Tu corazón roto era el mayor motor a seguir mintiendo.

139 18 6
                                    

JUNGKOOK

Intenté despertar a Jimin con un beso en los labios, pero al sentir mi boca sobre él, frunció el ceño aun estando dormido, me sentí... ¿Cómo decirlo? Rechazado.

-Jimin... -moví su brazo jalándolo un poco hacia mí-. Buenos días amor.

-Mmm -ronroneó moviéndose, dándome la espalda.

¿Estoy haciendo lo correcto?

-Buenos días, levántate, ¿quieres ir a comer por ahí? -jimin abrió los ojos lentamente, algo había cambiado en él y yo sabía él qué.

-Buenos días -dijo bastante apagado, se levantó de la cama e hice lo mismo, la tendimos sin decir palabra alguna y bajamos las escaleras- Jung... jungkook ¿quieres ir a casa de Yoongi? -dijo dudándolo bastante.

-¿Yoongi? -ladeé la cabeza un poco pensando en si era correcto decir la respuesta-. Yo... no lo sé.

Jimin sonrió, no lo hacía por felicidad, pero sonrió, las cosas no iban bien y yo podía notarlo. ¿Acaso no querían que esto sucediera? ¿No es mejor así?

A veces se puede fingir tanto que te crees tus mentiras, simplemente... ellas te atrapan y no te dejan escapar, soltarse parece una elección arriesgada, pero irme con ellas pareció tan sencillo, simplemente quiero seguir creyéndolo.

Jimin me ama tanto que no le importó llegar a este extremo, ¿Por qué lo permití? ¿Acaso no lo amo tanto como él a mí? ¿Acaso preferí engañarme con mentiras después de tantas cosas, aun pasando sobre mi Jimin?

Bufé aire y me senté sobre el sofá, Jimin me tendió un suéter, mismo que compramos la otra noche, él se puso una gabardina bastante larga y ancha, salimos y aun nevaba en las calles, era como si todos estuvieran más frio, incluso dentro de nosotros.

-¿Eres Jungkook cierto? -soltó jimin de repente camino a un restaurante, fruncí el ceño y le dirigí una mirada despectiva.

-Por supuesto -mentí; La persona que ahora hablaba era mi propio invento, el camino a la perfección, quien no sufriría porque aparentemente no recuerda nada-. ¿Por qué esa pregunta tan rara? -Me atreví a decir, aunque estaba más que obvia la respuesta.

-Quiero que regrese Jeon Jungkook -musitó al viento con agonía en sus palabras-. No sé si sea lo mejor para él, pero estoy harto de mentiras, quizá él no sea tan fuerte, pero yo tampoco lo soy, y no significa que no lo esté intentando.

Mi corazón se ahogó, traté de tragarme el llanto, porque este nuevo hombre no sabía de lo que park hablaba.

-Mmm -dije sin mucho sentido y llegamos un puesto de Hot Dogs, el mejor restaurante de todos.

Compramos un par de ellos y nos sentamos sobre una banca color blanco, jimin comía sin decir nada y yo lo observaba.

-Ahora que... -iba a decir algo, iba a decir algo realmente estúpido, pero lo merecía al igual que Jimin-. Sabes que no soy Jungkook -alcé los hombros sin importancia, jimin se echó a llorar-. Pero gracias a eso, ahora me puedes usar -sonreí amable-. ¿Quieres acostarte conmigo esta noche Jimin?

Tragué saliva, estaba mordiendo mi lengua, tenía tanto miedo de aquellas palabras, de tan solo imaginarlo, pero este nuevo hombre era diferente, él estaba dispuesto a una relación normal.

-Sé que cuando esté a punto de suceder... Jungkookie volverá, pero no quiero hacerlo de esa forma -Mencionó Jimin con una leve carcajada-. Vaya, este mundo es más mierda de lo que alguna vez pensé.

DRY EYES *JIKOOK* -TERMINADA-.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora