LA PROFESORA - TERMINADA

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NARRA-JOEL
-¿QUE QUIERES?, dije.
-HOLA SOY ALAN, NOS CONOCIMOS EN LA FIESTA, ¿ESTÁ JOHANA?, dijo ofreciéndome la mano.
-NO ESTÁ, dije.
Y de pronto se escuchó la voz de Johana desde adentro.
-¿JOEL, QUIÉN ES?
-CREO QUE ESCUCHÉ SU VOZ, dijo Alan y se hizo camino hasta la sala.
NARRA-JOHANA
Tomábamos el chocolate tranquilos hasta que Alan apareció en la sala con un ramo de rosas blancas.
-ALAN, le dije.
-HOLA JOHANA, VENGO A INVITARTE A DAR UN PASEO, ¿QUÉ DICES?, dijo.
-DICE QUE NO, dijo Chris hablando como pudo, FUERA DE AQUÍ.
Miré a Joel, quien me miró como exigiendo que dijera algo.
-ALAN, TENGO QUE HABLAR CONTIGO, le dije.
-¿OCURRE ALGO?, dijo él, cambiando de expresión.
Caminé hacia la puerta y salí de la casa.
-ALAN, NO PUEDO SALIR CONTIGO PORQUE, BUENO...
-TE GUSTA JOEL, LO SÉ, CUALQUIERA HUBIERA PODIDO NOTARLO, PERO SOY PASCIENTE, Y SABES DE MIS SENTIMIENTOS, VEO QUE ERES UNA CHICA QUE VALE LA PENA Y ESTOY DISPUESTO A GANARME TU AFECTO Y ADEM..
-NO, lo interrumpí, NO DIGAS MAS, ALAN, ESTOY SALIENDO CON JOEL, solté directamente.
No dijo nada por un momento hasta que:
-NO IMPORTA, ÉL ES UN CHICO INMADURO, NO DURARÁN MUCHO, ESTOY SEGURO.
Lo que dijo me tomó por sorpresa, cambié mi cara de preocupación a molestia.
-¿DE QUÉ HABLAS?, le dije.
-MIRA JOHANA, SERÉ SINCERO CONTIGO, SIEMPRE CONSIGO LO QUE QUIERO, SIEMPRE HA SIDO ASÍ, dijo con una voz fría, lo desconocí por completo, era un chico completamente diferente al que había conocido en aquella cafetería.
-QUIERO QUE TE VAYAS, NO TENEMOS NADA MAS DE QUE HABLAR, ADIÓS, le dije señalándole la calle con el dedo.
Y de la nada agarró mi mano y me jaló con fuerza hacia él.
-¿QUÉ HACES?, grité, SUÉLTAME.
-YA SUÉLTALA, dijo Richard que justamente salía de la casa y le atinó un golpe en la mandíbula tumbándolo.
-¿ESTÁS BIÉN?, preguntó.
-SI, MUCHAS GRACIAS, le dije.
Joel salió de la casa y vió a Alan tumbado y Richard muy molesto.
-¿QUÉ PASÓ?, dijo.
-NADA, SOLO QUE ÉSTE TIPO QUISO PASARSE DE LISTO CON NUESTRA RULITOS, dijo Richard aún molesto.
-¿ESO ES CIERTO?, dijo Joel tomando a Alan de la camisa, ESCÚCHAME, NO QUIERO QUE VUELVAS A ACERCÁRTELE, le advirtió.
-¿O TÚ QUÉ?, dijo Alan retándolo.
Joel nunca había sido alguien agresivo, pero en ése momento volteó y le dió un golpe tan fuerte que el moratón en el ojo izquierdo de Alan comenzó a notarse rapidamente.
Entramos a la casa, pasé toda la tarde comiendo palomitas y viendo películas acurrucada en el brazo de Joel, jugabamos a cuantas palomitas podíamos atrapar con la boca lanzándolas al aire.
Y cuando comenzaba a oscurecer el timbre sonó.
Fuimos los dos, y al abrir la puerta nos encontramos con un ramo de rosas en la entrada y una nota en él:
"Con amor: Alan"
-ESTO YA FUÉ SUFICIENTE, dijo Joel, agarró el ramo y salió de la casa.
Me senté en el sillón de la sala a esperarlo, pero entonces eschuché una voz de la esquina oscura entre las cortinas.
-AL FIN SOLOS.

Ok, el final me dió escalofrios escribirlo, pero espero les guste. 🙈