No entiendo

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Desperté en medio de la madrugada gracias al dolor inmenso de cuello y espalda por quedarme dormida en el escritorio, seguía medio dormida así que me dirigí a mi cama y volví a quedarme dormida.

Desperté un par de horas más tarde, aun adolorida. Me levanté directo a la cocina a conseguir algo de comer ya que tenía bastante hambre, me prepare algo rápido y fui a la sala a ver televisión.
Comía tranquilamente hasta que recordé lo que hacía anoche, entonces deje mi comida en el sillón y fui directo a la computadora a ver si había aceptado mi solicitud.

Cuando entre a revisar note que no había aceptado nada, necesitaba hablar con él ¿porque no aceptaba mi solicitud?

Cerré mi facebook y me metí a bañar; el agua caliente caía sobre mi piel, sentía tranquilidad y me sentía tan relajada que no quería salir. Estuve ahí dentro un buen rato hasta que decidí salir por fin para vestirme.

Al salir del baño, me acosté de nuevo en mi cama un momento pensando en Daniel, en esos tres besos que nos hemos dado hasta ahora y el porque ahora después de eso me ignora; me quede pensando en eso un rato hasta que me di cuenta que ya era algo tarde, así que me vestí junte mis cosas y ya cuando iba de camino a la puerta escuché como tocaban. Esperaba ansiosa que al abrir la puerta estuviera Daniel pero al abrir la puerta solo vi a Carolina y Víctor, eso me desánimo y me puso algo triste.

— ¿lista?   –me preguntó Caro.

— Claro   –dije con una sonrisa falsa en mi cara.

— Bueno, vámonos.

Todo el camino fui mirando a Carolina y Víctor, iban muy juntos charlando muy atentos y sonrientes, se les veía felices juntos aunque trataran de ocultarlo, eso me hizo sonreír y sentir algo de alegría por Carolina aunque también me hizo sentir algo de tristeza ya que yo quería eso y con una persona en especial.

Al llegar a la escuela quería despistarme un momento y dejar de pensar en Daniel. Cuando reconocí a alguien no dude en ir a su lado y al llegar a su lado comencé a hablar.

— Hola Sofia

— Hola Andy, ¿cómo estás?  –dijo mientras me saludaba de beso en la mejilla.

— Bien gracias, ¿y tú?.

— Bien también.

— Me alegra.

— ¿y a que se debe esta plática?  –me preguntó algo curiosa.

— Solamente quiero llevarme bien contigo, al parecer somos algo parecidas en carácter y eso hará que tengamos problemas a veces pero me agradas y quiero convivir contigo

Ella me sonrió, yo sólo pude devolverle la sonrisa algo forzada pero quería hablar con alguien para desahogarme y ella era la indicada para hacerlo.

— ¿te gustaría hablar un rato?  –pregunte algo tímida.

— Claro, cuentame ¿que quieres hablar?    –me dijo sonriente.

— Sobre todo   –dije suspirando.

Ella me vio con curiosidad y antes de que pudiera decir algo abrieron la puerta de la escuela, juntas nos metimos y nos dirigimos a las banquitas de la escuela, nos sentamos y empezamos a hablar, hablamos de muchos temas maquillaje, chicos, amigos, vida privada, secretos, problemas, de todo. Ambas nos dijimos muchas cosas íntimas, hablamos mínimo por unas 2 horas hasta que por fin me atreví

— Oye se que ya hablamos sobre este tema pero quiero preguntar algo, ¿tu y Daniel son novios?   –pregunté bastante nerviosa y algo triste.

Ella río un poco por mi pregunta supongo

Una chica en apuros. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora