Un Cuento de Pesadillas (Finalizada)

LAS FLORES

La puerta de su habitación volvió a abrirse pero ésta vez con una nueva visita:

     - Hola. Muy dura la pelea ¿Eh? – Era Dark, con un humilde ramo de flores en mano.

     - Como no tienes idea, viejo. – Correspondió a quien llegó al lado de su cama y le dio un saludo de puño. – Gracias por venir.

     - Lo que sea por ver a un gran amigo. – Dejó el ramo en el florero. – ¿Qué noticias hay sobre el novio?

     - Ya está mejor, no he podido hablar directamente con él pero si le dije que lo amo y que quiero que despierte.

     - Ya veo, pues, les deseo lo mejor a ambos, no me cabe duda que estará bien para mañana.

     - Gracias amigo. Y de nuevo, gracias por venir.

     - Vine con gusto, ahora veré a las chicas y si me lo permiten, también veré a Félix. – Se despidió quien estaba a seis días de su cumpleaños dirigiéndose a la puerta.

     - Gracias Dark, te lo aprecio. ¡Oh! ¿Podrías decirle a tu novio que entre sí está?

     - Eh~ seguro, a ver qué me dice. – Salió y unos segundos después ingresó el mayor:

     - ¿Ocurre algo? – Se interesó Springtrap.

     - Sólo quería darte las gracias por~ ya sabes: correr a ayudarnos. – Reconoció rascándose la nuca.

     - Oohh~ eso, no lo hice por ti, tenía una deuda con Queen, por eso me preocupé. – No le importaba seguir siendo enemigo de la pandilla por eso no le daba pena admitir que si no era por Queen, no salía corriendo.

     - Aún así aprecio que hayas venido a la ayuda, escucha, no me interesa que ahora seamos como mejores amigos y eso, pero tenemos amistades en común y creo que es correcto que por lo menos nos mantengamos algo de respeto, tanto por Queen, Dark y Meg, así que~ ¿Qué dices, no más conflicto sin sentido?

     - ¿Hablas de odiarnos en silencio como las mujeres? – Era la conclusión de Springtrap.

     - Puedes tomarlo como quieras, yo sólo quiero cambiar para mejor, y sí para eso tengo que verte con otros ojos, no tengo problema. – Ofreció su mano en señal de respeto.

Springtrap rió con sutileza pero estaba de acuerdo con Deuz, ambos eran estudiantes de la misma escuela ya, no podían vivir siempre en el conflicto, Dark les tiene estima a ellos pero se mantiene a raya por el conflicto, no podía limitar la vida personal de su novio ni sus relaciones, sólo por Dark, haría un verdadero paso al cambio, se dirigió con el amoratado joven y estrechó su mano en señal de respeto y consideración.

     - Que te mejores, rata. – Se despidió y caminó hacia la puerta.

     - Hasta luego, perro piojoso. – Correspondió con una sonrisa más amistosa.

~~~

     - En verdad que eres un imán para los problemas ¿Lo sabías? – Le opinó Dark a Queen dejando el ramo de flores en el florero. – Desde que te conozco sabía que no había nada de natural en ti.

     - Ya ni me lo digas, una cosa es no ser rubia natural por gusto y otra es por reto, sólo estoy feliz de haber otorgado información valiosa a la policía, ya no tener que teñirme ni hablar con acento, y de que mis amigos estén bien. Es más, si Félix necesita un pulmón nuevo, yo le doy el que no me perforaron. – Aún en los peores momentos a Queen le gustaba ver el lado bueno a las cosas y dar una mano amiga.