Inmediatamente, luego de él decir "Al fin solos", me besó...
Desde ese momento empezó una hermosa historia de amor, ¿Saben?, él le dio un pequeño giro a mi vida, iluminó un camino oscuro y solitario.
Al salir de aquel ascensor, que desde ese preciso momento se convirtió en un lugar mágico para mi, pues ese había sido mi primer beso real, porque los picos no se deberían contar como besos, fuimos a donde nos habíamos abrazado mucho, que es acá mismo en el edificio, pero debajo de un techito, nos volvimos a besar varias veces, hasta que bajó Antonio, el padre de mi hermano, a los 10 minutos después de haber bajado llegaron a buscar a Roberto y tuvo que irse.
Al subir me fui a mi cuarto para comer y ver televisión un rato, esa noche fue la mejor, no podía dejar de pensar en aquel acontecimiento tan bello, luego de irse el padre de mi hermano, mi madre y yo nos sentamos a hablar sobre Roberto. Mami se dio cuenta que Roberto me atraía, y su primera impresión fue que parecía buen muchacho, recuerdo que pasamos TODA la noche hablando sabiendo que teníamos clase al otro día, fui cansada al liceo pero no dejaba de pensar en él.
Le conté a una amiga sobre él y sobre lo bien que me sentí cuando me besó, ella decía que él sería posiblemente el "indicado", la persona que estuviera al pendiente de mi en todo momento, aquel que no se fijaría solo en el físico, sino también en los sentimientos, en mi forma de pensar... Pero la verdad es que era muy joven para pensar eso, sin embargo de algo estaba completamente segura...
El estar con él me encantaba, estaba viendo el mundo de diferente color y hasta podía escuchar el hermoso sonido del viento pasando por todos lados.Por supuesto que pasaron algunos meses antes de poder ser novios, teníamos que conocernos y cada noche hablábamos más y más. Para mi sorpresa descubrí que en la institución en la que antes estudiaba, el estaba conmigo en la misma clase.
Pasaron 3 meses y todo iba muy bien, se llevaba bien con mi madre. Roberto se fue convirtiendo en una persona un tanto importante en mi vida, algunos pensarán... "¿Pero como apenas teniendo 14 años puedes pensar eso o siquiera pensarlo si es pronto para decirlo?", pues... Mis queridos lectores, descubrí que el pasar por tantas cosas en el lugar donde vivía, a pesar de mi edad y todo lo demás me volví una persona más madura y no sólo eso, sino que esa persona, esa maravillosa y hermosa persona me apoyaba y me ayudaba a ser fuerte, era un pilar en mi vida, siempre estuvo cuando más lo necesité.
En fin, al pasar esos 3 meses, exactamente en Diciembre, el 12 de Diciembre, la institución donde estudiaba hacía una fiesta para celebrar que el mes de la navidad, el mes espiritual empezaba. Ya le había hablado a él sobre esa fiesta y le pedí que fuera para que pudiéramos vernos allí, ya que tenía semanas sin verlo.
Al llegar al lugar estaba nerviosa porque iba a presentarselo a mis amigas, estuve caminando mucho con ella adentro de la institución describiendo como era, como me trataba, las cosas hermosas que me decía, la manera en la que me miraba, su hermosa sonrisa... Entre muchas otras cosas.
Cuando de repente mi teléfono sonó...
¿Qué es eso?, ¿Acaso fue un mensaje del señorito? . - Pregunta Coromoto.
Es un mensaje, seguro es mi mamá preguntándome como la estoy pasando, ya saben como es ella. - Dije casi segura.
Si claro, Chiquinquirá saca el teléfono, quien quita y si es Roberto y no tu mamá. - Dice Alexa con un tono un tanto sarcástico y pícaro.
Ok, veré quien es. - Dije, para evitar que ellas siguieran diciendo cosas como esas, sabiendo lo ruborizada que me solía poner.Soy una persona muy penosa, así que hasta la más mínima cosa me hace sonrojar o me comienzan a dar ataques de risa.
Bueno, saque el teléfono y lo revisé, para mi sorpresa Coromoto y Alexa tenían razón, era Roberto, diciendo que ya había llegado y estaba buscandome. Enseguida levanté la mirada y mis amigas se emocionaron porque sabían que el mensaje era de él, se levantaron de donde estaban sentadas para ver que decía. Rápidamente caminamos para encontrarlo, en la tercera vuelta que dimos revisé el teléfono para ver si me había enviado, ya que no lo encontrábamos, cuando de repente levanté la cabeza y me di cuenta que él venía hacía mí, aunque pude notar que estaba con alguien más, cosa que me parecía extraña.
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La Vida De Una Adolescente
Teen FictionNo todo en la vida es color de rosa. La vida es como una montaña rusa, tiene sus altos y bajos, nuestro trabajo es ser saber sobrellevarlos. Todos tenemos problemas unos mas fuertes que otros. Somos seres humanos, cometemos errores, pero la pregunta...