Softwercomp, puede demandarte por robo, sabotaje y plagio.

—Pero yo no tengo utilidad de ello, sería Nicolás.

—Tú le diste el disco.

Acuso Erien, preguntándose como Hiseli, pudo sacarse el titulo con lo tonta que era, ok, era buena en su trabajo, eso no lo discutía, pero en todo lo demás era una idiota, lo triste del caso, es que aun así le gustaba y, no, lo triste es que ella era una mujer casada.

—Bueno es que le pedí a él su ayuda para destruirlo, no tenía idea de que haría algo como esto, ¿qué hago?

—Quizás debas hablarlo con Armand. Al parecer el tal Nicholas, se aprovechó de ti y te uso para sus propios fines.